Le conté con miedo a Gabriel lo que había conversado con Adrián, y me sorprendió que no se molestará.
- Es tu decisión, yo la respeto y confió en ti, no tengo que repetírtelo. Es más, Adrián me pareció bastante amable, bueno lo sentí incómodo en un momento, pero después trató de ser lo más amable que pudo, y lo fue de forma natural, no sentí que lo hizo forzado ni nada por el estilo – me dijo Gabriel.
- Si, también me di cuenta de ello, por eso accedí a conversar con él, además nos debíamos esa conversación. Y si, de verdad aquella conversación, me liberó también a mí – le dije yo.
- Que bueno, yo soy muy mente abierta en ese sentido.
¿Quieres que te cuente algo? – me preguntó Gabriel.
- Dime, ¿de qué se trata? ... le pregunte yo.
- Cuando éramos chicos, Paola y yo estuvimos. Eso fue antes de darme cuenta que me gustaban los chicos.
- ¿Qué, y cómo así? – pregunté.
- Cosa de adolescentes. Paola era un año mayor, siempre fue muy guapa. Empezamos a salir en grupo con varios amigas y amigos del barrio, fue así que nos enamoramos, en si fue solo una ilusión, tendría ella 16 y yo 15.
- Y ¿qué paso después, como así terminaron o por qué?
- Después, llegó un chico nuevo al barrio, del cual todas nuestras amigas se enamoraron. Allí me di cuenta que me gustaban los chicos, pues a mí también me gustó, la verdad el chico era muy guapo – me respondió con una ligera sonrisa en su rostro.
- No me digas que terminaron ¿por qué estuviste con ese chico?
- No, ella terminó conmigo para estar con él. Estuvieron poco tiempo. La cosa es que después de eso, volvimos a ser amigos, y lo somos hasta ahora.
- Y ¿cómo así estuviste con un chico por primera vez?
- De eso conversamos otro día. Si saqué el tema a colación, es para que sepas que no tienes nada que explicarme, Adrián y tu pueden ser amigos, respeto lo que decidas. Bueno ahora ya hay que dormir, me muero de sueño – me dijo.
- Esta bien, descansa. Nos vemos mañana en la tienda – me despedí.
- Chau bebe, también descansa y sueña conmigo – se despidió él.
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Tal como se lo había prometido a Adrián, lo iba a ayudar a contar su verdad a su familia. Con el apoyo también de Iván, un día nos reunimos con Susana y con Mirella, nos fuimos a cenar y después de allí les dije para tomar unas latitas de cervezas a orillas del mar. Después de haber tomado algunas, y ya con los ánimos arriba, me dispuse a conversar del tema.
-Chicas, nos hemos reunido aquí, porque hay algo importante que deben saber – les dije.
- ¿De qué se trata Jairito? ¡¡cuéntanos!! – preguntó Susana.
- Ustedes saben mi opción, y por lo que me contó Iván, lo tomaron muy bien – les dije.
- No pudo ser de otra forma papito, te queremos y respetamos tu opción. Además, tenemos otros amigos gays, y por favor, no son enfermos para alejarnos, son personas con gustos diferentes, es todo – dijo Susana.
- Ven Jairito, nosotros te queremos como eres – dijo Mirella, dándome un tierno abrazo.
- Que bueno porque, así como me entendieron a mí, me respetan a mí, y me siguen queriendo a mí, quiero que también lo hagan con...
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TÚ ME CAMBIASTE LA VIDA
RomanceJairo, un muchacho gay, quien al descubrir su sexualidad, decide experimentar secretamente y conocerse mejor. Posteriormente se reprime a sí mismo, no quiere aceptar a vivir plenamente su orientación, hasta que conoce a Adrián. Adrián, es la oveja n...