Interés Momentáneo [Go-toubun No Hanayome]

Capítulo 3: Debe Terminar

Era lugar en la residencia Uesugi. Se podía ver a simple vista que el pelinegro no había podido dormir bien como hubiera querido. Se le podían notar levemente unas ojeras.

Siguiendo en su futon, Fuutarou no tenía ganas de levantarse, pero sabía que no podía darse tal lujo. Su cuerpo se movía ocho veces más lento de lo normal.

- Entrando inesperadamente - ¡Onii-chan! ¡Levántate de una buena vez! Tienes que ir a la escuela, y sabes que no podemos darnos el lujo de faltar.

- (Lo último que quiero es escucharlo de ti, Raiha) Tranquila, ya me voy a levantar. Solo no he tenido una buena noche. - decía el pelinegro mientras se rascaba su cabello -

- Dices eso, pero la verdad es que casi no has dormido prácticamente nada. Papá y yo estábamos muy preocupados porque no llegabas ayer.

- Ya me disculpe con ustedes ayer también. No tienes por qué recordármelo.

- Bien, bien. Solo levántate rápido. El desayuno ya está listo.

La mañana pasó como de todos los días. Fuutarou se levantó y desayuno junto a su hermana. Su padre ya había salido a trabajar.

Realmente, esa noche fue muy confusa, incluso para Fuutarou. Todavía no podía asimilar que estuviera involucrado en situaciones amorosas. Y "peor aún", que el mismo sintiera interés por tal sentimiento. ¿Qué se supone que tenía que sentir Fuutarou después de todo? Incluso él no sabe la respuesta.

- Raiha.... ¿Te has enamorado? (¡¿Qué estoy haciendo?! ¡Idiota!) - poniendo una cara de arrepentimiento -

- ¿Onii-chan? - Procesando la pregunta - ¡¿Qué hiciste con mi Onii-chan?! Tú, impostor.

- ¡No lo soy! Mejor olvídalo. Es estúpido. - levantándose -

Y así es como Fuutarou escapo de una situación incómoda.

~Trayecto a la escuela~

Pasando por el mismo camino común de todos los días, especialmente Fuutarou no quería hablar con nadie, ni siquiera con las quintillizas.

- (¿Ahora qué cara pondré cuando las vea? Esto si es un lio) - mirando a los alrededores -

Sabiendo que se acercaba al mismo lugar en donde se encontraba con las quintillizas, Fuutarou miraba por los lugares por si encontraba un desvió que podría usar. Fue inútil.

Sin tener ninguna esperanza de poder desviarse, Fuutarou lentamente comenzó a aceptar su destino.

- (Estoy muerto. Ya no puedo más con esto) - sonando su celular - ¿Eh? ¿Quién será? - viendo de quien se trataba - Bueno, me lo esperaba tarde o temprano.

- Fuutarou-kun, ¿Dónde estás? Las demás te estamos esperando. Espero que no me estés siendo infiel. Lo pagaras caro si te atreves.

Atte. Tu novia, Ichika.

- Sigue con eso. - Formando una sonrisa inconscientemente - Bueno, yo se lo permití después de todo. Ahora solo tengo que seguirle el juego hasta poder hablar con ella seriamente. - Desvaneciendo su sonrisa - Esto será lo mejor para ambos, Ichika.

Fuutarou siguió su camino habitual hasta llegar donde estaban las quintillizas esperándolo. Se podía ver la cara de envidia de algunos estudiantes de otras escuelas y de su escuela que pasaban al lado suyo o cerca de las Nakano.

Caminando lentamente y acercándose específicamente a una quintilliza, Fuutarou no podía aguantar las ganas de responderles a las personas que las veían de esa manera, en especial a ella.