Un flechazo al corazón (Alec Lightwood)

Capítulo 17

|Sophie|

Luego de eso con el corazón roto sigo adelante, sin botar alguna lágrima de dirijo a la ducha para luego vestirme con ropa de combate, es bastante cómoda. Me estoy haciendo una coleta frente al espejo cuando sin tocar la puerta entran al rededor de cinco personas que empiezan a desordenar todo, entre ellas Alec, Jace y la chica que supongo es la prometida de Alec. 

-¿Quién es ella?- Pregunta curiosa.

-Soy...- Iba a responder pero Jace me interrumpe.

-Es una alumna, se dirigía a entrenar- Oh, mi ropa de combate.

-En realidad...- Sigo, pero ahora es Alec quien habla ¿por qué están tan raros?.

-Vamos, empecemos nuestra clase- Me toma de la mano y me arrastra por los pasillos hasta su habitación. 

-Esto no parece una sala de entrenamiento- Hablo con sarcasmo pero sin un tono divertido.

-Mira Sophie- Se acerca y me mira fijamente a los ojos, el es mucho mas alto que yo por lo que su cabeza está hacia abajo mientras que la mía hacia arriba, nos separan no mas de 30 centímetros pero se siente como si estuviéramos a metros de distancia. -Si la clave se llega a enterar de tus capacidades podrías correr un gran riesgo, y no voy a permitir que corras esa clase de peligro- 

-Vaya que eres bipolar- Suspira y por un segundo desvía su mirada pero se ve que se arma de valor para poder continuar.

-Sophie, te amo, te amo como no he amado a nadie en el mundo- Avanza un paso disminuyendo la distancia entre nosotros. -Pero esto lo hago por mi familia, no puedo permitir que los miren con desprecio ni que obliguen a Izzy a casarse con alguien que ella no elija. Por favor perdóname, si existe una vida después de esta permíteme compartirla contigo-

No le respondo, simplemente lo abrazo y nos quedamos así unos minutos. Al separarnos Alec libera un suspiro que parece haber retenido hace mucho. 

-Ustedes son lo único que tengo y ahora Magnus... junto con Simon y Clary, pero- No me deja continuar.

-Te entiendo- Acaricia mi cabello. -Siempre vamos a estar para ti- Da media vuelta y se va, cuando sale de la habitación escucho la voz de Magnus. Me acerco a la puerta para escuchar y noto que hablan de su matrimonio con Lydia, ambos se escuchan decepcionados.

-Pequeña Sophie, vámonos- Dice en un tono más elevado. ¿Cómo sabía que estaba aquí?, salgo y él ya está un poco adelantado por lo que apresuro el paso. Alec estaba quieto, con los ojos un poco vidriosos. Cuando paso a su lado le toco el hombro pero él no me mira.

-Adiós Alexander, no volveré hasta que te haya superado- Ahora si me dirige la mirada.

-No...- Suelta en un susurro y yo sin responder sigo mi camino.

*En casa de Magnus*

-Es que simplemente no lo puedo creer- Parece alterado y recorre la habitación de un lado a otro.

-Tiene sus razones, en un tiempo lo voy a olvidar y ya está- Suspiro y me siento en el sofá.

-Así no funciona el amor, he visto como te mira y no es una emoción que se acabe de un día para otro- No le digo nada y el me queda mirando. -Ok no hablaré más de esto, sólo quiero lo mejor para ti- Se sienta a mi lado y me enrolla con sus brazos.

-Te quiero Magnus- Le digo de corazón, se ha transformado en alguien muy importante en mi vida. -Por favor nunca me dejes- 

-Nunca- Me responde con seguridad lo que me provoca un alivio inmenso. Me despego de sus brazos y lo miro con malicia.