TÚ ME CAMBIASTE LA VIDA

CAPÍTULO IX

Adrián, tenía varias llamadas y mensajes de Paola, pero no los quería responder. Se encontraba echado en su cama, pensando en lo que iba hacer de aquí en adelante. Quería terminar con Paola, pero no sabía cómo hacerlo, sin que ella se sintiera dañada. En la cama del costado, Iván lo notaba preocupado, y se animó a conversar con él. Estaban solos en la casa, sus hermanas y su Mamá se habían ido al cine.

- ¿Qué te pasa marrón? Te noto preocupado, ¿Por qué no quieres responder tu celular? – le preguntó Iván.

- Es que es Paola - le respondió.

- ¿Por qué no le respondes, paso algo?

- Chato, creo que la cagué con ella. No debí apresurarme y decirle para estar, así tan rápido – le respondió con cierta preocupación.

- ¿Ya no te gusta?

- No, no es eso. Paola es guapa y simpática, nos llevamos bien.

- ¿Entonces?

- Es que no estoy enamorado de ella.

- Pero si es así, simplemente dile y ya.

- Ojalá solo fuera eso, pero el asunto es más complicado Chatito - respondió con un tono melancólico.

- Puta, no me digas ¿Qué ya la llenaste? – haciendo alusión a que pudiera estar embarazada.

- No, no es eso. Siempre nos cuidamos, la cosa no va por allí.

- ¿Entonces? cuenta pues. Haber ¿Qué pasa?

- Pucha Chatito, es muy difícil decirte esto, pero creo que ya es hora de conversarlo.

- Puta huevón, ya me estás preocupando, ¿Qué pasa? – preguntó de nuevo, sentándose al borde de su cama.

Adrián, miro al techo, tomó valor, y por fin decidió confesarle a su hermano sobre su orientación sexual.

- Chatito, antes que nada, quiero que sepas que te quiero como mierda, y pase lo que pase quiero que siempre recuerdes eso.

- ¿Qué pasa? ¿Tienes alguna enfermedad grave? de verdad ya me estas asustando.

- Chatito, soy bisexual – se confesó por fin Adrián, con voz temblorosa.

- ¿QUÉEE? – respondió Iván asombrado, levantándose de la cama.

- Si hermano, hace unos años atrás me di cuenta que también me vacilaban los chicos, y ahorita estoy cagado, porque estoy enamorado de uno.

- ¿Me estás bromeando no? – le preguntó Iván, sonriendo nerviosamente.

- Es difícil Chatito, no sabes lo difícil que ha sido para mí cargar solo, con todo esto - se puso a llorar Adrián, se sintió liberado.

- Pero no entiendo, si tú eres un puto mujeriego.

- Me gustan las mujeres, pero también he tenido cercanía con algunos chicos. Pensé que era algo pasajero, que me iba a pasar. Pero me enamoré de uno, ya te lo dije.

- Puta hermano, no sé qué decirte. Nunca me di cuenta.

- Solo me conformo con que no me juzgues - le dijo, quiso abrazar a su hermano, pero no se atrevió, temía ser rechazado por él.

- No, claro que no, jamás lo haría. Disculpa mi reacción, me agarraste por sorpresa. Pero no te juzgo, eres mi hermano, y que te puedo decir, solo que tienes mi apoyo. Es tu cuerpo, son tus preferencias y lo respeto.