Euristeo era tonto y cobarde. Sabía que
su primo Heracles era el verdadero
heredero al trono de Argos y por eso lo
odiaba y le temía. Pero se sentía
protegido por Hera, que seguía tramando
formas de que Heracles perdiera la vida,
ya que no podía matarlo directamente sin
enfurecer a Zeus.Aconsejado por Hera, Euristeo le
encargó a Heracles su primer trabajo:
matar y desollar al León de Nemea.
Esta vez no se trataba de un simple
animal feroz, como había sido el de
Citerión, sino de un monstruo en forma de
león. Su padre era el horror mismo: Tifón.
Su madre era la temible Equidna, una
criatura con cuerpo de mujer y cola de
serpiente.
El León asolaba la región de Nemea,
devorando ganado y hombres. Parecía,
además, sentir un gusto especial por los
niños pequeños.
Heracles, recordando su lucha contra el
otro león, pensó que solo se trataba de
encontrarlo y después sería presa fácil. En
cuanto lo tuvo a la vista, comenzó a
disparar flechas que, gracias a su enormefuerza, volaban a una velocidad que jamás
se había conocido. Pero las flechas no se
clavaban en la carne del león, rebotaban
en su piel invulnerable. Recién entonces
comprendió Heracles que no se trataba de
un animal como cualquier otro.
El monstruo se refugiaba en una
caverna con dos accesos. Heracles
comenzó por tapar una de las entradas con
una roca. Después cortó el tronco de un
olivo silvestre y se fabricó con él una
enorme maza. Ni sus flechas ni su espada
ni su lanza podían contra el león, pero al
menos logró hacerlo retroceder a golpes,
hasta que el animal entró en su cueva,
mientras el héroe lo seguía valerosamente
en la oscuridad.
Ahora el León estaba en su propio
terreno, al acecho en un rincón de lacaverna. Sus dientes brillaban, listos para
morder y desgarrar. En un instante
Heracles tuvo que tomar una decisión: no
podría estrangularlo, el monstruo era
demasia do grande para abarcar su cuello
con las manos. Envolverlo en un abrazo
mortal era demasiado peligroso, porque
no podría escapar de sus mordiscos. A
pesar de su fuerza excepcional, Heracles
todavía era un ser humano como cualquier
otro.
De un salto, abriendo sus fauces, el
León se arrojó con todo su peso sobre el
héroe, que no retrocedió ni trató de
escapar. Al contrario, lo recibió con el
brazo derecho hacia adelante y el puño
cerrado. En lugar de tratar de evitarlo, le
introdujo el brazo en la boca con todas
sus fuerzas, y su puño le traspasó lagarganta. Esta vez el León de Nemea
había tragado un bocado demasiado
grande. Asfixiado, en pocos minutos dejó
de respirar.
Heracles se había preguntado por qué
se le había especificado que su trabajo
consistía en matar al León de Nemea y
desollarlo. Una vez muerto, ¿desollarlo no
era fácil? Y sin embargo ahora se
enfrentaba a un problema aparentemente
insoluble: ¿cómo arrancarle la piel a un
animal cuya piel era impenetrable? Pronto
comprobó que tampoco el fuego la
quemaba. Por suerte, Heracles tenía tanta
inteligencia como fuerza y se dio cuenta
de que solo el León de Nemea podía
contra el León de Nemea. Usando como
cuchillo una de sus propias garras,
consiguió cortar su piel y arrancársela.Desde entonces se vistió con ella y la usó
para siempre como armadura.
Llevando el cuerpo del enorme león
desollado, Heracles llegó a Argos. Pero
su primo Euristeo no quiso verlo.
Aterrado, corrió a esconderse en su
palacio y prohibió que Heracles entrara a
la ciudad: desde entonces se comunicaría
con él a través de mensajeros.
Por consejo de Hera, ya tenía
preparado el siguiente trabajo para su
querido primo: matar a la Hidra de
Lerna... o ser muerto por ella.
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Dioses y héroes de la mitología griega
DiversosEn esta obra, Ana María Shua narra con un estilo magistral los relatos míticos más bellos. En sus páginas se encuentran el mito de la creación del Universo, el origen de los dioses del Olimpo, y las aventuras de los héroes más valientes, como Heracl...