CAPÍTULO 27

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Lee Donghae

Me fui de la hacienda con el corazón hecho pesados. Alejarme de ella por dos semanas y media no era fácil para mi. Quería permanecer más tiempo con ella. Desperdicie dos años y dos meses sin ella, y no volvería a pasar por aquello nuevamente. Salí de aquella hacienda solo para calmar las cosas y ver si todavía la sigue buscando. Llegue al atardecer a la bendita mansión, pero aun así lo hice. Estacione el auto frente a la casa, baje de él y entre a la casa sin previo aviso.

—Señor Lee...— hablo ese maldito desgraciado una ves entre a la casa. Joon Hee se encontraba sentado en el mueble tomando una copa de vino.

—Buenas tardes, señor. Espero no haber demorado mucho en regresar.

—Tranquilo, no se preocupe. No hay problema. Le dije claramente que lo llamaría una ves tuviera noticias de mi esposa, pero ya veo que no lo tuve que hacer, usted se me adelantó.

Sentí mi cuerpo tensarse. ¿Acababa de insinuar que tiene información sobre el paradero de Soo Ah?

—Y bien... ¿Que noticias me trae de mi esposa?— me pregunto colocando la copa en la mesa que tenia frente a él.

—La única información que tengo, es que la vieron junto a un hombre de algunos 41 años en los Estados Unidos, en Nueva York. Quisiera haber tenido as información, pero la verdad es lo unció que me pudiera dar.

—Creo que tus contactos no pusieron tanto esfuerzo. Pero tranquilo, ya hice una investigación a fondo y ya se lo as importante. Soo Ah no abandono el país como dijeron.

Como sabia que no había abandonado el país? Myung Yi se aseguro de comprar un boleto de avión a nombre de Soo Ah. ¿Como demonios lo describió?

—Esa desgraciado esta por algún lado de la cuidad escondida. Esta jugando con mi paciencia. Pagara muy caro la vergüenza que me ha hecho pasar. No dejare que se salga con la suya. No  le permitiré que me pisotee, nadie me puede pisotear.

—Con todo respeto, señor. ¿La investigación es confiable?

—Claro que es confiable, por que lo duda?

—No, señor, no lo dudo. Solo me aseguro que pueda encontrar a su esposa.

—Entiendo— asintió varias veces—.  Sabe, Lee. Tengo un nuevo trabajo para usted. Es provisional, solo en lo que mi esposa aparece.

—Entiendo. Por mi no hay problema. Usted no más ordene y hace lo que me pide.

—Me gusta mucho tu actitud, Lee. Ni siquiera el idiota de Jang hace un buen trabajo, hay que decirle muchas veces las cosas y ya me estoy cansando de eso.

—Entiendo perfectamente.

—Necesito que de ahora en adelante, se encargue de todo lo referente a mi laboratorio. Solo en lo que aparece mi esposa. Una ves aparezca, regresa a ser su guardaespaldas.

Trague fuerte. De solo mencionarme tal laboratorio, se me contrae el estomago.

—Así será, señor.

Soo Ah acababa de entrar a la casa cuando el teléfono celular sonó. Miro al pantalla y allí estaba el nombre de Donghae. Sonrió, pero la misma se esfumo, apareciendo la tristeza en su rostro. Tomo un poco de aire y luego respondió la llamada.

—Hola amor...— intento sonar lo mas animada posible, pero era casi imposible.

—Hola preciosa, ¿como estas?

—Bien— mintió—. Y ¿tú?— le pregunto.

—Con muchas ganas de regresar— le confeso.

—Yo también quisiera que regresaras.

Más allá de tu miradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora