EL ALFA DE RUBIUS

Prologo

-Haber si entendi- Dijo Vegetta tocandose el puente de la nariz con el ceño fruncido, delante de el estaba Lolito, el alacade, se notaba nervioso y estaba aturdido, estaba camino a su casa cuando Vegetta lo habia secuestrado, nisiquiera recuerda como.

Ahora mismo estaba que temblaba y que quede claro que nadie normal haria temblar a el antiguo psicopata de Karmaland y ahora alcande.

-Como MI osito no pago sus impuestos- Dijo abriendo sus ojos violetas que ahora parecian brillar con furia, dirigio su mirada a Lolito el cual sintio que moriria por culpa de su compañero alfa- Decidiste que le cerrarias la entrada principal haciendo que camine mas de lo necesario?- Pregunto molesto,clavando su murida en los iris verdes de Lolito el cual ya estaba a punto del desmayo

-Y-yo- No fue capas de contestar cuando la mirada contraria se agudizo avisandole que no podia dar una respuesta equivocada- Lo quitare!- Grito asustado por su propia vida, la mirada de Vegetta se tranquilizó y sonrio.

-Genial! Oh chaval yo pensando que tendria que utilizar otros metodos!- Dijo alegre mientras sonreia, Lolito trago saliva al pensar que otros metodos podia usar el pelinegro- Me alegra que se haya arreglado por las buenas!- Dijo sonriendo mas el ojivioleta, Lolito asintio violentamente,estaba palido y sus pupilas parecian sufrir un terremoto- Bien! Quiero que lo arregles antes de que Rubius despierte ¿vale?- Dijo con una sonrisa amable pero ojos asecinos, Lolito asintio sonriendo nervioso- Te puede ir,gracias por todo- Dijo meintras conducia a un Lolito semimuerto a la puerta de salida.
Lolito recobro la vida a unos metros de la casa de Vegetta, sonrio nervioso y penso que quiza Vegetta debia ser el nievo psicopata de Karmaland, lo habia echo temblar de miedo y eso no lo habia logrado nadie, era un alfa poderoso eso era seguro,mas que el incluso pero, cuando se trataba de Rubius parecia sobrepasar todos los rangos quedando encima de cualquier habitante de Karmaland.

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Rubius se levanto de la cama un tanto cansado, era curioso como por su naturaleza de oso se veia tentado a dormir a todas horas, incluso si no era invierto, se levanto y estiro una tanto molesto por tener que levantarse.

Sus orejas comenzaron a moverse en diferentes direcciones y su olfato persivio un lindo y agradable olor a fresas, se levanto apresurado al reconocer el aroma, bajo las escaleras lo mas rapido que pudo y salio por la puerta lateral, ya que (segun el) la principal estaba bloqueada, se apresuro a abalanzarse sobre su pareja en cuento lo tuvo a la vista.

-Buenos dias Vegetita!- Saludo alegre mientras se colgaba de su cuello pegando su pecho a la espalda del pelinegro que no tuvo las remedio que recojer las piernas del castaño y cargarlo.

-Buenos dias cari- Saludo de vuelta el ojimorado, observando la cara de alegria del contrario- Te tengo un regalito-Dijo jugueton aun con Rubius en la espalda.

-Que es?!- Pregunto alegre el de orehas de oso, estaba emocionado y Vegetta lo notaba, empezo a caminar haciendo que Rubius se exaltara ante el repentino movimiento, se aferro a el en busca de protección, rio cuando sintio el cabello de la cabeza de Rubius erizarse, el castaño solo hizo un puchero.

-Mira- Dijo Vegetta señalando con la cabeza la entrada de su casa, a Rubius se le iluminaron los ojitos y sonrio bajando de la espalda del mayor que miraba con alegria la cara del menor.

-Ciiiiii!- Rubius corrio a su entrada y empezó a abrir y cerrar la puerta de manera consecutiva mientras bailaba, Vegetta escuchaba los portasos y grititos de alegria del castaño, Rubius se detuvo un momento y miro a su alfa- Como...?- Dijo mirando a Vegetta con sospecha

-Solo a sido una conversacion, le e pedido AMA-BLE-MENTE que quitara eso de tu entrada- Dijo seguro de sus palabras

-Me vas a comer el coño con pan bimbo- Dijo Rubius en señal de creerle una mierda.

-Bueno quiza y solo quiza fue algo mas- dijo sonriendo nervioso, Rubius sonrio cerrando lo ojos,se acerco a Vegetta y se paro de puntitas oara alcanzar al desarrollado alfa, el solia ser mas alto, pero al ser omega se reducio su tamaño y acambio crecio Vegetta, lo miro algre.

-Gracias de todos modos,era un coñaso dar la vuelta- Murmuro rosando sus labios con los del contrario

-No a sido nada- Murmuro Vegetta rompiendo la distancia entre ellos, se separaron y se miraron

-Te amo- Murmuro el omega- Mi alfa- dijo rogulloso de las palabras que eso implicaba

-Yo tambien te amo- Contesto el otro- Mi omega-dijo sonriendo.

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Lolito temblaba en su cama, pensando que no dormiria en un tiempo.