5.

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Me sorprendí enormemente cuando nombraron a Ruby y al rubio (quién por cierto se llamaba Jaune Arc), como lideres de sus grupos, a decir verdad no tenían pinta de líderes ninguno de los dos, aunque tampoco fue como que les hubiera prestado atención durante sus batallas.

Yo estaba solo, como era obvio, y tenía mi propio cuarto. Al ser cuartos preparados para grupos de cuatro personas resultaba bastante más grande de lo que necesitaba. Pero no me quejé, de hecho me daba la oportunidad de organizar mejor todo lo que había traído.

Terminé de ordenar el lugar tras un buen rato, viendo que todo quedara en su lugar, y tras comprobarlo, sonreí victorioso. Lo único que me quedaba, era colocar mi reina sobre una pequeña mesa que se encontraba a un lado de la habitación.

—Espero me traigas buena suerte —le susurré a la pieza, y esta respondió cambiando el color de su humo a un rojo chillón que me hizo sonreír —, espero que sea una buena señal.

Abrí la puerta de mi habitación y salí sonriendo, tenía que ver a Ozpin para hablar sobre la organización de mis salidas, y como iban a ser mis clases. Y al día siguiente, me esperaba un emocionante primer día de clases.

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Desperté tras escuchar bastante ruido en la habitación de al lado, y a pesar de que no podía comprender los gritos, se notaba de sobre que eran los de Ruby. Reí ligeramente mientras me levantaba, tocaba ir a tomar una ducha y cambiarme, y después de eso directo a clase.

Fui a las duchas de Beacon con todo lo que necesitaba, y para mi sorpresa, al entrar, me encontré nuevamente con aquél chico enorme.

—Hey, ¿qué tal? —ni siquiera se molestó en contestarme, entrando en una de las duchas.

Yo me metí en la que estaba junto a la suya, y volví a intentar hablarle —Felicidades por ser nombrado líder, no pude verte en batalla, pero pareces bastante habilidoso —, a pesar de no poder verlo por la pared que separaba las regaderas, sentía como toda su energía decía, "Calla y muere debilucho"

De alguna forma me sentía intimidado y emocionado al mismo tiempo. Me había enfrentado a muchas personas hábiles, incluso pude hacerle frente a Neo sin usar mi carta secreta. Pero ese chico, él tenía algo que me decía que era capaz de darme una pelea interesante, cosa que me incitaba a provocarlo.

—No deberías subestimarme por tener la mitad de tu altura, no soy tan débil como parezco, ¿sabías? —no obtuve respuesta directa, pero al escucharte un golpe seco contra la pared sonreí —. Voy a tomar eso como un reto.

Terminé con mi aseo rápidamente y me cambié, dispuesto a salir, no sin antes despedirme de aquél mastodonte.

—Adiós amigo, nos vemos en clase —otro golpe contra la pared fue su respuesta, esta vez acompañada de una palabra.

—Adiós —musitó entre dientes.

Sonreí victorioso mientras me dirigía a mi primer clase. No quise prestar mucha atención en cuanto vi que hablaban sobre historia de los Grimms, después de todo había aprendido suficiente gracias a la experiencia.

Aunque luego de un rato pude ver a la chica Schnee (quien resultó llamarse Weiss) ser llamada al frente para "demostrar sus habilidades como verdadera líder".

Una lástima que al final no lograra hacer mucho sin el consejo de Ruby —Con razón ella es la líder —susurré solo para que Yang me escuchara.

La rubia rio ligeramente cruzándose de brazos mientras miraba la escena bastante divertida —Claro que es por eso, aunque no lo parezca por su edad es bastante buena para dirigir a un grupo.

—¿Y tú no lo eres? —le pregunté mientras veía a Weiss irse del salón super ofendida.

—¿Yo? Claro que no, soy más de golpear y luego preguntar, ese es mi estilo.

—Pude verlo en su pelea contra el Nevermore, directa a la acción y sin rodeos —una campana interrumpió nuestra conversación.

—Parece que nos quedamos sin tiempo, pero continuaremos en la próxima lección —la voz del profesor llamó mi atención por un momento, y luego volví a centrarme en la rubia.

—Es hora del almuerzo, ¿nos acompañas? —me ofreció.

—Solo si me llevas —dije acercándome y dándole la espalda.

Ella entendió el mensaje, se comenzó a reír, luego de un par de segundos me agarró por la capa y me levantó —Como digas pequeño, pero no te acostumbres a esto —, la risa todavía se hacía notar entre sus palabras.

Yang me llevó hacia la cafetería, ambos tomamos una bandeja con comida, y después fuimos a sentarnos. Por alguna razón terminé entre Yang y Ruby, hablando con ellas de estupideces.

—Si, y tenemos un perrito en casa, se llama Zwei —dijo Ruby mientras agarraba una pequeña caja con leche y la tomaba con la bombilla, lo que la hacía ver muy tierna y un tanto infantil.

—Yo nunca tuve mascotas, mis padres siempre me dijeron que era peligroso —miré mi bandeja ya vacía y la empujé ligeramente —, creo que era porque mi casa estaba rodeada de grimms casi siempre.

—¡Wow! ¿vivías rodeado de grimms? —preguntó la rubia, a lo que asentí.

—Desde pequeño mis padres me entrenaron para protegerme, y creo que mis habilidades no son algo que puedan subestimar.

Yang sonrió pícara y apunto a su pecho muy orgullosa —Estoy segura de que no podrías vencerme ni en un millón de años.

Le devolví la sonrisa —Yo estoy seguro de que no aguantarías más de un minuto si voy enserio —, tomé un pequeño cuchillo de plástico y apunté con él hacia Yang —, soy muy bueno con mis espadas, y puedo manejar casi cualquier arma, son como un miembro más de mi cuerpo —la última frase la dije con un tono burlesco que la rubia entendió completamente.

La risa de Yang se quedó con nosotros un buen rato, mientras que Ruby solamente se quedó confundida ante mi última frase.

—Bien Zacky, reto aceptado, la próxima clase es de combate, ¿qué tal si probamos tu habilidad? —la rubia me miró con una expresión retadora, y yo le devolví la misma mirada.

—Como digas... "blondie".

Path Of A Hero | RWBY Fan-FicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora