No podía negarme a que el chico era súmante hermoso, aunque muy raro, siempre su ropa era extraña, pero aún así me gustaba verle, él era diferente a los demás, había pasado una semana desde que sabía su nombre, TaeHyung.
–Iré a buscar el libro de Matemáticas en mi casillero–Le digo con una pequeña sonrisa hacia mi mejor mejor, camine por los pasillos un poco desalojado para después abrir mi casillero.
Otra rosa.
Roja.
Sonreí al ver la hermosa roja rosa que se encuentra entre mis dedos, era hermosa, su olor era exquisito y se encontraba en un buen estado, con una gran sonrisa la pongo en mi cabello haciendo que se viera bien en mi coleta alta.
–Bonita rosa–Ruedo los ojos ante aquella molestosa voz, no soportaba para nada escucharle, todo de su ser me molestaba- –Estás hermosas hoy Jaejae.
–No me digas así, vale?–Quiero poder ignorarlo pero es tan molestoso que me sigue insistiendo.
–Oh...Jaet antes te gustaba mucho que te lo dijera–Yoongi sonríe con burla, no podía dejar que me torturara como antes, no podía permitirle eso.
–Yoongi lo nuestro es pasado ¿si?–Su cabello a cambiado de color, ahora es negro, lucia mucho más joven de lo que era, en el pasado me hubiera emocionado verlo tan cerca de mí pero ahora solo sentía temor-Tengo que irme.
•Pero mi rosa había caído al suelo•
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
