Comenzó con un reto | Bughead

Capítulo 29

Cheryl

- Ya en un par de dias te sacaré, ya le robé el dinero a la ingenua de Betty, literalmente no sé quién se cree ¿La más importante del m... - Fui interrumpida por ella nuevamente, pero no podía decir que la odiaba, ella me estaba ayudando, y si yo quería que ella me ayudara, yo debía hacer lo mismo.

- No quiero saber nada sobre Betty ahora, sólo quiero salir de ésta puta cárcel de una vez por todas ¿Entendiste? - Ella golpeó la mesa, no era buena señal.

- Sí... Mamá.

Pov Jughead

La cafetería estaba más llena que nunca. Iba a colapsar literalmente. Tras media hora de charlar con Betty sobre que película íbamos a ver, nos atendieron. Betty procedió a hacer el pedido.

- Holis, bueno quería pedirle por favor dos lattes. - la atendía un chico, y no me agradaba del todo por cómo la miraba, se notaba que él la quería en su cama.

Los celos corrían por mi sangre y apreté mis nudillos, pero me iba a controlar, él no le hizo nada a Betty, así que no tengo que hacer nada.
El chico volvió con los pedidos y se los dio a ella junto con un papel, que creo saber que tenía.
Salimos de la cafetería y fuimos rumbo a casa. Llegamos y fuimos a nuestra habitación. Pusimos Netflix y comenzamos a tomar nuestro café. Vi que comenzó a leer el papel así que no dudé en preguntarle qué decía.

Pov Cheryl

Pagué la fianza con el dinero robado y llevé a madre a nuestra mansión.
Yo si tenía una casa, no como Jughead y los otros que fueron a mudarse a la de Betty, pobres.
Aparqué el auto, salimos de él y procedimos a entrar a la casa. Era mucho más grande de lo que recordaba y no me molestaba.

- Hogar, dulce hogar. - dijo ella mientras tiraba su bolso en nuestro gran sillón. - Saca el mapa Cheryl.

- Sí, madre. - fui a buscarlo y estaba intacto, ni una mancha, ni una arruga.

Pov Betty

Estaba por leer el papel cuando Jug me interrumpió.

- ¿Qué dice ese papel? - preguntó frunciendo el ceño.

- ¿Qué crees que dice? - le pregunté para ver qué decía.

- Dejame ver, vamos.

- ¿Y si no quiero? - le dije haciendo cara de perrito.

- Te tendré que follar, así de fácil. - dijo acercándose amenazante mientras miraba mi boca.

- N-no serías capaz. - dije tratando de alejarme de él, tuve que salir de mi cama y aún así seguí caminando para atrás, hasta que choqué con la pared.

Se acercó a mi cara hasta casi rozar nuestros labios, y susurró- te quiero follar Betty, no puedo contenerlo.

Le dí un beso casto y le dije- no tienes porque contenerte.
Comenzó a besarme, sentir sus labios contra los míos era tan caliente. Introdujo su lengua y eso me descontroló del todo. Empezó a dejar besos en mi cuello hasta llegar casi a mis senos.
Me sacó mi blusa y desabrochó mi brasier, me tapé porque me daba vergüenza, pero él me sacó las manos de ahí y dejó besos húmedos por allí hasta llegar a mi abdomen, pero él seguía con su ropa intacta, así que le saqué la remera, y el pantalón mientras lo besaba, creí que había hecho todo muy rápido, pero él siguió.

Me bajó mis bragas y comenzó a besar y succionar mi zona íntima, no me culpen por decirle así, me lo enseñaron a decir de esa manera.
Se sentía extraordinario, y me estaba llevando a otro mundo.
Estaba soltando gemidos, pero me daban vergüenza así que me tapé la boca, pero él paró la sacó de ahí y me dijo: no tengas vergüenza, me pone mucho que gimas.

- Espera Jug - le dije entre jadeos.

-¿Qué pasó hermosa?

- Quiero hacer algo, sólo acuéstate.

Asintió y se acostó.
Yo tenía vergüenza, pero ya estaba decidida a hacerlo.
Le saqué su bóxer, mierda lo tiene muy grande. Tragué saliva.

- ¿Te gusta lo que ves? - me sonrojé por lo que dijo pero volví a lo mío.

Agarré su amiguito y comencé a moverlo con la mano, lo tocaba y creí que lo estaba haciendo mal.

- Agh, Betty - gimió - mierda.

- ¿Lo estoy haciendo bien? - pregunté algo insegura.

Volvió a gemir, y con la voz entrecortada logró decir - de maravilla hermosa, sigue.

Entonces procedí a comenzar a lamerlo, no sabía mucho sobre esto pero parecía que él lo estaba disfrutando. Entonces él se sentó y se tiró arriba mío.

Volvió a besarme y volví a gemir.

- Betty, quieres...

- Oh, si Jughead, hazme tuya.

Agarró un condón, se lo puso y comenzó.

Una embestida, dos, tres...
Ya no las conté más, pero estaba llegando al clímax.

Se acostó al lado mío, rendido y me dió un beso casto.

- Betty, eres genial.

......

Volviiiiii, se que siempre tardo mucho, en serio perdóneme, creo que estaba vez definitivamente me quedo.

MUY IMPORTANTE
Quédense en sus casitas, pónganse alcohol en gel y lávense las manos cada una hora. Y como siempre, tomen awita.

Besosssss hermosxs