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-Rubius, Rubius-El azabache estaba intentando despertar al ojiverde que descansaba tranquilamente en la cama de sabanas moradas, pero el ojivioleta ya podia oler el humo que venia de pueblo, y eso le decia que se le estaba haciendo tarde.

-DOBLAS!-Grito y el castaño se desperto asustado.

-Joder, que te pasa Vegetta?-Pregunto mirando de mala manera a su pareja, pero cuando vio su cara de preocupacion se callo.

-Le pueblo se esta incendiando!-Grito y el ojiverde lo miro sin palabras-Debemos ir a ayudar a los chicos, ya estan alli-Dijo y tan rapido como termino, Rubius se estaba levantando de la cama para ponerse su ropa.

Cuando llegaron al pueblo,todo era un caos, se escuchaban gritos y llantos y Vegetta se sintio mal por un momento, pero intento que no se notara.

-Rabis!-Escucharon un grito y vieron a Luzu acercarse con uan niña dn brasos-Todavia hay gente dentro, hay que sacarlos!-Grito y se fue a donde estaba su omega que atendía a las personas que hiban llegando.

El castaño miro al rededor y vio que todos estaban sacando gente del pueblo, sin pedirle permiso a Vegetta se adentro para seguir buscando a la gente.

El olor a humo era insoportable para el fragil olfato del hibrido, y ah decir verdad le nublaba un poco los sentidos, sin embargo pudo escuchar perfectamente los pedidos de ayuda de una mujer y los llantos de una niña,se quedo callado intentando desifrar de donde venia el ruido entre las llamas y los escombros callendo.

Camino/corrio hacia la izquiera y pronto se topo con una mujer omega que tenia la pierna atrapada debajo de una viga de madera, una niña de unos 4 años que lloraba y gritaba a su lado, se acerco y la señora lo miro con miedo.

-No nos haga nada porfavor!-Suplico y Rubius solo hizo una mueca-Alehate de mi hija!-Grito y Ruben solo pudo suspirar.

-Quiero ayudarle!-Grito y con el sin consentimiento de la mujer se acerco y empezo a levantar la viga, no era realmente pesada, pero si eres una chica omega quizá se dificulta mas, el tenia que aceptar que ser hibrido lo ayudaba mucho.

La mujer lo miro sorprendida pero retiro la pierna cuando el castaño se empezo a ver cansado.

Ruben se acerco a la pequeña y le tomo la mano, la pequeña lo miro y sonrio, mirando con curiosidad sus orejas, la mujer simplemente se quedo callada, dejando que fuera la inocencia de la pequela niña la que juzgara al hibrido.

Ruben le devolvio la sonrisa a la niña y le sujeto bien la mano, para luego indicarle a la mujer que se subiera rapidamente a su espalda, la mujer acato la orden sin decir nada y entre el caos y las llamas, la mujer se sintio tranquila.


-Cari!-Grito Vegetta cuando vio a su omega salir del pueblo en llamas, cuando se metio a buscarlo habia encontrado a mucha gente y se habia visto obligado a sacarla del peligro, aun cuando su principal idea era abandonarlos a todos y buscar al castaño.

Se acerco apresurado y tomo a la mujer, que se retuvo un momento.

-Gracias-Murmuró,con los ojos llorosos y el alma arrepentida, porque ella tambien habia lastimado a ese lindo y amable , sol por un pasado que no le correspondia.

El castaño la miro asombrado y miro a Vegetta incredulo, este le sonrio y asintió, diciendole que no lo habia imaginado.

-No ah sido nada-Dijo y sonrio.

El ojimorado no permitio que Rubius regresara a la llamas y le dijo que intentara calmar a los niños, Rubius no puso resistencia y se dedico a cuidar con cariño a los niños, estos reian y miraban alegres al hibrido, porque los niños no guardan rencores y sus almas son puras, pronto los adultos tambien se vieron embueltos en esa alegria que el hibrido brindaba.

Al final, el pueblo solo pudo decir gracias.

"Gracias, a la unica persona que no abandono a la raza humana por su maldad"

EL ALFA DE RUBIUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora