Robbie.
Me despierto como cualquier día, voy al baño y seguido de esto voy a la cocina, en donde la cocinera me sirve el desayuno.
-bueno días Margaret, gracias por el desayuno, nadie más ha bajado a almorzar?
-no hija, a almorzar no, solo su padre vino por un café y se fue a trabajar.- voltea a ver mis moretones en los brazos- otra vez " te caíste jugando en el patio"?
-Sí, esta vez me caí muy feo- dije bajando la vista a mi desayuno.
- después de que te bañes te daré una medicina para eso ok?
- Sí, gracias, pero ahora debo de terminar de almorzar, la última clase en la universidad empieza en una hora.
-y ya vacaciones verdad?- me pregunta mientras ve el botiquín
-Sí, al fin vacaciones de verano. Bueno, voy a bañarme.
☆☆☆
Salgo de mis clases de la universidad y en la entrada me recoge el chófer de mi familia. Voy a entrar a quinto semestre de universidad y estoy estudiando leyes.
Llego a la casa y me voy a mi habitación, ahí me estoy un rato hasta que el calor de California me hace querer ir a la piscina. Me pongo mi traje de baño y bajo al patio.
Como se puede deducir vivo en una situación bastante buena, mi padre es uno de los mejores abogados de su bufete y gana mucho dinero. No tengo madre y tampoco hermanos, así que para mi mala suerte, solo estamos él y yo en la casa, aparte de las empleadas, a quienes quiero mucho.
Me pongo mis audífonos y me pongo en un flotador en el agua con el atardecer y así pasa el tiempo hasta que anochece. Salgo de la piscina y me voy a mi habitación, me doy una ligera ducha y me cambio con mi pijama. Me quedo en mi recamara hasta que, alrededor de las 11 de la noche se escucha un portazo horrible, dándome a entender que mi padre, otra vez borracho esta en casa, tengo 19, aún soy bastante joven, y aun tengo que soportar esto.
Me oculto en el baño, y trato de ser silenciosa cuando mi padre entra en la habitación.
-no está esta niña, de seguro se fue como la zorra que es a la calle- grita y se escucha como cae una botella de vidrio al suelo, cosa que me sobresaltó. Maldición.
Abre el baño y me encuentra.
-así que aquí estabas! Te he dicho que no te ocultes de mí, siempre has sido una cobarde!...- las palabras se escuchaban cada vez menos conforme más golpes recibía, me tiró al suelo haciendo que sólo escuchara un zumbido y que todo se tormara negro.
☆☆☆
Me despierto y lo primero que veo es a Margaret, veo el despertador y son la 1 de la mañana.
-que bueno que despiertas mi niña, te golpeaste realmente fuerte esta vez- decía mientras yo comenzaba a llorar, del dolor y la impotencia.
-Margaret, yo no puedo seguir aquí, voy a terminar muerta, y mi padre saldrá ileso. Tengo que irme.- dije mientras me levantaba de la cama poco a poco y tomaba una maleta metiendo mi ropa y cosas básicas, tomé una tarjeta que tenía aparte para mí, de la que mi padre no sabía y tenía ahorrado mucho.
-pero no tienes a donde ir, no tienes auto, y tu padre vigila todo, no quiero que te vayas sin yo saber que vas a estar bien.
-Margaret, voy a estar bien, se lo prometo, la llamaré en cuanto todo pase, de acuerdo?
-bueno, rezaré por usted- me dijo
- yo también lo haré, la quiero mucho- me despedí con un abrazo y salí de casa.
Recorrí el patio y salí saltándome la barda, la puerta es muy ruidosa y los guardias se darían cuenta. Comencé a caminar hacia algún hotel, pero la ciudad esta muy lejos.
Camino y camino y el hotel más próximo esta muy lejos, estoy muy cansada y mis piernas no dan más, tengo hambre y me siento en un banco de la ciudad. Mis ojos pesan terriblemente.
Siento como me mueven de un lado a otro.
-hola, hola, oye, llevas mucho tiempo aquí, necesitas un lugar donde dormir?- me dice una chica algo más grande que yo.
-Sí, de hecho, gracias, eres muy amable, de verdad te lo agradeceré siempre.- dije mientras caminabamos y me lleva a un lugar con puerta negra. Entro primero y cuando volteo siento algo en mi abdomen. Volteo abajo asustada.
Es una pistola. Soy idiota.
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me has condenado
Romanceesta discusión me esta desesperado, no puedo hacer nada por esta situación y eso me hace sentir inútil. -si me odias tanto como dices, entonces porqué no solo me corres y no me vuelves a ver?! se le ve inquieto por lo que le acabo de decir, es la...