Mi Jefe Alfa ๛ vkook

| Vante |

— ¡JiMin-ssiiiiiiiiii! —gritó JungKook desde su cuarto.

JiMin subió corriendo.

¿Qué le habría pasado esta vez?

¿Una pesadilla? ¿Una caída?

¿¡Una araña!?

— ¡¿Qué pasó?! —gritó JiMin al entrar al cuarto, sólo para encontrar a JungKook sonriéndole a su portátil.

— ¡Vante ha publicado algo nuevo!

— ¿Vante?

— El fotógrafo estrella de Kim Pics, del que no se conoce su identidad... ¿Cuántas veces debo recordártelo?

— Pensé que te había pasado algo, tonto.

— ¡Pero sí pasó! ¡Estuve muy cerca del lugar donde tomó las fotos ayer!

JiMin observó las fotos.

— ¿Y qué hacías tú al otro lado de la ciudad?

— Fui a una entrevista de trabajo...

— ¿Y...? —preguntó JiMin esperanzado.

— ¡Me aceptaron! ¡Ahora soy empleado en Kim Pics!

— ¿En Kim Pics? ¿Es enserio? ¡Es tu trabajo de ensueño!

— Sí. ¿Sabes? Tal vez incluso llegue a saber quién es Vante...

— ¿Vante?

— Ay ¡JiMin-ssi!

🍀

— Mierda.

— ¡Jeon! Vocabulario —le riñó JiMin.

— Pero duele.

— Pero hay que desinfectarla.

— ¿Pero con alcohol?

— Sí, quejambroso.

— ¡JiMin! ¡MALDI- AHHHH!

— ¿Quién te mandó a meterte con el estúpido de JuGyeom? Te dije que era un idiota.

— Tú sigue en lo tuyo —JiMin aplicó más alcohol aprovechando su posición frente a JungKook en esos momentos casi como un castigo por no hacerle caso y por no respetarle— ¡JiMin-ssi! ¡Mierda!

🍀

Dolía. Dolía como el infierno. Prefería cualquier otra tortura; que le quitaran su colección de Iron Man o que un perro mordiera sus Timberlands, a que JiMin siguiera poniendo alcohol sobre esa mordida en su cuello, que ahora era más una mancha grisácea y sin vida y muy inflamada que le dolía a cada rato, recordándole las estupideces que hacía ebrio.

Era difícil y le hería en su orgullo pero JiMin tenía razón: No debió haberse metido con YuGyeom y una borrachera más una calentura no eran excusa válida.

Jeon se consideraba a sí mismo como un sinvergüenza al que no lo importaba nada y hacía lo que quería sin importarle ni lo más mínimo la opinión de los demás, pero tampoco era uno de aquellos omegas regalados que se acostaban con quien se les atravesara, como para haber caído tan bajo.

Además era excesivamente irritante tener que verle la cara a ese maldito todos los días, empezando por el hecho de que el alfa se jactaba de que había llevado a la cama al "omega imposible" (como lo llamaban todos los idiotas altivos a quienes había rechazado), y terminando por el hecho de que aparentaba estar feliz cuando en realidad también debía estar sufriendo por el lazo en ruptura que le había impuesto a JungKook por "diversión".