capitulo 16.

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Robbie.

Es... Margaret?
Contesto al instante pues ella nunca me había llamado de nuevo, después de lo ocurrido ambas supimos que sin importar cuanto nos quisieramos ibamos a tener que separarnos por otros azares.

-h.hola?- dije con algo de miedo, Adan solamente me veía con una expresión de preocupación.

-hola, querida, hay alguien en la casa, esta armado y no se a quién esta buscando, estoy escondida, grita por el nombre de tu padre...- no se escucha nada y luego simlemente un sonido estridente, se escucha como Margaret reprime un grito- porfavor llama a las autoridades o algo, no creo que se haya ido aún. - cuelga la llamada inmediatamente, pero, porqué no llamo ella desde un principio... no lo entiendo.

-quien era?- me dice poniendo su mano sobre la mía.

- era Margaret, una sirvienta de mi antigua casa, dijo que había alguien ahí y se escucho algo así como un disparo, y-yo no entiendo que pasó,- digo y volteo a verlo y tiene la piel mas pálida- pasa algo Adan?- digo preocupada.

-maldición,  no creí que fuera a hacerlo- dijo para si mismo, luego puso su mano sobre su boca.

-hacer que y quien?- dije ahora un poco enojada.

-mierda! Metete al auto-dijo dejando una suma de dinero y me toma del brazo, ejerciendo una suave presion, haciendome caminar.

-que pasa Adan?- pregunto y de nuevo no me responde- QUE PASA!?- digo y voltea a verme brevemente mientras sigue conduciendo.

-de acuerdo, primero que nada, lo siento, estaba cerrando el negocio de horas antes y cuando me dirigía afuera recibí una llamada, era otro negociante, me dijo que quería cerrar el negocio de otra manera y yo dije que no, el insistio y empezamos a pelear, luego dijo que sabía de ti, yo obviamente dije que no te conocía para no verte implicada en el conflicto, el dijo que sabía donde vivia tu padre y que comenzaria con él y luego seguiria contigo, yo me enoje y seguimos peleando, y luego finalice la llamada. De verdad lo siento, no pensé que si lo fuera a hacer- dice mientras conduce hacia la casa de padre.

-SI LO SABIAS PORQUE NO HICISTE NADA MAS!?- digo enojada

-me ha pasado esto varias veces, y ninguna resultó como esta, pensé que era una más. Quieres que vayamos por tu padre? - me hizo la pregunta y me vi incapaz de respnder.

-n- no lo sé - dije y comence a entrar en un conflicto conmigo misma.

-que quieres hacer? Estamos tomando el camino a tu casa, pero si no quieres ir no te juzgare e iremos de vuelta a casa.

-tenemos que ir, es, es lo correcto- dije totalmente asustada.

Adan.

Sabía desde el principio de mi pregunta que esa sería su respuesta, ella es demasiado buena y tiene mucha conciencia como para dejar esto ser.

Acelero hacia la casa de ella y cuando llegamos volteo a verla y noto como su respiracion es mas acelerada.

-te quieres quedar aquí? -dije esperando que su respuesta fuera que sí.

-no, sisnto que debo ir- dijo y me maldije a mi mismo por preguntar, no quiero exponerla al riesgo.

-d- de acurerdo, abre la guantera ahí hay otra arma, y porfavor, porfavor  ten cuidado y no te separes de mí- dije y enseguida tomó el arma y yo se la quité, ella se apego a mi espalda y fuimos a la casa. Abri la puerta y me aleje para ver si no pasaba algo, al ver que no pasaba nada entré con cuidado.

Seguimos caminando hasta escuchar un ruido, lo seguimos de inmediato y al abrir la puerta se encontraban tres personas, dos de ellas amarradas a una silla, una mujer y el señor Flores, y estaba otro que de inmediato reconocí, era uno de los trabajadores de Axel, la persona con la que estaba negociando, de inmediato me apuntó y yo a él.

-aqui estás Adan, y que es eso que veo? Es enserio? Viene contigo la chica? Tu no le temes a nada, pero, no eres tan inteligente como lo pensé.

-a que te refieres?- dije pegando mas a mí a Rob, pasando mi brazo alrededor de su espalda, ella de inmediato estaba viendo a los que estaban en las sillas.

-con la llamada de esta señora sabía que de inmediato iban a llegar, porque así es como funciona el cerebro humano sabes? Literalmente la señora le dijo que llamara a las autoridades y no lo hicieron, en cambio llegaron ustedes, ahora, si no cerramos el trato como lo pide mi jefe el hombre no va a seguir respirando- dijo y de inmediato apunto otra arma hacia el padre de Rob.

-no se va hacer! Entiende que lo que pides es ridiculo! Cuando salga de aquí vas a estar muerto y tu estupido jefe sabe lo que sigue- dije sacando la otra arma.

-baja el arma! O lo mato!- dijo.

Disparé al arma que estaba apuntando al padre de Rob y salió disparada al suelo, y con esto un gran río de sangre de la mano del sujeto. Inmeditamente sujete mas fuerte a Rob intuyendo que el iba a querer dispararme, cuando jalo del gatillo me agache junto con Rob y de inmediato le dispare entre los ojos mientras le cubría los mismos a  ella. El hombre cayó al suelo.

Me levanté junto a ella, la voltee a ver y ella sólo me veía a mí, luego volteamos a ver hacia el padre de Rob y a la tal Margaret.

Fui acercandome a ellos junto con Rob y los desatamos de las manos al igual que la mordaza.

- estás bien?- le dije mientras tomaba su cara con mis manos, Rob al instante sonrió dandome confianza y asintiendo con su cabeza- de verdad siento haberte metido en esto.

-yo...- escuche la voz del padre y volteamos los dos

-n-no digas nada- dijo  ella- l-lo hice por Margaret- dijo con la cabeza baja.

-señora, si se quiere ir con nosotros solo llame a Rob e iremos por usted- dije comprendiendo que ella la apreciaba mucho.

La señora asintió con su cabeza, Rob fue con ella y la abrazó.

Les di su espacio y me fui para afuera de la casa, prendi un cigarro y comencé a  consumirlo, afuera estaba llovendo a cantaros y para mi mala suerte no tenía ninguna sombrilla. Un momento después llegó Rob y nos fuimos juntos al auto, intenté que llegaramos rápido pero la lluvia no me dejaba ver bien, finalmente pude abrir la puerta y entramos.

comence a conducir y en el camino pase mi mano sobre su pierna, y al ver que ella no se movía supe que ya no estaba enojada.

Llegamos a la casa y fuimos a la sala.

No me separe de ella en un solo instante, hasta que cayó la noche y se quedo dormida encima de mi.

La levante en mis brazos y la llevé a la cama conmigo, le quite los zapatos y la tape junto a mí.

me has condenadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora