Please, give him back to me (TAETEN)

La Proposition

Al término de la clase Johnny salió antes que todos, no quería cruzarse con Taeyong y decidió que no le hablaría en unos días más.

Taeyong por su lado se sentía extraño debido al comportamiento de su amigo, pero pensó que eran problemas de su casa o de seguro un mal día de esos que todos tienen, no le dio vueltas a ese asunto y salió con un solo destino en su mente, la academia de baile.

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Cuando estuvo ya parado en la puerta del edificio arrugó el entrecejo pensando que ya todos se habían ido, porque todo estaba tranquilo y la luz era muy tenue.

Se adentró más y al llegar al salón de Ten se quizo dar un golpe mental por haber llegado tan tarde, pero cuando decidió ir a casa escuchó un golpe seco, como si alguien se hubiese caído.

Siguió los ruidos que escuchaba, parece que alguien estaba bailando sin música y al llegar a un enorme teatro vió a una pequeña persona bailando en medio del escenario, al ver la concentración de aquella persona supo sin dudar que era su chico, luego de verlo un rato bailar en silencio, notó un piano en la parte trasera del lugar.

Se acercó intentando no pasar frente a Chittaphon y silenciosamente se sentó en el piano, puso sus manos en este y sintió las teclas como pensando qué canción iría bien con el baile que realizaba ese pequeño angelito.

The Edge of a Petal de Brian Crain, era una melodía perfecta, era hermosa y era tranquila, justo como Chittaphon y su baile.

Taeyong se puso a tocar y cuando el tailandés escuchó la música sonrió, sabía quién era, así que solo se relajó y siguió la música.

La manera tan exquisita en la que Taeyong tocaba el piano, más la forma tan singular e insuperable de bailar de Ten era la combinación perfecta para esa pieza de piano, eran solo ellos dos, dando todo de cada uno, pero no para un público, ya que estaban solos, bailar para los demás es muy aburrido, muy común.

Ellos estaban dando el todo para su todo.

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Taeyong dejó de tocar y Ten de bailar, este último corrió a abrazar al coreano que se encontraba ya de pie y el otro simplemente lo abrazó tiernamente por la cintura, sonriendo en medio del abrazo.

--Eso fue hermoso Taeyong hyung, gracias, necesitaba una inspiración para bailar y eso definitivamente me inspiró, o talvez fue otra cosa. Rió

Taeyong se sonrojó y se separaron parcialmente del abrazo, con Taeyong aún rodeando la cintura de Ten se vierón a los ojos.

-De nada Tennie, no tienes que agradecer, más bien yo debería agradecerte a ti por ayudarme esta mañana, no creas que no vi la forma en la que limpiaste mi casa, no tenías porque hacer eso, tonto. Rió tiernamente y le dio un pequeño beso en la frente.

Ten se sonrojo y volvió a abrazarlo.

--No fue nada, yo quise hacerlo y ahí queda el tema.

Estuvieron de esa manera un largo rato hasta que ya era hora para ambos de irse.

Al llegar ambos a sus hogares, Taeyong sabía que era el momento para pedirle a Ten ser su enamorado, no le importaba lo rápido que algunos verían su accionar, pero quería hacerlo, tenía que hacerlo, no lo perdería por nada del mundo.

Sin que Ten se diera cuenta, Taeyong había pedido ayuda de Sicheng para preparar una sorpresa, aunque en un principio quizo la ayuda de Johnny, este dejó de responderle cuando se enteró para que lo llamaba.

Tae se sintió dolido por eso, pero nada impediría su plan.

Se reunió con Sicheng a escondidas de Ten y planearon algo que ni en sus más locos sueños Taeyong pensó que haría, era simple, pero muy significativo, sería hermoso.

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Los días pasaron rápido, los dos habían comenzado a salir mucho más y ya estaba todo preparado para la propuesta.

La idea estaba yendo a la perfección, había llevado a Ten a su casa como en un cita normal, ya era tarde y se habían incluso despedido, pero era ahí donde entraba Sicheng en acción.

Este último sacó a Ten de la casa con engaños, algunas de las cosas que le decía era "tengo hambre, pero en la casa no hay lo que quiero", "necesito aire, me siento encerrado", "debes ir conmigo porque eres mi primo", "no quiero ir solo, tengo miedo". Luego de tanta insistencia Ten aceptó acompañar a su primo quisiera.

Taeyong ya estaba listo, estaba cambiado y el lugar ya estaba decorado, solo faltaba lo más importante, Ten.

Sicheng llevó a Ten a un enorme salón vació, donde únicamente había un piano al medio iluminado por una luz que caía del techo.

Le pidió a su primo que se vendara los ojos, lo cuál fue todo un reto, porque Ten se comenzaba a asustar, pero este lo tranquilizó diciendo "confía en mí, jamás te haría daño" y así fue como accedió.

Luego de vendarle los ojos lo dejó solo sin decirle nada, Ten se empezaba a estresar porque no escuchaba ni veía nada, el miedo a la oscuridad que tenía pudo más y terminó quitándose la venda.

Estaba por salir corriendo del lugar cuando no vió a Sicheng por ningún lado, pero no lo hizo cuando vió al rubio de perfecta sonrisa sentado en el piano, estaba con un traje no tan elegante y debajo de esa luz brillaba.

Quizo correr a él, pero lo veía muy concentrado en el piano que tenía en frente, se acercó un poco más para poder verlo y fue ahí cuando empezó a tocar.

Taeyong había elegido Mariage d'amour de Richard Clayderman, una melodía muy romántica, solo con leer el título se podía decifrar, tocaba mejor que nunca, ni siquiera él sabía que era capaz de tocar de aquella manera.

Al terminar tomó un largo suspiro y se paró, vió a Ten a punto de llorar y corrió para abrazarlo.

Rió. -Tennie, ¿porque lloras precioso?

Ten seguía sollozando y abrazó fuerte a Taeyong. –No me esperaba eso, estaba asustado y luego apareciste tú en medio de toda la oscuridad, como quieres que no llore. Hizo un puchero y luego Taeyong lo separó.

-Bueno, de echo hay algo más por lo que estás aquí. Ten escuchaba atento a todo. -Esa canción que escuchaste fue la que iba practicando mentalmente cuando chocamos de casualidad ese día, desde ahí se volvió muy importante para mi.

Taeyong moría de nervios por lo que sucedería despues, si la respuesta terminaba siendo que no, jamás volvería a escuchar igual esa pieza de piano que tanto le gusta, así que suspiró y tomó valor.

-Ese día supe que no querría dejarte ir nunca más, supe que un rayito de sol había entrado a mi vida para iluminarla completamente, un nuevo motivo para sonreir había aparecido y me prometí que no lo iba a dejar ir por nada del mundo, Ten, eres hermoso, a mis ojos eres el ser humano más perfecto que puede existir, eres tan increible por dentro y por fuera, brillas de una manera estupenda y a pesar de todo lo que has pasado siempre has mostrado tu mejor sonrisa para no preocupar o deprimir a los demás, no se cuál será tu respuesta luego de que termine, pero quiero decirte que eres lo mejor que me ha pasado, no soportaría que algo te sucediera, a donde vallas yo te voy a seguir y te protegere para que no sientas miedo, te ayudaré a no sentirte menos que nadie y sobre todo te mostrare lo mucho que vales y que te amo todos los días de tu vida, pero para poder hacer eso primero necesito tu permiso.

Taeyong le tomó la mano y lo vió a los ojos.

-Chittaphon, ¿Quieres ser mi novio?

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Aquí estoy, espero poder escribir el resto de capítulos porque ando con lecturas por todos lados, espero estén disfrutando la historia L@S QUIERO💚💚