LUNA LLENA [FIC BSD]

Una larga conversación.

El antídoto estaba listo y era el momento de aplicarlo. Fukuzawa estaba sentado en la cama del doctor, mientras este lo atendía muy de cerca.

-Por favor no se mueva tanto.

-arde.

-si no limpio bien podría haber infección, ahora quieto.

casi aguantando la respiración dejó de moverse y sintió como el alcohol hacía su labor de desinfectante

-¡Ahora vuelvo! - anunciaba Dazai que había entrado a la habitación sorprendiendo a los adultos, provocando que más líquido se derramara sobre la herida

-aahgk , eso ardió más-mirando al castaño con un leve enojo -Espera, ¿a dónde vas?

-ayer  hice un trato con un chico a cambio de un conejo, así que iré a cumplir mi parte-y sin más se marchó.

- espera, dijo ¿conejo?- hablaba Mori que se dedicaba a guardar todo en su botiquín- significa que ayer no solo comió pollo sino también ¡¡conejo!!

-¿eso tiene algo de malo?- Fukuzawa que no entendía sobre el problema.

- quiere decir que comió mucho, es decir entiendo que es un chico en crecimiento pero debe tener una dieta más equilibrada.

- es mitad lobo, necesitamos de la carne más de lo que imaginas.

-pero también es mitad humano.

Y así se formó un pequeño debate sobre la alimentación apropiada para un chico que concluirá con más conversaciones de diversos temas.

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-¡¡Por fin llegas!!- gritaba Chuuya mientras cargaba dos enorme baldes de agua.

-Tarde pero listo para el deber .

-Creo que formalmente no nos hemos presentado - bajando las dos cubetas de agua - Mi nombre es Chuuya y hoy seré tu jefe.

- puedes llamarme Dazai y solo hoy dejaré que me des órdenes, el conejo estuvo delicioso.

Esas palabras elevaron aún más el orgullo del pelirrojo - gracias, lo prepare con mi receta personal, pero ahora ¡a trabajar!, toma estas cubetas y llévalas adentro, las vacías en el contenedor principal y vas al pozo por más agua, debes hacer esto hasta que el contenedor esté lleno. Cuando termines me avisas.- mirando los vendajes que el otro llevaba - puedes tomarte tu tiempo y hacer intervalos de descanso si lo consideras necesario.

-Ah, no preocupes por esto, ya estoy sanando - y moviendo su brazos delgados - soy fuerte.

Chuuya que aún no estaba tan convencido del todo -Bien, solo no te sobreexijas.

Oda quien era el herrero principal y bastante requerido por su maestría a la hora de forjar tenía muchos pedidos, pero debido a su accidente estos se habían estancado en la mesa de "pendientes a terminar", Chuuya al ser el siguiente en la línea de forja y uno de los mejores aprendices tuvo que continuar con los muchos pedidos atrasados.

Uno de ellos eran varios cuchillos para el carnicero, éste había llegado con sus viejas herramientas pedía que con el mismo metal que fueron hechas se volviera a reutilizar para los nuevos cuchillos. Sencillo era agarrar un pedazo de metal e iniciar el proceso pero tomarlo directamente de un cuchillo ya forjado era un tarea un tanto difícil y más si no conoces el procedimiento que se realizó en el metal.

Con eso en mente tomó el metal y fue directo al horno ,con una pinzas lo retiro cuando el metal se puso al rojo vivo e inició el verdadero trabajo, el martilleo. Con una pinza sostenía fuertemente sobre un yunque, y con la otra llevaba un mazo que con precisión golpeaba el ardiente metal, cuando este bajaba su intensidad de brillo volvía al horno a calentarlo, y así sucesivamente hasta que tuviera una forma decente y estuviera satisfecho con el resultado del martilleo.

-ooh, vaya si que tienes fuerza - decía Dazai mientras estaba sentado en un banco junto al contenedor totalmente lleno de agua.

-¿terminaste?, creí que te llevaría más tiempo.- y llevando nuevamente el metal al fuego - espera ya casi termino esto.

Dazai quien era espectador de la magia de Chuuya en la forja, jamás se había impresionado en como alguien daba fuertes golpes a un metal, rápidos, fuertes y justo donde tenía que ir el golpe. Hacia un calor endemoniado ahí adentro pero valía la pena presenciarlo.

Cuando salieron de la herrería ya estaba oscureciendo.

-¿Tanto tiempo pasamos ahí dentro?

- la forja lleva su tiempo

-¿que pasa si dejas mucho tiempo el metal en el horno?, ¿se derrite?

-hahaha- una risa de lo más bonita salio - para eso debe estar a una temperatura muy elevada, lo que pasará es que el metal se hará débil y al primer golpe se quiebra.

-¡que interesante! , ¡dime más!

Una charla que duró bastante mientras caminaban a casa de Chuuya, en el camino se encontraron a un albino.

-Chuuya, que bueno que te veo, recibiste una carta, la he dejado en tu buzón.

-hey gracias, ¿como va tu investigación de las cartas misteriosas?

- sin duda, ya tengo un plan maestro para identificar a quien las deja.

-Buena suerte

-Gracias, pero debo apurarme es casi hora de cerrar y Kunikida es muy exigente con el horario.- se marchó corriendo y despidiéndose a la distancia.

-Dazai, ¿te gustaría cenar en mi casa hoy?, trabajaste duro a pesar de tu condición. Hoy es estofado de res

- que amable de tu parte, pero creo que lo dejaremos para otro día.

Se despidieron y Dazai llego a casa de Mori.

-he regresado-

Los dos adultos que estaban en el comedor acomodando lo que sería la cena y como si fuesen búhos giraron su cabeza a dirección del recién llegado.

-Te estábamos esperando

-¿es..estoy en problemas o algo asi?

-para nada- decía el pelinegro- toma asiento la cena está servida.

Dazai se sentó pero sentía el ambiente un tanto diferente.

- antes que llegaras tuvimos una muy larga conversación sobre tu alimentación y llegamos a una buena conclusión- destapando el primer platillo de la noche.

-sopa de verduras - miró suplicante a Fukuzawa, sin duda el líder de la manada, alfa, el lobo respetado por muchos no permitiría esta barbaridad.

- El doctor Mori me explico que a tu edad debes tener los suficientes nutrientes para que crezcas fuerte y sano.

"oh no, ni en su peor pesadilla habría previsto tal situación"