todo empezó con un sueño

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SAM

Cuando abro con mucha dificultad mis ojos, me doy cuenta de que estoy en casa, en el sótano, hay un espejo justo delante mío, apoyado en la pared, me miro y, me veo horrible, pálido, con ojeras, un moretón en el ojo izquierdo, con la nariz y boca sangrando levemente. Hay silencio absoluto, miro a mi alrededor y visualizo una cámara enfocándome, dos minutos después, se escucha abrirse la puerta, y entra Juan, qué hace él aqui?

- Juan? qué haces aquí? ayúdame a salir de aquí, no se lo que está pasando- consigo decir.

Juan sólo me mira y esboza una sonrisa irónica.

-Sam...de verdad no sabes lo que está pasando aquí? Estás atado a una silla en tu propio sótano por culpa de tu hermanita- dice Juan con pena sarcástica

-De qué hablas Juan? Breaden no ha hecho nada, ahora suéltame- no entiendo nada de esto, la verdad.

-Oh no, yo no te diré nada, y tampoco te soltaré, y ahora llamemos a tu hermana.

BREADEN

No os a pasado alguna vez que vuestra vida parece un delirio, que todo parece salir de vuestra imaginación­? Porque, pensándolo, mi vida parece sacado de una novela fantástica, un mal chiste.

Con dificultad me levanto de la cama, recordando mi pequeño incidente con Daemon anoche, bajo a la cocina, y como no, él está ahí. Estoy tomando mi café en la magnífica compañía de Daemon, cuando mi teléfono empieza a sonar y veo un número desconocido.

-Si?- pregunto con un tono inseguro.

-Breaden, que alegría me da escuchar tu voz- dice una voz que conozco perfectamente al otro lado. Daemon ve mi cara pálida y automáticamente se acerca a escuchar- verás, estoy en tu casa con tu hermano, y se pregunta que qué está pasando aquí, harías el favor de explicarle el porqué está en peligro por tu culpa? ah, y que sea personalmente..

Deamon me hace señales de que le diga que en una hora estoy allí, se lo digo, y cuelgo.

- Se puede saber quién era este tío??

- Mi primo, el que me secuestró e intentó matarme- le contesto con una ligera risita preocupada.

-Ve a coger las armas, yo voy a llamar a Tom, y vamos a salvar a tu hermano, te lo prometo..- Daemon me lo prometió, como esas promesas, que si no cumples, te odiarás el resto de tus días. Con una sonrisa forzada, me dirijo al arsenal, de verdad, que cada vez que entro allíme quedo fascinada por tantas armas.

Un rato después ya estamos en el todoterreno yendo a mi..antigua casa, a mi antiguo hogar..

Aparcamos unas calles antes de la casa, para a ver si podemos darle aunque sea una pequeña sorpresa, me encuentro en medio de Tom y Daemon, con las manos temblorosas, pongo el arco en mi hombro, Daemon, al sentir mi miedo y ver que tiemblo como un cachorro recién bañado, me coge la mano, y mientras me mira, avanzamos hacia la casa. Tom al ver eso, sólo aprieta la mandíbula y sigue andando.

ya en la casa (narrado desde el punto de vista del narrador)

Que maravillosa sorpresa, os estaba esperando para más tarde, pero es igual, yo, al cotrario que tu, he venido sin guardias, como puedes ver- Juan está sentado en un sillón, hablando como si lo que está haciendo fuera lo mas normal del mundo. Sam está en medio de la sala, atado a una silla y con varias heridas en la cara, viendo a Breaden con los ojos muy abiertos al ver que tiene un arco casi de su tamaño.

Daemon aprieta los puños y ataca a Juan, éste, alza la mano y lo lanza contra la pared; Tom empezó a decirle algo en griego que no entendió, Breaden aprovechó para cargar su arco y antes de que la viera, le dio en la pierna derecha, entre gritos y maldiciones, sacó una beretta e intentó darle a Breaden, en ese momento Daemon cortó por la mitad la bala, nadie se dio cuenta cuando Daemon se recuperó del golpe, pero salvó a Breaden, después de una mirada bastante profunda entre ellos dos, volvió a cargar el arco y volvió a disparar, le dio, y así otras dos veces; Juan, ya sin fuerzas para más hechizos, ya que se está desangrando, Tom se acercó y le dio un golpe en la cabeza, haciendo que se desmayara, mientras lo ata  con ayuda de Daemon, Breaden va a desatar a su hermano, que tiene cara de estar traumado de por vida, pero en esa mirada también hay orgullo hacia su hermana.

DAEMON

Después de atar a Juan con la ayuda de Tom, y ver a Breaden ayudar a su hermano a levantarse e irse al coche, me sentí realmente bien, me sentí bien por cumplir mi promesa.

-Oye, Daemon, que fue eso de cogerle la mano a Breaden antes de entrar?- dijo Tom con un tono de celos

-Me di cunta de que estaba aterrorizada, estaba temblando del miedo, le cogí la mano para tranquilizarla, nada más, no te preocupes primo, es todo tuya, ya sabes que yo paso de tener lazos sentimentales con nadie- sé que mentía, es extraño como en tan poco tiempo uno puede encariñarse de tal forma con alguien. 

-Mmm está bien, por si acaso te repito las palabras de tu padre: no te acerques a ella, de ninguna manera- si, efectivamente estaba jodido, y Tom también, ya que no se iba a quedar con ella de ninguna forma.

Horas más tarde, entro a la habitación donde dejamos a Sam para que descansara, mientras Breaden se ducha, y ya mañana le contaremos lo que tenga que saber.

Al poco tiempo ella entra en la habitación, apenas me quiso mirar a la cara; 

-Oye, hice algo malo? es que desde que volvimos, no me has dirigido una sola palabra, y apenas me miras a los ojos..- en verdad esto me preocupa, yo quería cumplir mi promesa, y eso hice, no se que le pasa en esa cabeza.

BREADEN

-No hiciste nada, gracias por cumplir tu promesa y por salvarme la vida, te la debo; y oye, me voy a dormrir, estoy agotada- y con esas palabras, lo volví a dejar solo mientras sentía su mirada en mí. La verdad del porqué no quiero mirarle a los ojos es por las terribles ganas que tengo de besarlo, no debo, no debo, no debo...y con esas palabras en mi mente, me quedé dormida.