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Pasar la tarde junto los deberes de matemáticas y BaekHyun no era una mala idea, de hecho hace bastante (dos días) que no veía a su mejor amigo.

-¿Como van las clases?

La cantarina voz de BaekHyun hizo que levantara la vista de su libreta de matemáticas. Él estaba de pie, metiéndole el dedo al bote de mantequilla de maní.

- Tengo que entregar un trabajo de biología pero mi compañero es un idiota.

BaekHyun apuñalo de nuevo el bote.

- Entonces, ¿mal?

KyungSoo asintió.

- Prefería hacer mi trabajo con Tom.

BaekHyun hizo una mueca rara. Tom era un estudiante de intercambio bastante irritante y por supuesto que su mejor amigo lo conocía, compartían dos clases juntos.

- ¿Acaso has perdido la cabeza? No puede ser tan malo.

KyungSoo se encogió de hombros.  Vio como BaekHyun enroscaba la tapa del bote de la mantequilla. Al parecer ya estaba satisfecho.  KyungSoo había perdido la cuenta de cuantas veces su mejor amigo había metido el dedo en la sustancia cremosa. La mantequilla de maní no era de su agrado pero la compraba por que a BaekHyun le gustaba.

- Dije que nunca lo llamaría y ayer que lo hice dijo que no podía. ¡Estupida tarea de biología!

Pulgoso ladro.  

- ¡Ya bien, no diré mas palabrotas!

Frustrado con la vida y con su tarea KyungSoo hizo un puchero y aventó su lápiz.

La risa de BaekHyun reino la habitación. No le parecía gracioso en absoluto.

- Ahora entiendo.... ¿Te refieres el tipo de la cafetería?

KyungSoo gruño como respuesta.

- A ver... Cuentame algo sobre ese tipo. Omitamos el hecho de que es bastante atractivo.

BaekHyun le sonrió y se sentó en la silla a su lado. Muy interesado.

- Es bastante irritante, lo cambiaría por un boleto a Alemania o lo mandaría por paquetería en una caja. Es muy seguro de si mismo y me pone de malas, como quisiera poner mis manos sobre su cuello y apretar hasta que su cara este morada.  - Demasiado apuesto a decir verdad, pero eso BaekHyun ya lo sabía. Otra cosa que tenia que resaltar es que aunque no quisiera admitirlo sus ojos lo hipnotizaban, eran dos pozos bastante profundos, un callejón sin salida.
Tampoco estaba dispuesto a aceptar que lo que veía le gustaba. Sus brazos músculosos sin llegar a exagerar y esa sonrisa entre picara y seductora.
Cada vez mas Kai se volvía irresistible.

Pero no lo aceptaría en voz alta. No por que estaba seguro de que después le mordería el culo. ¡Ñam!

A las ocho y cinco BaekHyun se despidió, diciendo que tenia tarea que hacer.  Se fue, no sin antes decirle que cerrara muy bien todo, que no olvidara absolutamente nada.
Pulgoso se había retirado un poco antes de BaekHyun. Estaba seguro que estaba tirado sobre la mullida alfombra de su habitación.

Estaba solo. Y solo tenia una tarea pendiente. Suspender biología no era buena idea. No estaba dispuesto a volver a quedar como un tonto gracias a Kai. Supiro... Podría con esto.

Con ese pensamiento en mente se metió bajo las sabanas negra que adornaban su cama. Dejándose guiar hacia los brazos de morfeo.

Esa misma noche se despertó gracias a un ruido. Giro su cabeza hacia la derecha, ahí donde Pulgoso estaba hecho bolita completamente dormido. Descartando la idea de que pulgoso había sido el causante de dicho ruido, no se movió. Todos sus sentidos estaban alerta.
Reflexiono, muchas veces a lo largo de su vida se había sentido observado, como si alguien se estuviera asegurando de algo. Era la misma sensación que sentía ahora. Por un largo tiempo pensó que era el espíritu de su padre, cuidandolo. 
Aun desconocía como es que su padre había muerto, su madre nunca le contestaba sus preguntas, escudándose con me duele recordarlo, cariño. Kyungsoo dejo de preguntar cuando se dio cuenta que jamás le sacaría algo a su madre.
Tenia bastantes preguntas sin respuesta y que se moría de ganas responder.

Apretó con mas ímpetu las sabanas. Las palmas de sus manos sudaban un montón.

Giro sutilmente su cabeza. El movimiento de algo llamo su habitación. Una sombra. 

¡Jodidamente era una sombra!

Se giro por completo para quedar de cara con su ventana, la luz de la luna era la única capaz de proyectar un sombra.

Simulando estar dormido. Miro con sus ojos este cerrados ya no había nada. 

Suspiro, posiblemente era la falta de sueño o que tal vez se había saltado su cita con el psicólogo.

Convencido cerro sus ojos y se volvio a acurrucar.












El Juramento (KaiSoo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora