12.5 "Francis Wooldart"

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(Este capítulo será narrado por Francis, y transcurre al mismo tiempo que la situación de las ruinas)

Las puertas de aquel club nocturno estaban custodiadas por un par de guardias, ambos eran altos, igual que yo, pero su musculatura y complexión era sin duda mucho mayor a la mía.

Me quedé recostado en una pared mirando atentamente como se acercaban un par de personas a la puerta, saludando alegres.

—¿Qué tal chicos? —saludó un castaño mientras tomaba un sorbo de una taza —, ¿les importa si entramos?

Los guardias miraron al chico y luego se miraron entre sí, esbozando una sonrisa malvada —Claro que no nos importa, Junior's siempre recibe a quienes buscan diversión.

El castaño sonrió dando un paso adelante, indicándole a sus dos acompañantes que lo siguieran, sin embargo aquellos dos hombres lo detuvieron.

—Hay una condición que debes cumplir para que te dejemos pasar —rió uno de los hombres.

El castaño mordió una cuchara con fuerza y los miró irritado —No había escuchado nada de una condición.

Los dos hombres rieron, dirigiendo sus miradas a las dos chicas que se encontraban detrás de él. Una peliceleste de buen cuerpo que los miraba con un aspecto relajado, mientras que la otra era una niña peliblanca con una sonrisa energética.

Hice un chasquido con la lengua cuando los vi dar una mirada dudosa hacia la chica peliblanca —En este establecimiento no pueden entrar niñas —las voces de esos hombres me causaban cierto grado de enojo, como si hablaran con un exceso de confianza, por lo que simplemente decidí no esperar más y entrar por mi cuenta.

Me acerqué a paso firme, y apenas llegué a aquella puerta las miradas del pequeño grupo se dirigieron a mí, intenté evitarlas y pasar directamente, lograndolo sin ningún problema, probablemente al verme como un delincuente.

Fornido, alto, de una tez palida y llena de cicatrices en mis brazos, las cuales se podían ver ya que mi remera estaba arremangada.

El lugar por dentro estaba lleno de gente, muchos bailaban en el centro de la pista, mientras que otros bebían y coqueteaban por todo el lugar. Los miré con asco, pensando en ese ambiente de alcohol y juegos que ya había dejado atrás.

Caminé hacia la barra ignorando a cada persona que me miraba, me senté en una de las banquetas, mirando hacia la puerta atentamente.

—Un vaso de agua, con hielo —pedí sin siquiera mirar al bartender.

Tras unos segundos ya tenía mi vaso en mí mano, tomando sorbos de vez en cuando, y sin quitar la vista de encima de la puerta. Hasta que finalmente entraron, ese grupo encabezado por el chico castaño logró que les dejaran entrar al club nocturno, y rápidamente se separaron.

La niña peliblanca corrió a la pista de baile, moviéndose al ritmo de la música. La peliceleste se movía evitando chocar con las personas, acercándose a mí. Y por último el chico castaño, su mirada estaba fija en el dueño del establecimiento, Junior, un hombre que sabía manejar su vida criminal en las sombras, tenía una gran influencia en el mercado negro, sobre todo en el tráfico de información. Intercambiaban miradas, como si tuvieran algo de lo que hablar, y finalmente se reunieron con la chica que se sentó un par de bancas lejos de mí.

—Entonces... ¿tú eres Junior? —preguntó el castaño mientras tomaba de su taza.

El hombre asintió sin dudarlo, señalando el lugar —Todo esto es mío, así como dijiste hace unos segundos, ¿y que es lo que necesitas, dinero, dust, faunos?

Path Of A Hero | RWBY Fan-FicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora