Capítulo 1

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Brooke

Saliendo de mi cita con el doctor, me encaminó a la parada de buses, odio estar con gripe, en pleno verano.

¡Oh, la injusta pero infaltable gripe en verano! ¿Que haríamos sin ti?.

El calor no es precisamente mi clima favorito, ahora sumale el estar con gripe, ¡Una bomba!, como diría mi mejor amiga  Riley, Tu destrucción, como diría mi mejor amigo Evan.

Parada esperando el maldito auto bus, aparece frente mi un hoja y cuando digo frente a mi es que literalmente la hoja se pego a mi cara, la quito para tirarla al suelo, pero algo me detiene, mas bien la cara de alguien.

"Fiesta de bienvenida al hijo del famoso empresario Bruce Jones, los detalles serán publicados el día anterior de la fiesta ¡No te la pierdas y reserva tu entrada!".

Solo faltaba alguna pagina web para que la reserves, pero claro, no es de acceso a todo el mundo.

Clase media ha salido del chat.

¿Con que Dylan Jones esta de vuelta?.

Oh, la empresa Jones, esa que arruinó una pequeña, de acuerdo, una gran parte de mi vida.

—¿Por qué hacerle una fiesta de bienvenida? Ni que fuera el presidente—Bufó—Ni tan importante es el idiota.

El bus llega minutos después y le dedico una amable sonrisa al conductor, el trayecto a casa fue tranquilo, nada de lo que deba preocuparme, solo del infernal calor y mi gripe que apenas estaba comenzando.

Como odio engriparme.

Al llegar a mi parada me bajó dándole las gracias, camino a paso apresurado, el sol golpea justo por el lado que voy y está en todo su esplendor, así que ni un poco de sombra tengo. El sudor se desliza por mi frente, pegando mi pelo rubio a ella.

Odio el verano, viva el invierno.

Cuando llego a casa veo el auto de Riley estacionado frente a ella, Evan esta a su lado bufando por algo que dijo.

—¡Booki!—Sonrió ampliamente y abrazo a mi mejor amiga.

—El sudor no está a tu favor, definitivamente—Ruedo los ojos.

—Gracias Evan, yo también te quiero mucho—Se ríe y se acerca a desordenar mi cabello—¡Deja!—Estornudo.

—¡Ew,ew,ew!—Evan limpia su mano en su camiseta con una mueca de asco—Si me enfermo es tu culpa, toda tuya, de ti.

—Es la tuya, por venir a verme sabiendo que estoy enferma—Le saco la lengua y estornudo de nuevo.

—¡Intento ser un buen amigo!—Me mira ofendido—¡Riri! ¡Dile algo!.

Honey, vamos, estoy muriendo de calor—Riley ignora su pequeño berrinche, asiento y caminamos hacia mi casa.

—¿Vieron los folletos que están por todos lados?—Al entrar el ambiente lúgubre y de abandono se siente pesado y agobiante, suspiro y niego con la cabeza.

—Ya saldrán de eso Brooke—Riley pone una mano en mi hombro, dándome un poco de animo.

—No lo sé, Riley, desde esa humillación que le hicieron los idiotas de los Jones, ni la cocina quieren pisar, sienten que aun están en el ojo del huracán.

—Son fuertes, Booki, te han soportado durante dieciocho años—Evan me sonríe—Volviendo al tema ¿Que folletos?.

—Los de la frabullosa fiesta de bienvenida—Riley frunce su ceño—Bienvenido a casa Dylan Jones—Ruedo los ojos.

La mentira perfecta[✔️] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora