La amistad entre la familia de Iván y yo, se iba acrecentando poco a poco. Me consideraban ya parte de la familia, pues, no había reunión o fiesta en la que yo no esté presente. Cumpleaños, aniversarios, e incluso cuando salían en familia a algún lugar de paseo, ya sea al campo o a la playa, siempre los acompañaba. De igual manera, Iván también estaba en los acontecimientos importantes en mi familia. Esta Amistad se afianzó aún más, cuando en un paseo a la playa, a Susana, la hermana de Iván, al meterse al mar le dio un calambre y se estaba ahogando. Todos estaban entretenidos en otras cosas, y fui el único que se dio cuenta, no lo dudé, y fui corriendo al mar, logrando rescatarla. No me importó si acaso también podría haberme ahogado, mi sentido de solidaridad pudo más. Después de aquel incidente, Susana, Iván, y toda la familia, quedaron muy agradecidos. Susana en un acto de retribución, al saber que estaba buscando trabajo, me colocó a trabajar en la empresa en la cual ella era la Contadora general. Aunque al principio, entré sólo como asistente en un área administrativa, después pasé a trabajar directamente con ella en el área contable.
En aquella empresa, trabajaba hasta las cinco y media de la tarde, porque entraba a las seis de la tarde a estudiar. Algunos viernes Susana después de trabajar, pasaba por la universidad y nos recogía a Iván y a mí. Los tres de allí nos íbamos a comer algo, o a veces comprábamos comida para llevar e íbamos a la casa de ellos. Después de comer con la familia, nos poníamos a jugar algo, o a tomar alguna copa. Allí, en medio de las conversaciones, un día me enteré, que además de Susana y Mirella; Iván tenía un hermano más, quien se llamaba Adrián, el cual vivía con su Papá en otro país.
Los padres de Iván eran separados, él señor vivía con su segundo matrimonio en Chile. Adrián, por lo que me contaron era un poco rebelde, con problemas internos y a menudo tenía discusiones con su Mamá. Adrián había tenido un buen trabajo en Lima y estaba estudiando también contabilidad, pero no era lo que él deseaba y solo lo había estudiado obligado por su Mamá y sus hermanas mayores. En dos oportunidades había abandonado la universidad, no asistía y se iba a otro lado, cosa que su Mamá se enteró y tuvo una fuerte discusión con él. Adrián se fue de su casa y posteriormente se fue a Chile con su Papá, a trabajar y a vivir con él, en un negocio que tenía por el país del sur.
A Iván le hacía falta su hermano, por ese motivo vio en mí a un confidente y a un gran amigo. Me consideraba como un hermano a falta de este. Iván siempre me conversaba de Adrián, a pesar de también a veces pelear con él, en el fondo lo extrañaba. Cierto día, en medio de esas conversaciones, Iván sacó su álbum y me enseñó algunas fotos de su niñez y de su familia. Grande fue mi sorpresa al ver en medio de esas fotos, que el tal mencionado Adrián, tenía un gran parecido con Rubén, aquel muchacho que años atrás me dejó cautivado. Me causó sorpresa por el parecido y la carrera que estudiaba. Era mucha la coincidencia, pero el nombre no encajaba, para mí era Rubén, pero ellos lo llamaban Adrián. No quise ahondar más para no ser muy evidente, aparte que ya le había perdido un poco de interés. Mi interés ahora estaba centrado en mi amistad con Iván.
En toda reunión que había en casa de Iván, siempre estaba presente, ya era conocido por los tíos y primos de este. Era muy querido también por parte de ellos. Aparte de ser muy cortés, servicial y amigable, era un buen bailarín. A sus tías y primas le gustaba bailar conmigo. Me gane muy fácilmente a la familia, inclusive una de sus primas quería estar conmigo, por el carácter que tenía. Iván y yo nos convertimos en inseparables. Iván veía en mi a un gran amigo, pero yo, poco a poco me fui enamorando de él. Era tanto mi amor o ilusión por Iván, que al contarme éste que le gustaba una compañera de la universidad, le ayudé a estar con ella, con tal que sea feliz. Le hice como se dice acá: el bajo. Cuando Iván se convirtió en enamorado de Gianella, que era como se llamaba esta chica, ella nos invitó para su cumpleaños, a nosotros y a otros compañeros más de la universidad. El licor hizo estragos en mí, y en medio de una borrachera, como nunca la había tenido, me puse mal. Iván al verme en mal estado se acercó para ayudarme. Yo solo lo miraba con ojos desorbitados, y lo abrazaba....
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TÚ ME CAMBIASTE LA VIDA
RomanceJairo, un muchacho gay, quien al descubrir su sexualidad, decide experimentar secretamente y conocerse mejor. Posteriormente se reprime a sí mismo, no quiere aceptar a vivir plenamente su orientación, hasta que conoce a Adrián. Adrián, es la oveja n...