Robin Hood (yaoi)

En la noche estan las coincidencias.

Mientras Robin se encontraba caminando, en el castillo estaba el principe Juan caminado de un lugar a otro en su habitación frente el conejito.

- se acabó!, Que haré? No pensé que la magia desaparecería tan rápido, fue malos cálculos pero aún así...- el príncipe Juan parecía no ser el y no era solo por el hecho que esa no sería su personalidad normal también es por qué su voz ya no era la misma y su lunar ya no estaba su voz normal no estaba y la que ahora se apoderaba de la habitación era una voz suave y muy preocupada con bastante estrés.

-Nos tenemos que ir, el lunar desapareció tan rápido pero aún así pensé que la voz podría mantenerse un poquito más, demonios no puedo simplemente desaparecer... Ya sé- como una hoja y escribio "¡¡no molestar, estoy durmiendo, largo!!" Luego tomo una pequeña piedra que se encontraba en una de las macetas con plantas y la coloco encima de la hoja fuera de la puerta.

-eso debería ser suficiente, talvez... Vámonos se hace cada vez más tarde y tengo que volver temprano para que lo se den cuenta que me fui o piensen que me secuestraron.

El principe entro a una entrada secreta y salió del castillo estuvo corriendo un gran rato, llegó a el escondite de Robin y se empezo a alejar más y más. Mientras caminaba por el bosque logro ver a alguien al parecer acostado en medio del bosque, sin dudarlo se tapo la cara con un trapo, volvió a ver por todo lados y empezó a acercarse, no podía ver bien quien era aunque la luna brillaba mucho, todo porque los árboles le tapaban mucho, al terminar de acercarse la luna fue tapada por las nubes y no podía ver ahora mucho menos, así que se agachó silenciosamente y tratando de encontrar la mano (para sentir el pulso) de la persona acostada en el suelo, empezó a tocar el piso, hasta que la encontró y ese momento la luz de la luna dejo ver todo con mucho esplendor y el muy asustado Robin se levantó observando como esa persona frente a él le agarraba la mano.

No pudieron evitar asustarse tanto que parecía que vieron un fantasma, Robin por el hecho de que algún extraño le agarro la mano  y el no pudo sentir cuando se hacerco, y el príncipe porque esa persona estaba despierta y era nada más y nada menos que Robin Hood.

El primero en hablar fue Robin -¿Quien eres?

El principe no sabía que decir solo se levantó rapido - perdón me tengo que ir.

Antes de que saliera corriendo Robin se abalanzó y agarró su pierna - espera, nos emos visto antes ?

- no creo que sea asi, por favor suéltame!- dijo el príncipe juan algo nervioso por el imprevisto, recordando que la magia no se agota totalmente hasta dentro de un rato.

- espera, te soltaré si me muestras tu rostro - esas palabras alertaron más al príncipe Juan, el cual no quería parecer más sospechoso.

El silencio ahogaba el bosque y Robin seguia esperando hasta que sonó un rugido...

Continuará...