Steve debió adivinar que un efecto secundario de la borrachera de T.J sería el que desapareciera otra vez.
Había sido sábado la noche en la que T.J lo llevó a ese club, y Steve descansaba el domingo, así que no había nada extraño en el que no lo viera ese día, pero cuando T.J no fue el lunes a la cafetería, Steve se encontró mirando la puerta durante todo su turno, esperando a que T.J entrara en cualquier momento.
La ansiedad había vuelto.
Steve se arriesgó a mandarle un mensaje a T.J, preguntando por su ausencia.
"Estoy demasiado avergonzado por lo qué pasó la otra noche, no quiero molestarte. Lo siento mucho por todo lo que hice" respondió T.J.
"No tienes por qué disculparte, enserio" contestó Steve.
"Tú siempre dices eso, nunca dejas que me disculpe apropiadamente"
"Bueno, si quieres disculparte preferiría que lo hicieras en persona"
T.J tardó en responder, pero cuando lo hizo, Steve supo que había estado buscando una manera ingeniosa de hacerlo.
"¿Acaso esa es tu manera de decirme que quieres verme?"
Era mucho mejor esconder lo que quería, era mucho mejor responder a la provocación de T.J con un comentario sarcástico... sería mucho mejor para él mantener sus sentimientos a raya. Aun así, la noche en el club vino a su cabeza, y el cómo T.J se había movido contra su cuerpo.
Y Steve no pudo controlar su respuesta.
"Lo es"
T.J no respondió por un rato terriblemente largo, y Steve temió haber cruzado demasiado la línea.
Cuando respondió, fue algo corto y conciso.
"Estaré allí"
Así que Steve se encontraba esperándolo en el lugar.
Steve había llevado un pedido a una de las mesas, y luego fue al mostrador, Visión estaba hablando con Wanda, entre risas y pucheros, cuando él llegó a su lado, Wanda se volvió hacia él.
−Steve ¿qué pensarías si una persona que apenas conoces te llama tonto? −preguntó ella de improviso.
Steve inclinó ligeramente la cabeza, confundido.
− ¿Qué no le caigo bien? −respondió, dudoso.
− ¡Ves! −exclamó Wanda, volviéndose hacia Visión.
Steve se sintió aún más confundido, al verlo, Visión suspiró y se dispuso a explicarle.
−Fuimos a que conociera a mi padre, y Wanda sigue insistiendo en que no le agrada porque la llamó tonta.
− ¡Que es verdad! ¿Por cual otro motivo habría de llamarme tonta si no?
−Te llamó "tontita" y lo dijo porque te considera tierna, mi padre siempre dice esa clase de cosas.
− ¡Aun así! −ella volvió a quejarse.
Steve bufó, divertido ante la discusión de la pareja.
− ¡Hey, Steve! −Sam lo llamó de repente, cuando Steve se volvió a mirarlo, este estaba en la puerta que llevaba la cocina−, están hablando de tu amiguito en las noticias.
Sam nunca se había mostrado amable con T.J, y cada vez que hablaba del susodicho, lo hacía de una manera indiferente o dejando en claro lo poco que le agradaba, pero en ese momento la mirada y el tono de Sam eran increíblemente serios, mientras hacía un además con la cabeza en dirección al televisor que estaba colgado a un lado de la caja registradora.
Cuando Steve levantó la cabeza hacia el televisor, vio a una reportera hablando, y bajo ella resaltaba un titular:
"Se filtra el intento de suicidio de Thomas James Hammond"
De inmediato Steve tomó el control tras el mostrador y subió el volumen.
−Hace un par de horas se filtró la noticia de que en diciembre de hace un año −decía la reportera−, la secretaria de estado Elaine Barrish llevó al hospital MedStar aquí en Washington, a su hijo Thomas Hammond, que llegó al hospital inconsciente debido a una intoxicación por monóxido de carbono, la fuente que proporciono la información a diferentes medios, asegura que fue debido a un intento de suicidio, la noticia...
El cerebro de Steve se desconectó, y fue incapaz de seguir viendo la pantalla del televisor como de poder escuchar. El primer pensamiento que cruzó su cabeza fue "es mentira", porque sabía que la prensa inventaría cualquier cosa sobre los Hammond, porque sabía que Susan Berg y el periódico en el que trabajaba sacaría cualquier noticia que manchara el nombre de la familia de T.J, especialmente después de pasar una semana con Elaine...
Pero más que eso, era el hecho de que, por un momento, no pudo conectar la palabra suicidio con el T.J que conocía, no había manera de que el chico hilarante y extrovertido que tanto fascinaba a Steve pudiera intentar matarse a sí mismo.
No la había...
Pero entonces Steve pudo recordar el tono triste y amargo que T.J había usado al hablar de su familia.
"Estoy tan cansado" había dicho él, y la imagen de T.J intentado suicidarse pareció demasiado real.
Lo invadió un sentimiento doloroso y angustiante ante esa idea.
−Steve −lo llamó Wanda.
Pero cuando él se volvió a mirarla, no fue a ella a quien vio, sino a T.J, en la entrada de la cafetería.
Su mirada estaba sobre el televisor y cuando sus ojos se encontraron con los de Steve, había algo muy parecido al pánico en ellos.
T.J se dio la vuelta y salió.
Steve se apresuró a alcanzarlo.
Cuando estuvo fuera de la cafetería lo llamó por su nombre, pero T.J no detuvo su paso.
− ¡T. J, espera! −llamó Steve, y cuando por fin logró alcanzarlo, lo sujetó del brazo para detenerlo.
T.J se soltó de un jalón al girarse y luego se apartó.
Steve se sintió increíblemente herido cuando esto pasó, aun así, T.J se había detenido.
−T. J... yo...
−Cállate -lo interrumpió de inmediato, en un tono duro y amargo.
Fue como si le estrujaran el corazón con fuerza.
La mirada de T.J se veía vacía.
Negó lentamente.
−Lo siento −dijo−, vine para disculparme, pero recordé que tenía algo importante que hacer.
T.J sonrió, intentando cubrir su expresión anterior, pero su sonrisa parecía falsa... dolorosa.
−No tienes que irte −Steve casi suplicó−. T. J, escucha...
−No −su respuesta fue suave−, no quiero molestarte... no te preocupes, es solo que estoy muy ocupado en este momento.
−T. J... −Steve intentó alcanzarlo, pero él retrocedió.
−De todos modos, te pido perdón por todo lo que hice la otra noche... y por todos los demás inconvenientes que te he causado. Te traje esto, como disculpa −dijo T.J y empujó algo contra el pecho de Steve−. Adiós, Steve.
Y entonces se había dado la vuelta para irse con rapidez.
Steve se quedó en el lugar, abrumado, con el pecho adolorido. Se miró las manos para ver qué era lo que T.J había empujado contra él.
Frank Sinatra, I'm A Fool To Want You.
Era un disco de vinilo, la única canción que Steve no tenía entre sus discos de Frank Sinatra.
Soy un tonto por quererte...
Steve miró el lugar en el que T.J estuvo.
Después de ese día, T.J jamás volvió a la cafetería.
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When I Met You (Steve x T.J)
Fanfiction"Involucrarse demasiado siempre es mala idea" Steve casi podía decir que ese era su lema personal, pero desde el preciso momento en el que T.J Hammond apareció, había puesto su vida patas arriba. T.J Hammond, hijo de un ex-presidente, hijo de la sec...