That family is mine [2Seok]

[04]

El fin de semana había llegado, Hoseok no tenía que asistir a la firma y Seokjin no tenía que dar clases, por lo que ambos se encontraban tirados sobre uno de los sofás en la estancia del departamento, mirando la repetición de una novela que amaban ver cuando eran mucho más jovenes, específicamente en su época de secundaria. 

"—¡No puedo creer que debo conocerte para siempre!—Exclamó el joven omega con lagrimas de frustración, observando al hombre frente a él, quien tenía el rostro rojo debido a la cólera.

 —¡Estúpido, estoy harto de ti, soberbio, malagradecido y egoísta además de todo, me has fastidiado por cinco malditos años y te encargaste de mermar mi vida, ¿qué sentido tiene este maldito matrimonio si lo único que he hecho desde que firme los estúpidos papeles fue perder el tiempo?!—Gritó sin apartar la mirada del más pequeño que cambió por completó su expresión por una sonrisa sarcástica. 

—¿Esto es una broma?, yo si quería casarme, mi maldito sueño era formar una familia con alguien que me amara. Yo ya perdí, definitivamente no me amabas tanto como yo te amaba.—Respondió antes de secar con brusquedad sus lágrimas, sin pensarlo demasiado lanzó lejos los documentos que su ahora ex esposo le había entregado y se marchó a zancadas, cerrando la puerta del despacho con un fuerte portazo."  

—No importa cuantas veces vea esta escena, detesto a ese alfa.—Comentó Hoseok con una mueca en los labios sin apartar la mirada del televisor en el cual ya solo se mostraban los créditos y se escuchaba de fondo la canción principal de la novela.—Me sostengo, el protagonista debió quedarse con el secundario, era tan lindo...

—Lamento decirte que no opinó lo mismo, a mi si me gusta el final.—Respondió Seokjin con una expresión despreocupada mientras se ponía de pie.—Voy a la cocina por algo para comer, ¿alguien quiere que le traiga algo?—Cuestionó tomando el control de la Tv para pausar la reproducción de la novela y justo después dirigió su atención al omega y a su madre, esperando una respuesta.

—Yo quiero un emparedado, por favor.—Respondió el rubio con una sonrisa despreocupada y el alfa asintió.

—Yo estoy a dieta, pero agradezco la oferta.—Hye Kyo habló sin siquiera mirar a su hijo, ya que estaba bastante entretenida jugando con las manitos de Taehyung que para ese momento miraba a la omega con una dulce sonrisa.

Seokjin asintió en respuesta y se marchó a la cocina, regresando pocos minutos después con lo pedido, entregándoselo a Hoseok, quien le sonrió en forma de agradecimiento. Ese día se cumplía un mes desde que el omega y cachorrito se mudaron a su hogar, por cuestiones de trabajo el rubio no había podido tomarse el tiempo de buscar un nuevo lugar en el que vivir pero eso parecía no tener gran importancia, ya que ni el alfa ni su madre parecían impacientes porque eso sucediera.

Al contrario, nadie se atrevía a tocar el tema, Seokjin estaba bastante cómodo y feliz con la compañía de Hoseok y si era completamente sincero tanto él como su lobito se habían acostumbrado al omega, incluso se habían encariñado con el cachorrito, que últimamente aprovechaba hasta la más mínima oportunidad para interactuar con el alfa, disfrutando del sentimiento de seguridad que el hombre le transmitía.

—Hobi, cariño, mientras terminas de almorzar le daré un baño a Taehyung, es un día caluroso y al parecer eso empieza a irritarlo.—Intervino Hye Kyo con una sonrisa despreocupada y el omega asintió, dándole el permiso a la mujer para hacerlo, indicándole también la maleta en la que podría encontrar las cosas que necesitaría para bañar al cachorrito.—Volveremos en un momento.—Avisó antes de dar media vuelta, marchándose con pasos tranquilos en dirección de la habitación que Hoseok compartía con Seokjin y poco después el sonido de la puerta siendo cerrada se hizo oír, quedando el par en un silencio que paulatinamente se volvió incómodo.