When I Met You (Steve x T.J)

Capítulo Trece

Cuando Steve se despertó, estaba a oscuras, pero podía oír el lejano y suave sonido de la música. Al lograr dejar de lado la bruma del sueño, se dio cuenta de que estaba en su habitación, y que la puerta estaba abierta, por lo cual podía ver la luz de la sala encendida, era de allí de donde provenía la música.

Después de que Steve y T.J llegaran al apartamento, Steve había sido atacado por un súbito cansancio mental, y se había quedado dormido en algún momento de la velada.

Steve se sentó en su cama, antes de mirar el reloj que descansaba sobre su mesa de noche. Eran las 4:30 de la madrugada. Dejó las sabanas de lado y se puso en pie, y a medida que se acercaba a la sala, pudo escuchar más claramente la música.

Estaba sonando Can't Take My Eyes Off Of You.

Steve llegó al marco de la puerta, y pudo ver a T.J al otro lado de la estancia, cerca de la estantería donde estaban sus discos de vinilo, estaba sentado en el brazo del sofá, mientras miraba algo muy atentamente en su regazo.

− ¿T. J? −Steve lo llamó, tan de repente que T.J dio un salto por el susto.

Las comisuras de la boca de Steve temblaron hacia arriba al verlo.

−Steve −dijo T.J, mientras se daba la vuelta, y ocultaba lo que estaba viendo detrás de su espalda−, creí que estabas dormido.

−Estaba −dijo, antes de acercarse−. ¿Qué tienes ahí?

−Nada −respondió T.J de inmediato.

Steve enmarcó una ceja.

T.J suspiró, avergonzado, antes de mostrar lo que ocultaba detrás de su espalda.

Era un gran libro, blanco y de tapa dura. Era el álbum fotográfico de los Rogers.

−Te quedaste dormido y yo aun no tenía sueño, así que puse música y luego solo tuve curiosidad y lo encontré en un cajón, y no pude evitar echarle un vistazo... y yo solo... perdón, no debí revisar tus cosas −dijo al fin, apenado.

Por supuesto, a Steve le hubiera gustado poder evitar que T.J viera ese viejo álbum de fotos, pero no podía enojarse con T.J por tener curiosidad, no cuando podía la expresión que estaba poniendo.

Steve negó, mientras le sonreía tranquilizadoramente.

−No pasa nada −aseguró−, es solo un álbum de fotos, puedes verlo si quieres.

T.J lo miró inseguro.

− ¿Lo dices enserio?

Steve asintió mientras lo tomaba de sus manos, lo abrió por la mitad, la foto que vio fue una en la que estaban sus padres sosteniendo a un Steve de dos años, mientras su tío estaba a un lado, con la mano sobre el hombre de su madre.

Se le estrujó un poco el corazón, solo un poco, por lo feliz que se veían todos en la foto.

−Tu madre era muy hermosa −apuntó T.J a su lado, con admiración.

Steve lo miró de reojo, antes de mirar la foto de nuevo.

−Lo era −concordó.

− ¿Quién es el hombre junto a ella? −preguntó T.J, con cautela.

Steve se dio cuenta de que temía preguntar algo que no debía, y se sintió como un idiota por hacerlo sentir de esa manera.

−Es mi tío.

T.J asintió, y Steve agradeció que no preguntara que había sido de él, en vez de eso, puso su mano sobre la de Steve para cambiar la página juntos.