Sus manos apretaban con fuerzas la crin de Caballito y su mirada esmeralda estaba posada sobre las manos de Jaskier, quien también se sostenía con determinación a aquel ser mágico que, no sabía el por qué, pero se había empecinado en protegerlos. Las ráfagas de viento impiadosas por la tormenta que se estaba gestando sobre ellos le azotaban el rostro y el cántico de Valdo no hacía más que vigorizarla, llenarla de deseos de victoria y guerra.
Ciri no comprendía nada, ni dónde estaba ni qué sucedía, ni siquiera podía saber quién era ella realmente o cuál era el alcance del poder que fluía por su sangre. Tampoco había tenido tiempo para pensarlo. Solo sabía que no iba a permitir ser tomada prisionera una vez más. Ni en este mundo, ni por elfos ni por humanos. Nunca más. La bruja ya había soportado demasiados abusos y demasiados cautiverios, ya no iba a tolerar otro. Iba a luchar por su libertad.
Miró al frente, hacia los jinetes espectrales y ya no tenían aquellas siluetas informes y aterradoras, sino que eran simplemente jinetes envueltos en armaduras pesadas, capas carmesí y espadas en mano. Eran muchos. Demasiados.
Había una joven elfa atacándolos con una alabarda, nunca la había visto pero llevaba sobre sus dedos los anillos que Ciri había dado a Jaskier, un Pegaso estaba a su lado, apoyándola en el combate. Por detrás, Valdo Marx acababa de llegar sobre los jinetes y había comenzado el ataque y Claire, con una especie de honda mágica, tiraba municiones explosivas sobre los jinetes, detrás de su bardo mercenario, montados sobre Kelpa. Sus cuerpos desprotegidos, sin armaduras, enfrentándose a un ejército legendario de elfos entrenados. Ciri tuvo miedo. Se giró y miró al poeta, Jaskier avanzaba con la misma determinación que ella, inspirado por el bardo, y sin armadura sobre su cuerpo, sin entrenamiento, solo con deseos delirantes de vencer.
Ciri tuvo miedo.
Escúchame atentamente, Golondrina. Ciri miró a Caballito que le hablaba en su lengua, aunque notaba que le costaba modular cada palabra. La Antigua Sangre que corre por tus venas te confiere una inmensa autoridad. Eres la Señora del Espacio y del Tiempo. Tienes un enorme poder. No permitas que los crimínales y los canallas te lo arrebaten y lo utilicen para sus fines innobles. Eres la Señora del Espacio y del Tiempo. A ti nadie te puede aprisionar.
Ciri apretó la crin platinada de Caballito y cerró sus ojos, porque la velocidad que el animal había alcanzado, incluso superaba la de Kelpa. Nadie volverá a tomarme prisionera. Seré mi propia dueña... Porque al parecer soy un ser único en este mundo y el mío. Al parecer soy mucho más de lo que yo misma soy capaz de aceptar. Soy poderosa... y puedo contra ellos. Puedo proteger a mis amigos. Y lo haré.
De golpe, Ciri tocó el cuerno de unicornio y sintió que su cuerpo se estremeció. Tembló, convulsionó sobre el animal y la Vidente en ella, le mostró nuevas imágenes:
Los labios de Yennefer, partidos, desgarrados, se mueven sin emitir ningún sonido, derraman sangre. Brillan sus ojos de color violeta, arden en el rostro demacrado, contraído, ennegrecido por el tormento, oculto entre las sucias greñas de pelo moreno.
Jaskier gritó a su espalda y llevó sus manos sobre su cabeza, mientras el unicornio continuaba su corrida desesperada. Anto lo sostuvo rápidamente, para que no perdiera el equilibrio. La Vidente, como siempre, había conectado con su mente para mostrar aquellas imágenes, que luego Ciri olvidaba.
- ¡¡Yennefer!! – gritó él y se prendió con fuerzas sobre la cintura de Ciri, dejando caer su peso sobre ella, porque sentía que su cabeza explotaba. - ¡Te torturan, Yennefer! Dioses... ¡¡Yennefer!! ¡¡Geralt!!
Los muros de piedra están helados. Igual que los grilletes de las muñecas y de los tobillos... Las manos y los dedos de Yennefer son una masa de sangre coagulada. Ratas por todos lados. Ella carece de fuerzas para combatir, se siente abatida... pero aquel grito la obliga a abrir sus ojos. Yennefer escucha la voz de Jaskier. Sonríe y se obliga a dar un poco más de sí. Tiene una oportunidad.
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The Witcher: Lanza una moneda a tus brujos
FanfictionHISTORIA COMPLETA (¡¡Spoilers de los libros!!) Empecé esta historia con ganas de simplemente escribir... Pero a medida que lo fui haciendo me he dado cuenta que la historia que quiero contar es la de Jaskier... y Ciri. Sería algo así como seguir el...