That family is mine [2Seok]

[01]

Caminaba con lentitud por las calles que para ese momento eran iluminadas solo por las farolas y la brillante luz de la luna, apretó las correas del bolsón que cargaba consigo y apresuró el paso, eran casi las ocho de la noche y realmente nunca le había gustado caminar en soledad durante esas horas, ni mucho menos cuando no habían muchas personas alrededor.

Soltó un suspiro aliviado al estar frente a la puerta de su hogar y se apresuró a sacar la llave de su bolsillo, introduciéndola en la cerradura y adentrándose a su hogar. Las luces estaban encendidas, cosa que no le sorprendió, ya que muy seguramente su familia se encontraba cenando, caminó hacía el comedor, donde se encontró con sus padres, quienes mantenían expresiones serias, pero que al notar su presencia las suavizaron mirándolo fijamente con sonrisas nerviosas.

—Bienvenido Hobi—Saludó su madre usando un tono tranquilo y el omega le sonrió en forma de saludó y caminó en su dirección para tomar en brazos a su cachorrito.

—Gracias, madre, ¿cómo se portó mi Tae?—Cuestionó mirando con adoración al pequeño bebé de seis meses quien descasaba cómodamente entre sus brazos y que se permitió soltar un breve ronroneo, disfrutando del dulce aroma de su progenitor y que poco después empezó a dormitar con una bonita sonrisa.

—Sabes que es un ángel.—Aseguró la omega con una sonrisa, que parecía más una mueca, pero su contrario ignoró el hecho.

—Hoseok—El mencionado apartó su atención de su madre para observar atentamente a su padre, quien mantenía una expresión severa, pensando seriamente en lo que estaba apunto de pedirle a su hijo.—Necesito pedirte un favor.—Expresó manteniendo una postura firme y el omega frunció el ceño algo confundido, sin embargo, no mencionó nada al respecto, contrario a ello, se limitó a asentir esperando a que su padre le explicará en que podía ayudarle.—La semana pasada Yuna me pidió algo de dinero para el instituto y tuve una emergencia que se llevó todo mi dinero antes de llegar a fin de mes, así que necesito que me prestes cinco millones de wones, no debes preocuparte, te devolveré hasta el último centavo una vez que reciba mi sueldo.—Prometió con tranquilidad, notando que una mueca se formó en los labios de su hijo mayor.

—Lo siento, papá, no tengo esa cantidad en este momento.—Informó acomodando mejor a su cachorrito entre sus brazos y miró de nueva cuenta a su padre.—Es cierto que recibí mi paga la semana pasada pero hice el depósito de la colegiatura de Yeji, compre los comestibles para las siguientes dos semanas y por supuesto compre lo necesario para Tae, sinceramente lo que me queda es solo lo suficiente para sobrevivir hasta mi siguiente pago.—Contó frunciendo la nariz cuando el aroma de su padre empezó a picar.

—¡¿Cómo es posible que no lo tengas?!—Exclamó el hombre poniéndose de pie de manera brusca, lo que por instinto hizo al omega retroceder.— Nunca te pido nada, Jung Hoseok, no puedo entender que seas tan inútil como para no poder ayudarme una maldita vez.—Reclamó mirándolo con enojo y el rubio abrió los ojos con sorpresa.

Últimamente su situación económica no era la mejor, por ello decidió tenderle la mano a su padre, quien le aseguró que todo sería temporal, sin embargo, parecía que al hombre había dejado de importarle poner sobre los hombros del mayor de sus hijos la carga de los gastos totales de su hogar, exceptuando únicamente el pago de la energía y de la renta del lugar.

Taehyung estaba creciendo y con él los gastos que el omega debía hacer, así que no podía seguir de ese modo, su padre tenía que entender que la crianza de un cachorro no era barata, mucho menos si se trataba de un padre soltero como él lo era.  

—Papá, no me lo tomes a mal, de verdad no tengo ese dinero, quizá si me das unos días, yo...

—¡No puedo esperar unos días, ese dinero lo necesitó para ya!—Gruñó el hombre mostrando sus incisivos, gruñido que le fue respondido por el omega al escuchar un chillido por parte del bebé que sostenía entre sus brazos.—Si no hubieras tenido a ese cachorro nada de esto estaría pasando. Te dije que la mejor opción era deshacerte de él en cuanto el estúpido que te embarazó te dejó, pero no, el niño decidió que quería hacerse cargo de un mocoso al que ni siquiera es capaz de cuidar.—Nuevamente su padre estaba soltando su frustración contra su bebé y Hoseok no sabía que había de diferente ese día, quizá el tono de su padre fue más duro de lo normal, o simplemente ya estaba harto de toda esa situación.