¿Amor? ¿Qué es eso? [EN EDICIÓN]

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Era sábado, eran las cinco de la tarde. Estaba aburrido, mis amigos me invitaron a salir y dije que no quería.

Le escribí a Shoji, sólo quería hablarle porque últimamente me estaba comportando raro, así que ya extrañaba hablar con él como solemos hacerlo.

Shoji.

Ey, estás raro estos días.
¿Te sientes bien?

Estoy bien... Lo siento por eso.
¿Vas a hacer algo hoy?

Saldré con alguien de último año.

Si quieres, ven a mi casa mañana.

Allá estaré. Te hablo más tarde mi querido amigo.

¿Por qué escribes tan raro?
Compórtate.

Gruñón. Aunque así eres mi mejor amigo...

;-) Gracias. También eres mi mejor amigo, aunque sigo pensando que tu forma de escribir es extraña.

Ya no molestes, querido. Jajaja.

Supongo que ese amigo de último año con el que saldrá es Kimura... Me enoja pero no entiendo por qué, estoy raro estos días, es cierto.

Hola.

Hola, Nakano.

¿Cómo estás?

Bien. ¿Y tú?

Bien...
¿Qué vas a hacer hoy?

¿Yo?

¿Quién más? Si te estoy escribiendo a ti.

Jajaja cierto...
Nada, voy a ver algo en la tele.

¿En serio no saldrás?

Sí. ¿Es raro?

No. Es que creí que saldrías con Shoji.

¿Él te dijo eso?

No.

¿Entonces por qué pensaste eso?

Porque me dijo que saldría con un amigo de último año.

Shoji es agradable, seguro conoce muchos chicos de último año. Aunque creo que saldrá con Reina.

¿Yokoyama?

Ajá.

Ah...
¿Quieres ir a cenar conmigo?

¿De verdad?

Siempre preguntas cosas raras.
¿Quieres o no?

Sí quiero.

Nos vemos en el centro comercial.
¿Te parece a las siete?

Sí. Perfecto.

Nos vemos entonces.

Bueno.

A las seis y quince salí de casa, tomé un bus al centro. En cuanto llegué a la parada más cercana al centro comercial, me bajé y entré. Kimura estaba frente a una tienda de zapatos mirando... Es muy puntual. Caminé hacia él tratando de que no me viera, toqué su hombro para sorprenderlo. Él se giró y me sonrió.

-¿Te asusté? -Le pregunté.
-No. Sabía que eras tú. ¿Dónde vamos a comer?
-Donde quieras está bien, vamos a caminar por ahí para ver qué lugares hay.
-Vamos.

Mientras caminábamos afuera del centro comercial en la zona de restaurantes, él miraba al cielo. No me había fijado en su ropa, pero ahora que lo detallé, veo que se ve muy diferente a cuando estamos en el colegio. El uniforme con pantalón, camisa y corbata hace que todos nos veamos casi iguales.

Traía puesta una camiseta verde, camisa azul celeste por encima, también traía un gorro para el frío, bufanda y un suéter grueso, jean ajustado color negro zapatillas azul celeste. Se veía muy bien.

-¿Te gusta la comida callejera?
-Sí.
-¿Podemos comer ahí?

Señaló a un puesto de comida callejera, vendían ramen de todo tipo. Nos sentamos a comer... Fue muy divertido estar sólo nosotros. Nadie más que él y yo... ¿Qué estoy pensando? Debe ser que estoy colapsando por el insomnio... Aunque él es la razón de mis noches en vela.