Capítulo 42

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-¿Cómo?- Dijo Jack algo confundido.

-Ese día lo tenía muy borroso, pero ahora me acuerdo de todo.-

Empecé a revivir aquel día paso por paso.

"Mi padre me llevó con Roxanne de paseo. Fue justo en este mismo bosque. Me dijeron que iba a ser divertido y que pasaríamos un gran día. Pero aparecieron esos dos desde el aire y no los vimos llegar. Mi padre me empujó a su espalda para protegerme. Yo estaba muy asustada al ver la reacción de Roxanne y mi padre. Estaba confundida, no comprendía quiénes eran ellos.

-¿Qué haces aquí?- Le había preguntado mi padre.

-Solo quiero a la niña y acabar con Roxanne, contigo no tengo nada, querido.-

-No pienso permitirlo.- Dijo enfadado.

-Si no es por las buenas... será por las malas.-

En un visto y no visto el lobo se había abalanzado sobre Roxanne, le había hecho un gran corte en su hombro derecho salpicando la nieve de rojo. Ésta cayó al suelo y el lobo se separó de ella sonriendo triunfante. Yo no podía moverme no entendía qué sucedía.

Roxanne se levantó para enfrentar al lobo, creó una bola azul y se la lanzó, éste la esquivó, pero consiguió rozarle la pierna, gritó de dolor y se arrodilló en el suelo tocándose la zona herida. Yo seguía confundida apenas le había tocado, cómo podía gritar tanto de dolor, aunque claro, en ese momento no sabía el poder que podría llegar a tener.

Yo había empezado a llorar mucho, mi padre se giró intentando tranquilizarme, pero a la vez miraba a su alrededor, estaba buscando a aquella extraña mujer. Roxanne se acercó a mí, le dijo a mi padre que buscara dónde se encontraba y se encargara del lobo que ella cuidaba de mi.

Mi padre hizo aparecer una espada y fue a acabar con el hombre lobo. Roxanne me giró hacia un lado, se agachó y agarró mi pequeña cara con sus manos.

-Todo irá bien, no te preocupes.- decía mientras yo seguía llorando.

Nada más decir esto, ella apareció de la nada por detrás de Roxanne, y le atravesó el pecho con una espada, mucha sangre fue salpicada. Miré muy sorprendida la espada que sobresalía de su pecho , luego miré el vestido que llevaba puesto lleno de grandes manchas de sangre, yo grité y caí al suelo aterrada.

Roxanne besó su dedo índice, formuló unas palabras en latín y luego puso éste en mi frente.

-No sé si para ti será una maldición o un don pero no puedo dejar que caiga en malas manos.-

Esas fueron las últimas palabras de Roxanne, luego se desplomó encima de mí, yo no resistí su peso y quedé tumbada entre la nieve y su cuerpo. Oí a mi padre gritar pero no pude prestarle atención, estaba en estado de shock.

-Una molestia menos.- Dijo ella, con lo poco que me permitía el cuerpo de Roxanne vi como sonreía de manera escalofriante.

Le pegó una patada al cuerpo sin vida de Roxanne quitándola de encima de mí. Ella se me acercó, pero yo instintivamente me incorporé y me alejé de ella. Consiguió alcanzarme, hizo aparecer sus alas negras y me elevó.

-Por fin te tengo, no sabes cuánto he esperado para tenerte.-

Yo estaba realmente asustada, no podía moverme. Vi como algo le golpeaba rápidamente en la espalda y ella me soltaba. Mi padre me cogió al vuelo, con una mano me sujetó y con la otra tenía una espada ensangrentada. Al llegar al suelo me dio un beso en la frente.

-Ahora duérmete Jennifer.-

-¡Papá estás herido!- grité mientrás veía una herida en su pecho.

-Olvida este día, Jennifer, aunque solo sea hasta que seas mayor para afrontarlo.- Pasó una mano delante de mi cara y hasta ahí llegan mis recuerdos.

Luego me desperté en la casa de mi "madre" y le dieron la noticia de que mi padre había muerto"

-Vamos a empezar.- dijo la persona desconocida haciéndome volver a la realidad.- Dividiremos el descampado en cuatro partes, diríjanse a la zona que le vamos a asignar.

Nos fue diciendo donde teníamos que irnos cada uno. Jack se dio la vuelta para irse pero le detuvé.

-Jack...- Él me miró extrañado.- Yo... esto... no mueras.- Dije seriamente.

Él sonrío acercándose a mí, me dio un abrazo, besó mi frente mientras acariciaba mi pelo.

-No lo haré, lo prometo, no pienso dejarte sola.-

Yo besé sus labios temiendo que fuera la última vez que lo hiciera, me quité esa idea de la cabeza.

-Te quiero.- Le dije dándole un último abrazo y un último beso.

-Y yo Jennifer, no sabes cuánto.- Dijo cuando se separó.

Nos alejamos uno del otro, yo me giré varias veces para verle ir hacia su sitio y sentí como él clavaba su mirada en mí de vez en cuando.

Ya había llegado la hora.

La batalla estaba a punto de comenzar

Hunters (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora