Hielo |Hyuga Neji|. •Terminada•

Capítulo 34.

Vacunas y rivalidades.

-¡Por favor,Kakashi-sensei!-Se subió a la espalda del mayor,intentando que parara.

-Ya te dije que no puedo. Tienes que ir.

-¡Pero yo no quiero que me inyecten,puedo morir!

-Atena,si te inyectan,es para que no mueras-La miró con flojera.- Ya llegamos al hospital,bajate. 

-No-Bufó como niña pequeña,haciendo sonreír a Kakashi. Entró con la chica aún en su espalda y se acercó a la recepcionista.-Hola,vengo a vacunar a...

-¡Kakashi-sensei,dijo que no me iban a inyectar!

-Es una vacuna oral. Te darán una pastilla-Rodó los ojos ante el comportamiento de su alumna.

-¡Uy,entonces sí!-Sus músculos se relajaron y se abrazó al cuello del peliplata con una sonrisa. Es muy fácil engañarla,pensó él. Al entrar había cuatro enfermeras,ya conocidas por la menor,que tenían cuerdas. Atena las miró confundidas pero no dijo nada.

-Atena-chan,¿Puedes sentarte en la camilla? Mientras busco la pastilla-Sonrió con ternura. La castaña asintió,feliz y acató lo dicho por la mayor. Las cuatro enfermeras de acercaban discretamente hacia ella. Sabían la rapidez que había adquirido ésta durante su entrenamiento con el Mori,no podían tomarse aquella situación a la ligera;Atena era muy buena escondiéndose cuando quería. Incluso podía encontrar en segundos el lugar perfecto para quedarse una semana sin ser descubierta.

-¡Ya traigo la inyección! Aún no me creo que Atena-san se haya creído que la vacunaríamos con una pastilla-La joven que entró no dejaba de reír,sin darse cuenta de que la menor estaba ahí.-Oh,lo siento.-Miró asustada a las mayores,quienes la asesinaban con la mirada.

-¡Atrápenla,rápido que no escape!-La ojimiel salió casi volando mientras le agradecía a la ojivino por decirle,sin saber que había sido un descuido de su amiga. Al perderlas de vista de vista se relajó un poco,claro que sin bajar la guardia. Se metió en un cuarto vacío y se sentó en una silla,se sentía deprimida. Kakashi le había mentido,ella confió en él y la engañó.

-Te dije que no huyeras.-El Hatake estaba frente a ella,ni siquiera se dio cuenta de que había entrado.

-Me engañaste-Sus ojos brillaban debido a las lágrimas. El corazón del ojinegro se estrujó al verla así. Aunque sentía que estaba haciendo mucho drama por un simple piquete de unos segundos.

-Tienes que vacunarte. Lo hago por tu bien,si no podrías contagiarte de alguna enfermedad y morir.-Se puso en cuclillas frente a ella. Atena hizo un puchero,intentando dejar de llorar. Kakashi la abrazó y acarició su cabello,haciéndole una señal a la doctora para que la inyectara. Ella asintió e inyectó a la menor,quien soltó un chillido de dolor.

-¡Auch!-Antes de que se pusiera a llorar,Hatake le dio una cucharada de pastel de chocolate,haciendo que se calmara por completo,quitándole el plato con la deliciosa mezcla chocolatosa que estaba en el.-¿Cómo supiste que como pastel de chocolate en mi periodo?-Sonrió con los ojos cerrados mientras saboreaba la delicia de chocolate. Kakashi se sonrojó un poco y carraspeó.

-Tu mamá me lo dijo. Dijo que si te ponías muy sensible,te lo diera.-Miró de reojo a la doctora,quien se iba discretamente,intentando no reír ante la incomodidad del Hatake.

-Aún así estoy molesta contigo,¡Me mentiste! Dijiste que sería una pastilla-Hizo un puchero y se cruzó de brazos para darle la espalda.

-Si no te vacunas,puedes morir en alguna misión. Sólo fue un piquete,no seas llorona.