LUNA LLENA [FIC BSD]

Pequeña broma

Dazai se veía gracioso, una camisa que le quedaba algo ajustada de las mangas y pantalón un poco corto de fondo las vendas que cubrían sus heridas aún no sanadas del todo.

- ¿Acaso es ropa de un duende?- se quejó

- es lo que mejor que pude conseguir, pero es mejor opción a que andes desnudo por ahí.

- por cierto ¿De qué era la sopa que me diste?

- de verduras

La cara sonriente de dazai se transformó a una de asco

- lo siento pero yo no consumo carne.

Con puchero y ojos suplicantes- pero yo sí como, mi alimentación es a base de carne

- tendrás que acostumbrarte.

- pero te he dicho que mis instintos siempre ¡están activos!

Con la ropa puesta y estar lo más presentable posible Dazai acompañó a Mori al centro del pueblo, exactamente fueron al local de Koyo. El doctor fue muy bien recibido tanto que le ofrecieron un poco de te y galletas en lo que esperaba que las aprendices terminarán de tomar medidas y mostrarles los posibles diseños. Mori agradeció la invitación por el té pero tenía que arreglar un asunto pendiente, dejo al castaño en manos de las mujeres y él se fue a ver lo que sería su consultorio.

Algunas cosas ya habían llegado desde la ciudad, otras no tanto. Faltaba su instrumental quirúrgico pero al menos tenía lo esencial.

- ¡que bueno que lo encuentro doctor!!

Nuevamente el pelirrojo hacía su aparición

- ¡oh! Chuuya ¿Qué pasa?

El muchacho a diferencia de la mañana lucía bastante agitado y sudoroso.

- ¡mi hermano!, ¡Venga!

Tomó el botiquín que recién había llegado a su consultorio y salió corriendo con Chuuya como su guía. Llegaron a la herrería, Oda estaba sentado en un banco con una mano sumergida en un balde de agua.

El herrero había tenido un accidente, las tenazas con las que manipulaba el metal caliente se rompieron provocando que el trozo candente tocará la mano del herrero.

Al parecer estos accidentes eran más comunes entre el mundo de la herrería. Mori revisó la mano, afortunadamente el metal no hizo el gran daño esperado, limpio la herida y le recomendó un ungüento natural para evitar cualquier infección, y que mantuviera el uso de su mano al mínimo.

Chuuya agradecido de que su hermano no hubiera sido gravemente herido, le ofreció al doctor un pollo desplumado y listo para cocinar..

Si bien el dinero era usado en aquel lugar era bastante común el trueque, dar algo por algo recibido. Y aunque Mori había aclarado que su labor principal era ayudar a las personas a cambio de comer tres veces al día era suficiente, el rechazar el gesto de agradecimiento de Chuuya era algo grosero, decidió tomar al animal.

De regreso al local de las modistas vio como las dos chicas mantenían una acalorada discusión.

- se vería mejor con este tono

- ¡¡que no!!

Mori se rió al recordar cuando en la bella durmiente las hadas madrinas mantenían una pelea por el color del vestido de la princesa.

- ¿Que sucede? - se atrevió a preguntar

- solo una diferencia de opiniones- respondió Koyo -pero ya hemos terminado con el muchacho.

- gracias por su tiempo - fue como se despidió .

Dazai que caminaba junto a Mori - Hey ¿que llevas en la canasta?, huele a pollo - aún más inquieto- ¿has comprado pollo solo para mi?

- ¡¡Mori!!- gritaba mientras se acercaba un hombre mayor cargando unos buenos troncos de madera, de hecho cargaba más de la capacidad que un hombre normal podía llevar sobre sus hombros. Los leñadores habían vuelto de su tarea diaria e iban llevando cada quien lo talado.

-Fukuchi - fue como respondió el doctor y con un tono preocupado- no deberías cargar tanto,te podrías lastimar

Depósito los troncos en el piso y se acercó hasta Mori- agradezco tu preocupación,pero es trabajo - y mirando al acompañante del doctor - tu debes ser el aprendiz.

Dazai por instinto se escondió detras de Mori

- es un aprendiz un poco tímido.

- en fin ya después tendremos tiempo de conocernos más, por cierto más tarde habrá una reunión en el bar, estás totalmente invitado.

Fukuchi volvió a tomar los tronco y se los llevo al hombro - si no vienes ire por ti - y se alejo.

una solos otra vez, mientras caminaban de regreso a casa -¿porque te escondiste?

- no lo se, actué por inercia- y mirando fijamente a Mori con una sonrisa que daba miedo- por otro lado ¿seguro que no eres hembra?

Si Mori estuviera bebiendo algo seguro lo escupiría - ¿a qué viene esa pregunta?

- estoy atando cabos y estoy llegando a esa conclusión.

-Explicate

- cocinas, tienes tacto para los niños, tu rostro no perfila en uno muy masculino, tu aroma es diferente y-y es obvio que el sujeto de antes tiene ciertas intenciones contigo.

- no no, yo cocino porque tuve que aprender a prepararme mis propios alimentos, y Fukuchi es solo un amigo.

-mis instintos me indicaron otra cosa.

- ¡Dazai deja de decir incoherencias!

Mori despues de eso se había molestado con el chico, este último había hecho una rabieta y decidió salirse de casa "¡me voy!, después de todo ni siquiera este es mi hogar" había pasado ya cuatro horas habían transcurrido desde su berrinche y ya empezaba a ocultarse el sol, mientras Mori picaba zanahorias - creo que fui muy duro con el.