El Ángel guardián ◇Paulchard◇.+18

Capítulo 41

El video era de lo más horroroso,  dos tipos golpeaban y torturaban a Richard cual estaba atado a una silla sin poder ver, en ese video de escuchaba la risa de su madre con la de los tipos como también la mujer le hablaba en polaco y a continuación recibía otra porción de golpes. Luego que golpearon al menor hasta que lo dejaron inconsciente la madre hablaba lo siguiente:
“ si quieres tener vivo al prostituto de tu esposo quiero que pagues por él, de lo contrario lo voy a matar con esto".
La mujer mostraba una pistola cual sin piedad alguna le disparaba en la pierna del menor, luego de ese horroroso  espectáculo se cortaba el video. Paul estaba destruido, desesperado en lo que seguía leyendo los mensajes que habían.
En este había una dirección, le pedía la gran suma de dinero y lo más importante que fuese solo o moría Richard, su desesperación era tan grande por el peligro que corría su amado, la frustración de no poder contarle a alguien aquello que sucedía.
Solo tomo todo el dinero que guardaba en el hogar, a continuación  buscaba por su clóset algo muy importante; una pistola que cargaba por defensa personal, no iba a permitir que siguieran lastimando a richard e incluso estaba dispuesto a matar por el amor que tenía hacia él, como también olvidaba esa decepción que había vivido hace poco. Guardaba la pistola bajo su chaqueta y a continuación  guardaba el dinero en un bolso.
Sin esperar más salió del hogar subiéndose al carro rumbo a la dirección que se encontraba Richard. Era un terreno bastante alejado de la ciudad donde había una vieja cabaña, ahí estaba  dos tipos cuales reconocieron de inmediato al doctor, el bajaba con la típica mirada de miedo e inseguridad  pero por dentro estaba con toda la sed de venganza.
__ Señora, llegó  el maricon come vergas de su hijo. Dijo uno de los hombres luego reían ambos de ese cruel insulto.
Paul evitaba responder  ante el comentario, prefería mantener su compostura por miedo a que le hicieran algo más a Richard.
A continuación  salía la mujer, una señora bastante mayor, rubia de ojos azules profundos igual que Richard,esta miraba de forma despectiva al doctor y sin si quiera esperar más le preguntaba. __ ¿Tienes el dinero?.
__Lo tengo...
La mujer le hacía señales a los hombres cuales salieron, en el momento que ellos entraron un feroz y doloroso grito de Richard  se escuchaba dentro de la cabaña,  Paul mantenía su mirada abajo sin querer perder la cordura porque realmente le dolía escuchar como seguían torturando al menor.
Al momento se abría la puerta , los dos tipos estaban obligando a que Richard  caminara poR su propia  cuenta estando herido, el rostro del menor estaba desfigurado por los golpes y se veía débil por la pérdida de sangre por ese disparo no tratando.
__El dinero. Dijo la mujer en lo que al momento que Richard  estaba al lado suyo lo volvía apuntar con el arma pero esta vez en su cabeza.
Paul con todo sus nervios extendió  su brazo con el bolso que cargaba para entregarle el dinero pedido y los hombres sin piedad alguna empujaron a Richard  en los  pies de paul cual sin dudar fue asistirlo. Como podía lo ayudaba a levantarse para llevarlo al carro para subirlo, al tenerlo ya listo se dirigía ahora a entrar a este pero de pronto la mujer un disparo al aire.
__ No es suficiente. A continuación  los dos tipos se acercaban al docto.
Como este estaba tan quebrado de sus emociones no tuvo piedad, sacó  el arma y sin pensarlo detonó  un disparo directo en el pecho a cada uno de los tipos y  continuación  ellos caían desplomado.
__¡ Paul no!.
Richard gritaba con pocas fuerzas desde el carro en lo que intentaba salir de este para detener a su amado pero paul no le hacía caso, tanto como la madre de Richard  como el doctor se apuntaban  el arma, paul estaba perdido en su locura y sed de venganza que no le importaba cargar con un tercer muerto.
En es desesperación Richard  tomaba el móvil de paul para textearle  a christoph  para que llamaran a la policía o fuese él  para el lugar, tenía que impedir una desgracia.
__Veamos puto, como se sentirá este bastardo con su esposo lleno de plomo.
__ No me da miedo.
Sin pensar la mujer detonó  el arma dándole  un disparo  en la mano de Paul luego un segundo disparo en el abdomen.
__¡Paul!. Richard gritaba con desesperación.
La mujer sonreía sin piedad alguna e  lo que se acercaba más a hacia el doctor sin bajar el arma.
__Tu no mereces ni vivir.
Estaba a pasos de disparar cuando una patrulla de policías  junto con el enfermero llegaba al lugar, pedían que la mujer soltara el arma. La mezcla de dolor con rotura sentimental hacia que paul se desplomara.

…

__ ¿Cuánto hay que esperar?.
__ Oye pechugon, no te muevas.
__¡ La polla!.
__Por favor… Descansa…
__Le haré  caso a usted no al cabeza de coliflor.
Paul apenas recobraba conciencia, sus ojos apenas se abrían y lo primero que veía era a Christoph junto a la doctora  Lawrence  quien estaban atendiendo tanto como a Richard  como al doctor landers.
__¡ Estas vivo!. Dijo christoph  abrazando a su compañero con astucia.
__ ¡ auch!. Exclamaba paul tras sentir un fuerte ardor en su abdomen por el abrazo reciente.
__ Oye cara de pija, no me maltrates a mi chiquitín.
Paul volteó  su rostro  y ahí estaba Richard  sentado en la otra cama que estaba en el box, pese a que estaba golpeado y con vendaje hasta en su rostro le dibujaba una bella sonrisa, esa sonrisa que le regresaba la tranquilidad a Paul.
Los doctores le  explicaban a paul que había sucedido con los agresores de Richard debido a que paul había perdido su conciencia después de que llegaron los policías al lugar.
__ La madre de Richard fue arrestada, la llevarán a Polonia para que cumpla la condena, por suerte que alcanzamos a llegar de lo contrario ibas a morir… tienes dos disparos pero por suerte que no tienes comprometido ningún órgano y Richard,  tiene suerte de ser piernudo de lo contrario hubiese quedado cojo. Decía christoph  en lo que estaba acomodando el suministro de suero del doctor.
Paul está vez no se reía del chiste de su colega ya que estaba perdido en lo que había pasado, su mente había bloqueado algunas escenas como cuando le disparó  a los hombres .__ Esto no lo entiendo… así que… pero… ¿ cómo fue que tú  llegaste al lugar.?
Richard ahora se integraba a la conversación. __ yo le informé… Yo no quería que pasara algo malo… En ese momento Richard  bajaba su mirada, estaba tan conmocionado que no podía hablar del evento ocurrido sin llorar.
__Chicos, deben descansar ahora. Christoph  vamos. Le decía la esposa al enfermero.
Los chicos por ahora quedaban a solas y sin pensar Paul  se levantó de la cama para ir donde estaba Richard,  por más que sentía dolor  tenía la necesidad de estar lo más cerca de su amado. Se sentaba en la cama y sin pensar lo abrazaba con fuerzas, con lo sensible emocional que estaba rompía en llanto en lo que se aferraba a Richard. Este sin duda correspondía al abrazo evitando llorar más de lo que había llorado en todo ese mal evento.
__Paullie … cálmate por favor….
__ Richard  ¡ no vuelvas a salir sin mi! Una vez más te lo vuelvo a decir, no quiero una tercera vez que pases esto, si te pasa algo yo… yo… ¡ me muero Richard!  No puedo soportar que te lastimen… En ese momento Richard  interrumpió  el discurso del mayor con un beso cálido  lleno de afecto.
__Paul… Eres mi Ángel guardián… te amo y te prometo no volver  a pasar esto jamás en la vida… 
Richard  se separaba del mayor bajando su cabeza, esta vez él  lloraba nuevamente. __ Tuve miedo Paul… Sus manos se posaban en la mano que paul tenía  sana.__ Pensé  que iba a morir… luego cuando te vi que me rescatabas… Me sentía afortunado y un imbecil por romper una promesa… la vida me castigó  muy mal y tenía miedo de perderte cuando te dispararon… perdona por todo esto.
__Richard… Su libre mano se posaba en el rostro del menor secando sus lágrimas, pese a que estaba herida lo hacía de forma delicada.__Yo daría mi vida por ti, si es morir… En ese momento era interrumpido por Richard.
__ No Paul, no podría vivir sin ti…
__ Richard,  te amo mi pechugon…  Lo volvía abrazar con afecto.
__Maldito enano… Eres un bobo arriesgado… pero te amo.