La extraña corrupción [Country humans]

9. Recuerdos, USA

Dejaron pasar un par de días, ya que el ruso no despertaba, así que nuevamente Norte le pidió a URSS o USA que le hablaran más de su adorada hermana durante la segunda guerra, está vez USA accedió.

Narra USA

Estaban compartiendo misiones que principalmente trataban de dejar fuera del territorio del filipino a imperio Japonés, sin embargo era obvio que está nunca aceptaría la derrota y de algún modo u otro volveria.

-Exploremos el perímetro, mi gente dice que han logrado capturar a algunos japoneses a los alrededores del campamento, probablemente podamos encontrar pistas de sus rutas o algún campamento no registrado por inteligencia- propuso ella algo desconcertada.

Había perdido un par de pilotos recientemente y eso había bajado sus ánimos bastantes, ya no había bromas y se volvía cada vez más estricta con el llenado de los tanques, municiones todo detalle que pudiera causar bajas.

-Bueno pero si nos superan en número nos retiramos pedimos refuerzos - acepte con seriedad.

Ella había tomado sus armas y se había adelantado, parecía estar acostumbrada al tipo de flora que existía en el lugar, sabía cómo moverse y eso no lo enseñaron en su entrenamiento, pronto se detuvo en seco y giró a verme algo alarmada apenas iba a decirme algo cuando todo se volvió negro para mí.

Al despertar ambos estábamos atados y frente a nosotros se encontraba la temible e imponente Imperio Japonés sentada y observándonos con indiferencia.

-Veo que despiertan... ustedes son los idiotas que han estado arruinando mis planes, patético- comento indiferente.

-Al fin te vemos Imperio Japonés, supongo que en estos términos es un disgusto verte- comenté resignado.

-En realidad es un gusto ya que los dos están despiertos me dirán todo lo que saben o nos divertiremos- propuso levantándose.

Sur no le despegaba la mirada pero no abría la boca en absoluto, es como si pensara o analizara a la del sol naciente, ni idea pero algo había en esa mente.

-¿Con quién debería comenzar? Quizás con el cara bonita - exclamó golpeándome con el mango de su espada.

-Así que espero digas algo preciosa o mataré a tu amigo- amenazó.

-Adelante... no me importa- soltó sur.

Ciertamente Imperio se veía confundida por su reacción y yo igual, solo esperaba que bromeara o que fuera parte de su plan.

-Si lo matas mejor para mí, podré recuperar mi territorio y después iría a buscarte así que sólo mátalo y ya no pierdas el tiempo - Hablo sur sonriendo.

-No me jodas México en ese caso acabaré primero contigo- exclamó furiosa la del sol naciente.

-¿Enserio te crees capaz de matar una guerrera Azteca? Bueno claro que puedes de todo estoy en desventaja, me imagino cuánto honor llevaras al matar a dos soldados indefensos, creo que eso más bien sería de cobardes - alegó para después recibir un golpe en el estómago.

Por mi parte intentaba ser discreto mientras trataba de quitarme las ataduras, Sur estaba haciendo un buen trabajo distrayendo a Imperio y yo debía ser rápido.

-¿Eso es todo?- cuestionó escupiendo la sangre.

-Debes estar enferma- se quejo la japonesa bastante asqueada.

-Estoy segura que si nos enfrentamos cuerpo a cuerpo aún después de recibir tus mejores golpes te ganaría sin problemas - alardeo la la tricolor.

Imperio realmente parecía furiosa así que comenzó a golpear a sur sin piedad, yo por mi parte había logrado quitarme las ataduras, cuando pronto  llegaron parte del escuadrón 201 junto con algunos de mis hombres.

-Demonios... Esto no acabará aquí- hablo la japonesa para después retirarse sin dejar rastro.

Desate a sur y la cargue regresando a la base aprisa para que la curarán su rostro estaba inchado por los golpes pero eso no impidió que dejara su deber de lado, cuando URSS volvió y vio a sur nos cuestionó que había sucedido, estaba furioso.

-Solo tuvimos una cita con Imperio...- soltó la tricolor aún con una bolsa de hielo en gran parte de su rostro.

-Silencio Sur!, USA habla ahora- ordenó el más alto.

-Salimos a dar una vuelta para ver si encontrábamos enemigos e imperio nos tomo por sorpresa, Sur la provocó para distraerla en lo que me quitaba los amarres pero cuando llegaron los chicos huyo - respondí serio.

-¿ESTAS LOCA? PUDO MATARTE- regaño el soviético.

-USA no hubiera soportado los golpes de Imperio, hubiera muerto - excuso molesta.

-¿Y tú si? Acaso te crees inmortal?- cuestionó él.

-¿Sigo aquí o no? - se burló la mexicana.

-No es un estúpido juego Sur- regaño.

-No lo entenderías URSS se de lo que soy capaz de soportar- grito ella.

Por mi parte estaba seguro que todos o la mayoría del escuadrón 201 estaba pegados a la oficina de URSS para escuchar la discusión y seguro que también mi gente, esto dará mucho de que hablar.

-Estas suspendida - hablo el comunista.

-¿Que?- Cuestionamos ambos.

-No volarás hasta nuevo aviso

-Oh claro que lo haré, para eso vine y eso haré, no me hagas dejártelo claro a golpes URSS- gruño ella irritada.

-Por favor, soy mucho más alto y fuerte que tú, no saldrán bien las cosas...

Y en efecto no salieron bien pero ... para URSS, cuando menos me lo espere ella lo había echado de su propia oficina y no se iba a calmar, no pronto al menos.

-¿Qué está pasando?- cuestionó Canadá algo asustado.

-Acabo de descubrir que a sur no le gustan los no por respuesta y mucho menos que le diga que no es capaz de algo- solté observando a mi hermano.

-Hay que detenerlos- exclamó nervioso.

Sin embargo fueron los soldados del ella que intentaron calmarla, parecía que está tenía problemas de irá de vez en cuándo y para mala suerte del soviético fue la gota que derramo el vaso.

-¿Todo bien ahí abajo? - pregunté al soviético mientras le observaba curioso.

-No sería la primera vez que me enfrento a la muerte... pero no pensé que tuviera un rostro lindo en esta ocasión- se burló algo adolorido.

-... Masoquista ....

Y fue ahí que aprendí que con sur hay temas que evitar entré ellas prohibirle hacer algo a lo que está decidida hacer.