Thiam Entre Roces, Cariños Y Odios

Jugemos con fuego

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Liam pov

Todos estábamos listos y en camino. La camioneta de Argent nos llevaba a Scott, Theo, al propio Chris y mi. Atrás de nosotros iban Lydia y Parrish en su patrulla. Theo nos guió lo más cerca que pudo del lugar donde el dragón los tenía prisioneros. Era una antigua mina a las afueras de Beacon, que hacía mucho que estaba abandonada. Llegado el momento tuvimos que abandonar los vehículos pues el camino era demasiado rústico para que pasaran.

Íbamos bien armados; Chris parecía llevar un arsenal encima, aparte de su acostumbrada ballesta que está vez tenía flechas con punta de madera, Parrish y Theo llevaban consigo escopetas cargadas con cartuchos llenos de madera del nemeton y ceniza de cerval. Yo por mi parte solo llevaba la espada de kira, la cual esperaba tuviera la fuerza para atrapar a esa cosa. Lydia y Scott optaron por no llevar armas, ambos confiaban en que sus respectivos poderes les brindarian el apoyo suficiente. Caminamos por algunos minutos hasta que tuvimos a la vista la entrada de la mina. Scott nos hizo una señal para que estuviéramos alerta y tomó la delantera junto con Chris, Lydia y Parrish lo siguieron de cerca, quedando a la retaguardia Theo y yo.

Estábamos en la entrada y listos para ingresar cuando se escuchó un rugido en la dirección opuesta. El sonido de sus alas delataba su cercanía. Todos nos unimos de las manos y Argent creo un circulo de cerval a nuestro alrededor y todo comenzó a arder. Las llamas del dragón se estrellaban contra la cúpula creada por la ceniza. Chris y Parrish esperaban los momentos en los que el fuego cesaba para disparar, muchas flechas volaron en dirección de su cuerpo pero era realmente veloz en el aire. Parecía tener bastante éxito esquivando tanto balas como flechas. La barrera comenzaba a ceder así que era hora de que Lydia entrará en acción. Sus poderosas ondas sonoras viajaron directo contra él y ella las enfoco lo más que pudo hasta lograr hacerlo vacilar en el aire. Chris aprovechó el momento para lanzar una flecha con punta explosiva a una de sus alas y así obligarlo a descender. Una vez se estrépito contra el suelo, todas las armas apuntaron y dispararon contra él sin cesar. Lydia y Theo aprovecharon el momento para salir de la barrera y entrar en la mina en busca de mi madre y de Masón, Tal como se había planeado y antes de salir Lydia abrió la barrera para que los sobrenaturales entrarán en la batalla.

Las balas parecían afectarlo pero no por demasiado tiempo, la flechas sin embargo lograban mejores resultados ya que estas debían quemarse en su cuerpo antes de que pudiera recuperar la movilidad. El dragón debió de percatarse de la entrada de mis amigos a la mina pues ignorando todos nuestros ataques decidió escupir fuego en su entrada, supongo que con la idea de derrumbarla pero Parrish una vez más se interpuso en el camino de sus llamas brindando una cubierta con su propio cuerpo a la mina. El tiempo pasaba y no había señal de Theo o de Lydia así que debíamos pasar a la siguiente etapa del plan; la primera fase de distracción ya la habíamos logrado, ahora venía la confrontación. Parrish fue el primero en lanzarse contra él, como en los tiempos de la bete du Gévaudan, intentando acorralarlo y capturar sus fauces para eliminar la mayor amenaza. Scott por su lado se lanzó armado de garras a por una de sus alas, mientras yo hacía lo mismo con una pata trasera y Chris no dejaba de disparar flechas a su cabeza y cuello. Con todos los esfuerzos aunados logramos reducir temporalmente al dragón. No pasaron más que unos minutos cuando Theo estuvo de regreso para ayudar a sostener al dragón contra el suelo. Me di la vuelta y pude ver a Lydia sosteniendo a Mason por el brazo con ayuda de mi madre. Estaban vivos, pensé; la alegría de verlos me brindó la poca fuerza que me faltaba. Era tiempo de la fase final del plan y de que yo entrara en acción. Todos nos alejamos de manera simultánea y Lydia arropo con uno de sus gritos a la criatura para mantenerla aún en el sitio, yo desenvaine la espada y me dispuse a clavarla en el suelo. Una gran brecha comenzó a salir desde la espada en dirección de la criatura. Chris uso varias flechas explosivas para mantenerlo desorientado por el tiempo que la brecha tardaba en alcanzarlo y Parrish al igual que Theo les vaciaron el cartucho de sus armas encima al unísono.