capitulo 14.

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Adan.

Ha pasado una semana desde aquel día, sé que ella se debe de sentir terriblemente horrible. Intento animarla todo el tiempo que puedo, de hacerle saber que ella no tuvo la culpa. Trato de que todo el tiempo se sienta querida.

Y parece que ella lo sabe, ella es demasiado inteligente, no se que haría yo si ella no se encontrara aquí conmigo, no se que hubiera pasado si no hubiera llegado a tiempo. Maldición, no pude protegerla y es algo que no me deja en paz nunca, mi conciencia nunca está n paz y es que sólo quiero que ella este segura y que no le pase nada malo.

Desde ese día hemos dormido juntos, enseguida tomó confianza conmigo, y eso es algo que agradezco.

Se ve demasiado bonita cuando duerme, y no quisiera tener que despertarla, pero ya es de día.
La muevo un poco en la cama hasta que despierta.

-buenos días Adan- me dice antes de darme un beso.

-buenos días, estos últimos días hemos estado muy encerrados, hay que salir todo el día, llegaremos a casa por la noche solo cuando la diversión se haya garantizado. Qué dices?- le digo

-digo que tienes mucha inicitiva positiva, eso me gusta, yo digo que sí, nos va a ayudar a despejarnos.- dice y se levanta.- que me debo poner?- me pregunta.

-ponte ropa fresca y lleva traje de baño, vamos a la playa, vivimos en la costa y nunca vamos a la playa,- dije.

☆☆☆

Nos arreglamos y para media hora después ya esbamos listos, empacamos todo en el auto y salí de la casa, hoy Rob va a tener un gran día.

Algo de la casa y llego a la calle para llegar a ciudad, al entrar en ella comienzo a ver lo restaurantes.

-dónde quieres desayunar?- le pregunto mientras conduzco.

-allí- señala entusiasmada a un restaurante muy bonito, no lo conocía.

Sigo conduciendo y me estaciono, rodeo el auto y le abro la puerta a Rob y entramos al restaurante, solamente abrir la puerta el olor de comida llego a mi nariz dándome más hambre, continuamos y tomamos una mesa. Llega un mesero.

-buenos días, están listos para ordenar?- dice tomando una libreta.

-oh si, yo voy a querer una ronda de waffles con chocolate y un vaso grande de jugo de naranja- dice ella feliz.

-muy bien, y usted?- me dice.

-yo voy a querer huevos con tocino, una orden de hotcakes, pan tostado, y un taza de café, por favor- dije devolviendo los menús.

Pronto llegó la comida y ya nos encontrábamos almorzando, ella y yo estamos felices.

Comemos y platicamos y al terminar pago y nos vamos de ahí.  Si no hiciera la cantidad de ejercicio que hago ya estaría pesando 120 kilos.

Conduzco y escuchamos música, cantamos y actuamos como si fuéramos los cantantes y no reímos de nuestra pobre actuación. Hasta que llegamos a la playa. Estacionamos el auto y bajamos las cosas que vamos a usar en el día, rento un cuarto para cambiarnos y dejar nuestras cosas, ella pone una sombrilla y las toallas, me cambio la ropa por unas simples bermudas y ella se pone un bikini muy lindo.

-quieres meterte al agua?- me dice mientras se pone bloqueador

-no ahora, voy a leer un poco, pero aquí te veo, voy como en una media hora si?- le digo sacando el libro que estoy leyendo y mis lentes, porque sí, necesito lentes para leer.

-de acuerdo, me puedes poner en la espalda?- me dice y tomo el bloqueador,  le pongo en la bonita espalda que tiene y le pongo un poco en la nariz.

Sale al agua y yo me pongo a leer, de vez en cuando checo que esté bien y sigo leyendo, hasta que decido ir con ella. Dejo el libro y los lentes y corro al agua, ella me ve y jugamos en el agua y nadamos y hace un castillo de arena.

Por la tarde fuimos a otro restaurante para comer y luego seguimos en la playa.

Al caer la puesta de sol, empacamos todo y nos preparamos para irnos, nos compramos unos helados y seguimos en camino al auto.

Nos vamos a la casa y al llegar nos metemos a bañar,  ella en el baño de mi cuarto y yo en otro. Llego al cuarto secándome el cabello y estaba ella en pijama secándose con la secadora. Desde que dormimos juntos me tengo que poner por lo menos una camisa y un short, nos acostamos y nos quedamos dormidos.

★★★★★

Hola, solo quiero decirles que espero y estén bien en esta cuarentena,  porfavor permanezcan en casa y verán que pronto podremos volver a salir.

me has condenadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora