Embaracé a Vegeta (GokuxVegeta)

22

Vegeta tosió una última vez antes de volver a respirar con normalidad.

El dolor disminuía, y sus sentidos volvían a funcionar a medida que el dolor se iba.

-La... La niña...- dijo medio ahogado, a punto de sentarse.

-Tranquilo, señor Vegeta, la niña está afuera. Quédese quieto, voy a curarlo.

De nuevo Whiss puso su báculo sobre él, y empezó a sanarlo.

Cuando fue consciente, Whiss notó que no sentía el ki de la niña en el planeta.

-¡Goku!- se oyó venir al kaio al cuarto, y detrás suyo a Bubbles, saltando y gritando- ¿Qué hiciste? ¿a dónde la llevaste?

Cuando Whiss se giró Goku ya tenía sus dedos en su frente, a punto de irse, pero Kaiosama sostenía su brazo, tirando de él.

-¿Qué pasa?- dijo debilmente Vegeta y Whiss se puso de pie.

-Ahora vengo.- al salir, Kaiosama junto con el chimpancé y el grillo gritaban e interrogaban a un Goku que parecía absorto y perdido. -Goku...

Los demás se callaron, pero el kaio fue rápidamente con él.

-¡Este cabeza hueca se llevó a la niña y regresó sin ella! ¡Y no puedo encontrarla por ninguna parte! ¡Es como si hubiera desaparecido de este universo!

-¡Goku!- le llamó de nuevo con voz más potente.

-Si Vegeta moría...- dijo apretando su mandíbula y sus puños- si Vegeta moría por ese veneno... Ni siquiera Shen Long o Porunga lo hubieran revivido.

-¿A dónde llevaste a la niña?

-El... Doctor... Solo iba a darme el antídoto para Vegeta si le daba a la niña...

Todos soltaron un grito de sorpresa.

-¿Hi-ciste qué?

Se voltearon a ver a la puerta de la casa, desde donde salía Vegeta, agarrado del marco de la puerta.

-Ve-geta...

El príncipe caminó con dificultad hasta él.

-¡¿Cómo te atreviste, insecto?! ¡Es mi hija, estúpido! ¡Pensé que no harías algo así! ¡¿Cómo pudiste entregar a un sujeto cualquiera a mi hija?!

-¡Es mi hija también!- gritó sujetando los brazos del más bajo, evitando que siguiera caminando- Mi hija, Vegeta... Y créeme que estoy tan desesperado como tú... Pero no podía soportar la idea de perderte- dijo molesto con él mismo por la decisión que tomó- Iré a buscarla, y la traeré contigo. Es una promesa... Y sabes que me gusta cumplir mis promesas...

Vegeta al verlo se sintió angustiado, a punto de derramar lágrimas.

-No te atrevas a volver sin ella, ¿me oíste? No te lo voy a perdonar...

Tenía el corazón estrujado, y no quiso luchar contra ese sentimiento.

Al ver que Vegeta empezaba a llorar, Goku no pudo soportar su culpa y se separó de él, desapareciendo con su técnica.

Vegeta trastabilló al perder el apoyo de Goku, y Whiss lo sujetó para que no cayera.

-Señor Whiss...- dijo preocupado Kaiosama.

-Lo sé, no lo dejaré solo. Señor Vegeta, aunque no quiera, debe descansar.

-Pero...

-Sin peros.

Whiss se separó y tocó su báculo en el suelo.

Tardó un poco hasta que llegó a la clínica, y al llegar encontró todo destruido.

Llegó hasta donde solía estar el consultorio del doctor, que estaba en el suelo, gravemente herido.

-Ah...-dijo con dificultad al verlo- s-si buscas al... ¡ah! Al saiyajin... Él ya... ya se fue...-tosió sangre- n-no recordaba que... fueran tan... f-fuertes...

-¿Usted mató a los otros saiyajins? ¿A los que podían concebir?

El médico sonrió, siempre bajo sus barbas, ahora teñidas de rojo.
-E-eran una ame-naza... Y muchos o-frecían buen di-nero por... ¡Agh! las niñas...

-¿Mmn? ¿Niñas?

-Era nece... ¡Ahh...!

El ojo del médico dio vueltas una última vez, y junto con un suspiro ahogado, dejó de moverse.

Whiss analizó al doctor que yacía muerto en el suelo. Recién ahora recordaba a su raza, la cual era capaz de lograr la hipnosis con ese ojo móvil.

Miró una última vez el destrozo  y trató de sentir el ki de Goku que seguía en el planeta.

De nuevo viajó hasta donde debía encontrarse, y lo halló golpeando a unos sujetos que no tenían ni una milésima de su poder.

Cuando soltó al último y se giró hacia Whiss ni siquiera lo reconoció.

Tenía en sus ojos un brillo grisaceo, que le hizo impulsarse en contra de Whiss.

Éste sujetó su puño enseguida, y solo ahí fue cuando los ojos de Goku perdieron ese brillo.

-¡Señor Whiss...!

-Goku.

~°~

-Ya tenían todo listo, ¿cierto?

-Sí. Ni siquiera con la teletransportación llegué a tiempo- Goku apretó su puño- algo del ki de la niña quedaba aún por aquí, solo que al llegar ya se habían ido.

Whiss analizó la extraña puerta.

-Es un portal.

-Es lo que ellos dijeron. Solo que no saben a dónde va.

-Solo hay un modo de saberlo.