¿No serás tú Rattata? ➵ JungKook

~06~

NARRA MAIDER

La semana pasó bastante rápido y ya estábamos a viernes, la verdad es que me había hecho muy amiga de los chicos, menos de Jungkook, claro está. Comíamos todos los días juntos y Jungkook se limitaba a quedarse en una esquina de la mesa y no aportar nada a la conversación.

También me había hecho muy cercana a Kai, un chico bastante guapo y fuerte de mi clase que mantenía una relación secreta con un chico de otra clase llamado Kyungsoo. Ellos estaban muy enamorados pero lo mantenían en secreto porque ellos pertenecían a una banda llamada EXO y no podían decir nada por las fans.

Kai y yo compartíamos escritorio en nuestra clase y éramos los dos muy habladores así que nos llevamos algún regaño por parte de los profesores, pero no le dábamos mucha importancia por que nos lo pasabamos bien.

El timbre de la clase sonó anunciando el deseado fin de semana y Kai y yo fuimos hacia nuestras taquillas que se encontraban en el pasillo para dejar los libros y coger los necesarios para el fin de semana.

-Menos mal que es fin de semana ¡La primera semana de después del verano es la más dura de todas! -exclamó Kai mientras cogíamos los libros de la taquilla.

-Sí, la verdad es que tienes razón, hace dos semanas me encontraba en la playa y ahora me siento sumergida entre miles de libros -comenté yo suspirando.

-Y lo que nos queda, la profesora CL ya nos ha puesto examen para dentro de dos semanas ¿No sabe lo duro que es que en la primera semana te pongan ya la fecha de un examen? Acabamos de empezar y ya estoy pensando en que finalice el curso para poder irme con D.O de vacaciones otra vez a un lugar donde nadie nos conozca. No sabes lo bien que se ve mi Dodito en bañador, de verdad Maider; deberías verlo, pero no te enamores de él que es mio -los dos nos echamos a reír como morsas en el pasillo y la gente nos miraba como si fuéramos dos raritos cuando Jungkook se acercó a las taquillas donde estábamos.

-Vete Kim necesito hablar con Maider a solas -dijo el creído del Rattata.

-No necesitas echar a mi amigo, lo que quieras decir lo puedes decir delante de él -dije yo de mala leche.

-Tranquila Maider, me voy que he quedado; no te preocupes, nos vemos -me dio un beso en la mejilla y se fue por el largo pasillo hacia la salida.

-¿Era necesario que lo echaras así? -dije todavía enfadada con el nariz de tucán.

-¿Qué pasa? ¿Qué te he fastidiado el ligue? -dijo levantando las cejas.

-Vete al grano, ¿Quieres? no quiero pasar ni un segundo más en tu presencia, me contaminas el aire -dije yo mientras él reía con una sonrisa de superioridad.

-Tú y yo mañana a las diez en tu cuarto entre tus sábanas echando un polvo, te he estado observando toda la semana y he llegado a la conclusión de que puedes pagar mi pantalla del móvil, que por cierto se rompió, mediante un buen polvo -dijo él con un tono de superioridad.

Me acerqué a él lentamente moviendo mis caderas y dejando poco espacio hasta llegar a su oído y decirle:

-Mi puño y tu nariz mañana a las 10, no sé, piensalo. Creo que será divertido, o más bien, si tienes tantas ganas puede ser ahora mismo -dije yo en tono seductor.

-Venga, ¿A qué le tienes miedo Maider? sólo es un polvo, a no ser que... ¿No serás virgen y por eso te da miedo que te pueda hacer daño con mi gran Jungkookconda? No te preocupes, sé ir despacio -dijo él.

-Quizá sí sea virgen o quizá ya haya quedado con otra persona para revolcarme en sus sábanas, ¿Quién sabe? -dije esto mientras le guiñaba un ojo.

-¡No me digas que has quedado con el musculitos de Kim Jongin! Se rumorea por aquí que es de la otra acera ,Maider, ¿Enserio vas a caer tan bajo? -dijo Jungkook.

-¿Quién ha dicho que sea Kai? Además, con Kai he quedado hoy así que Kai desde luego no es mi revolcón de mañana -dije con tono juguetón mientras Jungkook me miraba impresionado.