Más allá de tu mirada

CAPÍTULO 31

En dos días Donghae tendría que regresar, aunque aun no estaba seguro de hacerlo. Había enviado un mensaje de texto a Eunhyuk para que se lo comunicara a Soo Ah. De ahora en adelante las cosas cambiarían muchísimo. Ahora no solo era la vida de Young Jae, ahora era la vida de todos los que rodeaban a Soo Ah. ¿Que tanto le había creado Joon Hee a Donghae?

—Señor...— pronuncio Donghae al entrar al despacho.

Park Joon Hee hojeaba unos documentos de su laboratorio. Ni siquiera había alzado su rostro para verlo.

—¿Que quiere, Lee?— pregunto con fastidio y frialdad. Cada día que  pasaba lo trataba con más frialdad.

—¿Acaba de llegar una invitación para usted?

—¿De que o que?

—No lo sé, señor. Véalo por usted mismo.

—A ver, extiéndamela...— dejo los documentos de lado y tomo la invitación en sus manos—. ¿Quién la envió?

—No lo sé, señor. Un mensajero la trajo. Yo solo firme el documento que trato y me entrego la invitación.

—Bien... Debe de ser importante, ya que tiene la insignia de la asociación de diseñadores del país. Veamos que contiene esto.

Joon Hee abrió la invitación y comenzó a leerla.

"Le damos la cordial invitación a la familia Park a nuestra noche de pasarelas. Ya señora Park Soo Ah esta nominada en uno de los premios más importantes de la noche. Le invitamos a recoger el premio más importante de ganarlo. De la señora no poder asistir, solicitamos que el señor Park Joon Hee, medico estrella del país, recoja este premio. Solicitamos la presencia de alguno d los dos. Será un honor tenerlos en esta gran celebración".

—Soo Ah nominada y desaparecida, que gran combinación, ¿no cree?— le pregunto a Donghae.

—Señor, le pido de favor que... No mezcle mi trabajo con cosas de su esposa. No es muy cómodo ya que no tenemos ningún tipo de relación. La relación que teníamos es simplemente pasado, un pasado que quedo enterado el día que mi esposa, su hermana, falleció.

Joon Hee asintió.

—Que bueno que lo aclare, no me gusta que mis empleados se envuelvan mucho con mi esposa o mi familia.

—Lo tengo muy claro, señor y se lo respeto.

—Me gusta que nos entendamos. No me gustaría tener que despedirte.

Kim Soo Jin

Preparaba los últimos detalles para nuestra gran aparición. Myung Yi me ha dicho que la inyección permanente para borrar la memoria de Joon Hee esta hecha. Me pregunto quién habrá sido su primera víctima. Ese desgraciado tiene que pagar todo lo que me ha hecho. Pagara por haberme encerrado, por haberme violado, por haber perdido a mi hijo por los múltiples golpes que me proporciono cuando se enteró que estaba embarazada. Son cosas que jamas podré borrar de mi cabeza. Maldigo al hora en la que me case con un hombre como él.

—Pagaras Joon Hee... Juro por mi vida que pagaras.

Baje a la cocina en donde encontré a Soo Ah con Young Jae, y Ye Ryun con su pequeña Ji Ni. Ambas alimentaban a sus hijos. Ver esa escena debo de admitir que me daba mucha tristeza. En estos momentos hubiera tenido a mi hijo o tal ves hija, pero Joon Hee me arrebato la posibilidad de tenerlo o tenerla en mis brazos. 

—Jin, ¿que haces allí parada? Ven y come con nosotras. Ni siquiera desayunaste hoy, ya es tarde y deberías de al menos almorzar algo— dijo Soo Ah quien le llevaba una cucharada de algún majado que le preparo la señora Cho.