Dobles intenciones

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Kang Yeosang estaba perdidamente enamorado de Seonghwa.

Podía decir que fue amor a primera vista, ya que cuando lo integraron a la clase del mayor, al entrar en aquel salón, su mirada se topó con aquel chico que hizo que su corazón latiera ridículamente rápido, por lo que desde el primer día cayó rendido a sus pies.

Pero el pelinegro ya tenía a alguien que lo hacía feliz, y aunque se encontrara celoso e incluso decepcionado, jamás interfirió con aquella relación, al menos hasta que esta terminó.

Aquella separación la tomó como una oportunidad de cambiar su relación con su amor platónico, aunque este se veía totalmente destruido por aquel suceso. Pero Yeosang era terco, y no pararía hasta lograrlo, aunque sus acciones dañaran en demasía a alguien, que incluso ese alguien podía ser el mismísimo Park.

Aquella visita de Mingi lo sacó de su pequeña burbuja, recordándole qué tal vez el pelirrojo aún quería a Park, pero él estaba decidido, y aquella "pequeñez" no iba a retrasar su plan, así que al saber que el más alto quería hablar con el mayor, se negó rotundamente.

Algo dentro de él le decía que se detuviera, que no hacía ningún bien, pero al mismo tiempo se encontraba tan absorto en aquel chico que cegaba todo su razonamiento.

—Yeosanggie, ¿estás bien? —mencionó en un murmuro Seonghwa al observar al chico perdido en sus pensamientos, desde que había regresado de ver quien estaba parado en la puerta de su clases se encontraba así, por lo que la preocupación comenzó a surgir.

—No es nada, hyung, no te preocupes —respondió tranquilo.

—¿Quién era el chico que estaba fuera de nuestro salón?

Kang pareció pensarlo por unos segundos, hasta que con una sonrisa se limitó a decir —Nadie con importancia, tranquilo.

Sin más que preguntar, ambos se sumergieron en un ambiente silencioso hasta que las clases comenzaron de nuevo.


[...]


—Hyung, vayamos por un café.

Las clases habían terminado y ambos chicos se encontraban camino a casa, pero aquella propuesta del menor había sacado al pelinegro de su pequeño trance.

—Uh, yo... —y se calló.

Hongjoong estaba enfrente de ambos a unos cuantos metros. Caminando con parsimonia, emitiendo aquella aura tranquila que hacía que te sintieras cómodo, Seonghwa no supo en qué momento había detenido su andar para apreciar mejor al mayor, deseaba correr hacia él para abrazarlo y no dejarlo ir de nuevo, pero un brazo junto a un jalón lo sacó de aquel maravilloso mundo que había imaginado en ese momento.

—Seong-hyung, la cafetería está por acá.

Y antes de que pudiese negarse, el castaño lo arrastró hasta la otra acera entrando a aquel establecimiento que frecuentaban al hacer sus trabajos. Dejando a un pelirrojo estático mientras solo observaba la escena, para luego sonreír un poco y continuar su camino.



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Tiene tiempo que no dejo una notita por acá, pero como estos capítulos suelen ser cortos, no quiero aburrirlos con información irrelevante

Bueno, ¿qué tal les parece esto? ¿Les gusta? 👀

Realmente espero que lo estén disfrutando 😭

Que tengan un precioso día, ¡nos leemos!

- Ren 💛

Thank U | seongjoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora