Capítulo cinco

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Le dije a Ellie la verdad a medias y esperé que no se preocupara cuando me levanté de nuestro espacio y me dirigí a la barra. No me costó mucho encontrar al hombre que nos había enviado tragos para todos, así que me senté junto a él, justo en el lugar que me dejó Ethan, el guapo guardaespaldas.

—Así que, gracias por las bebidas.

Malcolm levantó la cabeza y me sonrió. Sus ojos brillaban y supuse que durante un rato él había estado bebiendo.

—Gracias a ti por venir. ¿Qué tal tu trago? Espero no haya sido demasiado. Sex on the beach es mi favorito.

Traté de no ruborizarme y le sonreí.

—Jamás lo he probado pero me imagino que lo haré ahora...

—La primera vez siempre es buena, nena.

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Me había reído tanto que realmente no me importaba que estuviera un poco borracha frente a un cantante de Rock y seriamente dudaba que él estuviera sobrio. Ambos nos estábamos divirtiendo y pasando el rato. Sin embargo, Malcolm Cox era callado, nunca hablaba sobre él y trataba de mantener mi mente alejada de cualquier cosa que pudiera hacernos sentir incomodos.

Me encantaba estar con él, incluso si en realidad sólo habíamos estado haciendo esto por unos minutos.

—¿Puedo decirte algo Gianna? —arrastró las palabras y yo asentí—. El chico era un idiota, ni siquiera le importaron tus sentimientos. Tus muy buenos sentimientos —se acercó a mí y tomó uno de los mechones sueltos de mi cabello y lo acomodó detrás de mí oreja.

Mi respiración se detuvo un instante y luego volvió a la normalidad cuando él se separó. Me levanté deprisa antes de comenzar a sentirme incomoda y lo arrastré hasta la pista de baile donde sonaba Ariana Grande.

Me dejé llevar por la música y bailé junto a Malcolm. Lo sentí apretarse junto a mí y su respiración en mi oído. Mis piernas se sentían débiles por su cercanía y mi corazón comenzó a acelerarse.

Quería besarlo y no sabía si eso estaba bien.

Me giré para decirle que tenía que irme pero justo en ese momento, cuando nuestras miradas se encontraron, él me besó.

Había leído un montón de situaciones en donde los protagonistas se besaban, las miles de palabras absurdas que se usaban para describir ese momento electrizante pero nada de eso podía describir lo mío con Malcolm. Sí, sentía la desesperación del beso pero no había sentido el "click" como en las novelas de romance.

Sus labios se movían en sincronía con los míos mientras que su mano permanecía en mi mejilla.

Duró muy poco, pero tuvimos que separarnos para tomar aire. Él me sonrió y se encogió de hombros.

Abrí mi boca para decirle que tenía que irme, pero en su lugar, volví a besarlo.

Malcolm y yo nos besamos mucho, volvimos a la barra y pedimos otros tragos. Él no tenía una gran resistencia al alcohol y yo, por desgracia había bebido más que él por lo que sí, estaba culpando al alcohol por dejarme llevar por los impulsos. Además había venido a celebrar mi cumpleaños, y Malcolm me hacía reír y no sentirme como una completa idiota.

No recuerdo todos los besos que tuvimos, sin embargo, la última vez que me separé de él, estábamos en una gran oficina. Me encontraba sentada en el escritorio y Malcolm tenía sus manos en mis piernas, tratando de subir mi vestido. Su chamarra por otro lado estaba en el piso; ambos respirábamos con dificultad.

—Yo... —mis manos se dirigieron a su pecho para detenerlo, no quería hacerlo, pero no estábamos pensando coherentemente —, no puedo Malcolm, estoy un poco ebria al igual que tú, y...

—Lo sé —dijo, con voz ronca. Él juntó nuestras frentes mientras se normalizaba su respiración.

—No quiero ser el tipo de chica que usa a alguien como rebote. Es decir, lo que pasó con Charlie...

—Te entiendo. Lo siento, no estaba pensando con claridad —se aclaró la garganta—, aún no pienso con claridad, pero lo siento.

—Lo siento también, no soy... no soy así, no me voy con chicos extraños ni nada de eso.

—Nunca podría tomarte por alguien así.

Él se alejó y se sentó en la silla frente a mí.

—Perdón.

—Podemos ser amigos.

Sonreí y me bajé del escritorio, acomodando mi vestido. Mi teléfono estaba aún en el bolsillo. Lo revisé y vi todos los mensajes de Ellie.

—No creo que sea buena idea.

Pero mientras lo decía, tomé el bolígrafo de su escritorio y escribí mi número en su brazo. 

▶Playlist del capítulo

🎸 Into you - Ariana Grande

🎸 Owner Of a Lonenly Heart - Yes

🎸 Is It Any Wonder? - Keane

Tone-deafDonde viven las historias. Descúbrelo ahora