Hunters (Terminada)

Capítulo 33

-¿Qué hacéis aquí?- Dije prácticamente en un grito.- No habéis podido sacar billetes tan rápido, ¿Cómo lo habéis hecho?- Dije desconcertada.

-Te conozco ya desde hace mucho. Ayer, cuando cediste tan fácilmente a que no te fueras sola, sospeché. Así que compré tres billetes para el primer vuelo libre de hoy.- Dijo con una sonrisa triunfante.- Y así fue. Ayer avise a estos dos para que estuvieran preparados y con lo imprescindible para hoy por la mañana.-

-Pero… eso es como si me hubiérais engañado.- Dije molesta.

-Mira quién habla, la que me escribió una nota diciendo que se iba, cuando la noche anterior  me dijo que no iría sola.- Contraatacó Jack.

-Lo siento.-

-Menos mal que Jack te ha pillado.- Dijo Julia riéndose.

-Aunque no la hubiera pillado, hubiera cogido el próximo vuelo disponible y me hubiera ido detrás de ella.-

-¿Por qué hacéis todo esto?- les pregunté.

-No creo que haga falta preguntar eso.- Dijo Christian sentándose a mi lado.- Somos amigos, así que es normal que queramos ayudarte, nunca dejaríamos que corrieras ese riesgo tú sola, y si podemos ser de ayuda, aunque sea solo un poco, estaremos dispuestos a hacer lo que sea.-

-Gracias.-

No sé por qué, cuando los tenía cerca me sentía más aliviada, más tranquila, como si todo fuera a salir bien. Los miré a cada uno de ellos, no quería que les ocurriera nada, pero ya estaban allí y tenía que confiar en ellos, no había vuelta atrás.

-¡Qué se le va a hacer1- Dije en un suspiro.- Confiaré en que podáis defenderos en la batalla.- Los miré de nuevo.- Gracias.

-No tienes que darlas.- Dijo Julia mientras se sentaba al otro lado  y me daba un abrazo.- Yo siempre estaré para cuando lo necesites, además, ya has visto que estoy bien entrenada.-

- Ya, ya…-

Después de un rato de esperar, sonó la llamada para nuestro vuelo. Había una larga cola para pasar por la puerta. Luego pasamos por un gran pasillo, las paredes eran de cristal y se veía toda la pista, y desde ese mismo pasillo embarcamos en el avión.

Julia y Christian se sentaron delante de nosotros. Tardamos bastante hasta que estuvieron todos los pasajeros. Por fin, el avión se puso en marcha, aparecieron las típicas azafatas dándonos instrucciones de vuelo.

 Luego el avión empezó a elevarse, yo cogí a Jack de la mano fuertemente, odiaba la sensación que se tiene al despegar un avión.

Fue bastante agotador el viaje, después de cuatro horas y media metidos en ese avión solo tenía ganas de llegar a Londres para poder salir de allí.

Fuimos al hotel que había reservado, aunque la reserva era para mañana, con un poco de suerte, y aunque íbamos a pagar más, podrían dárnosla hoy.

Efectivamente tuvimos esa suerte, ya que las habitaciones que habíamos reservado hoy estaban vacías, eran dos y estaban continuas.

 Jack y yo materializamos ropa que poner en los armarios, tanto para nosotros como para Julia y Christian.

Ese día no hicimos prácticamente nada. Primero Jack y yo estuvimos en la habitación de Julia y Christian viendo una peli que echaban. Luego bajamos a la cafetería del hotel a comer algo y más tarde nos fuimos directamente  a dormir.

-Menudo día más agotador.- Dijo Jack, tirándose en la cama.

-Lo sé.- Dije tumbándome al lado de él.

-¿Y qué piensas hacer mañana?-

-Nada de turismo, recuerda a qué hemos venido.-

Jack se incorporó y me miró.

-¿Entonces qué vamos a hacer?

-¿No está claro?- Le dije.

Me incorporé y le miré.

-Iremos a Sherwood