Compitiendo Con Una Adolescente

3.7K 280 56
                                    

Cap 23.




Me remobi un poco inqueito al momento de sentir que estaba solo en mi cama, poco a poco abrí mis hojos junto a un bostezo y un pequeño estirón, quite las mantas que estaban sobre mi  rascandome la cabeza aun con algo de sueño, me dirigí al baño para rápidamente lavarme mis dientes y rostro, justo al momento de llegar veo la corbata de Ehitan sobre la ducha, sorei involuntariamente al recordar como ayer por fin pude hablar y expresar lo que sentía hacia el
- quien lo hubiera pensado, salió bien- pensé y sonreí nuevamente.

Al salir de baño me resibio un olor a quemado, asustado me dirigí a paso rápido a la cocina y me encuentro con la escena más increíble de todas.

-Diablos!! - Exclamó enojado- Estúpidos huevos - refunfuño.

Solo podía ver su esculturasa espalda desnuda, con un delantar rojo que solía usar cuando no quería mancharme al cocinar.

Me acerque a él lentamente y  puse mi mano sobre su hombro - Hey, que pasa porque tan enojado? - pregunte sabiendo ya la respuesta.

-Por eso nunca me meto a la cocina, no se ni que diablos es eso -Señaló los huevos quemados y suspiró con pesadez- yo solo quería hacerte el desayuno.

Su rostro era Digno de una foto, una que solo yo tendría. Estaba haciendo un puchero jodidamente adorable.

Lo tomé por su cintura y me incline un poco para estar a la altura de sus labios, inmediatamente el capto esto y gustoso unio sus labios con los míos es un beso lento y apacionado, lentamente nos separamos y sonrió.

-Sabes? No me molestaria despertar todos los días con un beso así - Susurro en mi oído.

-Eso ya lo veremos - Dije un poco avergonzado, en cuanto al desayuno...

-Al diablo el desayunó, te invito comer a fuera - Dijo.

-Esta bien -sonreí- tu ropa ya esta seca,  esta abierta en mi habitación, pero antes me iré a cambiar yo - el asintió- y... Igualmente gracias por intentar hacerme el desayuno - Dije rápidamente para luego dejar un beso en su cachete y correr hacia mi habitación como un niño que acabó de. Cometer una travesura.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Nos decidimos por una cafetería cerca de mí casa llamada Koops, eran las nueve de la mañana y no habían muchas personas en el local, - gracias a Dios- pensé, y es por este imponente hombre que tengo a mi lado, con su traje, barba de unos días y su rostro se ve como alguien realmente intimidan te, si lo vez a simple vista.

Rápidamente nos atendieron y nos trageron nuestro pedido, al momento de terminar Ehitan pidió la cuenta y una joven camarera vino a nosotos.

-Aquí esta, espero hayan disfrutado de su desayuno - Dijo Cortésmente observando me.

Ehitan frunció el ceño y pagó la cuenta, al momento de partir a quilla joven me llamó.

-Chico, casi dejas esto - dijo extendiendo me mi celular junto a un pequeño papel, ella vio mi expresión de duda y habló.

-Emmm es mi numero, por si alguna vez quieres salir a comer algo o hablar - Dijo tímidamente y fue tan inocente que me hizo sonreír.

-Oh pues muchas grcaias por el celular y....

-Y gracias por la oferta pero el no necista salir con nadie mas - Dijo una voz gruesa y cebera.

-Ohh yo... Lo siento... -balbusaba la chica avergonzada.

-No tienes nada porque disculparte, de verdad estuvo muy buena la comida, gracias nuevamente - Dije tomando a Ehitan por el brazo y sacándolo del local altes que se le ocurriera decir algo más inoportuno -Que fue todo eso? - pregunté.

-Solo dije la verdad -Dijo tajante.

-Estas celoso? - pregunté ahora con humor.

-Yo? No, para nada.

-Es obvio que no iba a hacer algo, esa chica fue muy tierna pero solo eso.

Ehitan me halo del brazo y estampó sus labios sobre los míos y tomandome por sorpresa, al terminar sonrió triunfante observando hacia el local y hay supuso lo que hizo, nisiquiera quise darme vuelta pero sabía que la chica nos estaba viendo.

-Es enserio? - Pregunté

-Qué? - sonrió inocentemente.

-De verdad estas compitiendo con una chica que si acaso tiene 18 años?

Sorto una enorme carcajada - diablos se me muy guapo- pensé.

-No es competir cuando sabes que tu oponente no tiene ni una sola oportunidad -Sonrió arrogante.

-Aparte arrogante he? Me gane el kits completo.

-Y binene incluido con muchas cosas más - Sonrió sinicamente.

De inmediato me sonroje -Eres...

-Ehhhh que no he dicho nada niño pervertido.

Me sonroje aun más y decidí mejor subir al auto para no perder más mi dignidad.

-Y ahora donde queires ir? - me pregunto.

-Sabes que hoy es un día de semana? es decir ambos trabajamos y me da la impresión de que tu deberías estar en el.

-Niño agua fiestas - Dijo- pero este fin de semana no te escaparas así tan fácil.

-Eso es... Una....

-Si, una cita - Dijo con firmeza.

Al momento su celular comenzó a sonar, con cuidado sacó su móvil del chaleco y frunció el ceño.

-Halo
-Si, si ya voy para allá.
-No vengas con tus estupideces Manuel, claro que no, no aun....
-si, si nos vemos allá.
Colgó.

-El es tu amigo... El de aquella vez no?

-Si, es el.

-Son muy buenos amigos no? - pregunté.

-Bueno... Auque la mayor parte del tiempo quiero aceceinarlo, es mi mejor amigo y aunque sea un inbecil, así lo quiero.

-Eso es Genial - Sonreí- anque se ve como un...

-Promiscuo? Si, lo es - Sonrió- no te imaginas cuanto.

Me tense por un momento y quise pregunatele algo más pero ya habíamos llegado a mi departamento.

-Querías preguntame algo? - Dijo notando mi cambio.

-Hemm no, nada -sonreí.

-Esta bien - se quito el sinturon de seguridad y me tomo del cuello para besarme.

-Estaré en contacto contigo - Dijo dejando otro beso.

-Bueno, cuidate mucho y suerte en el trabajo - Dije despidiendo me- te quiero.

-Yo también te quiero- Dijo con una enorme sonrisa, para luego marcharse.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

La cuarentena me tiene mal 💔
Estoy que cancelo el semestre de la Universidad.
Pero X espero que todos ustedes se encuentren muy bien, de verdad cuídense mucho y tomen las medidas necesarias para prevenir el Covid-19
Los amo y yo se que ustedes ya deben de odiarme.

Psdt: sigan me en Instagram @andresladeux16

Conquistando al Chico Raro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora