Thiam Entre Roces, Cariños Y Odios

Labios y celos

...

Liam pov

Desperté con mucha hambre, supongo que se debía a todo el ajetreo de la noche anterior. El pensar que había perdido a Theo en verdad me había descompuesto el cuerpo. Baje a buscar que devorar en el refrigerador no sin antes encontrarme con Theo que aún dormía en el sofá de la sala, así que trate de hacer el menor ruido posible aunque claro para alguien con un oído super natural hasta el sonido del exprimidor puede despertarlo.

Buenos días - Me dijo acercándose a la cocina aún con cara de sueño.

¿Como dormiste? - Le pregunté sin dirigirle la mirada pues las cosas estaban algo tensas entre nosotros. - ¿Quieres desayunar?

Si te apetece darme algo de comer. - Su cara demostraba su enojo y no dudaba en hacerlo sentir.

¿Por qué no me apeteceria? - Le dije devolviendole la mirada pero de forma más severa.

-No se, como parece que estas incomodo con mi presencia. - Hizo un ademán con sus hombros. - Pero no te preocupes, si me permites tomare una ducha y luego me iré para que tengas toda la libertad que desees. - Sabía por que quería hacerme enojar. Él aún estaba molesto ya que la noche anterior justo antes de irnos a dormir recibí una llamada de Hayden y decidí ir a otro cuarto a contestar, solo para molestarlo la verdad, para cuando regrese él salía de la habitación rumbo a la sala, llevándose por medio mi hombro en el camino.

Me causaba mucha gracia el verlo celoso - Muy bien, si eso es lo que quieres. - Su cara de decepción no tenía precio y disfrute cada segundo de ella a lo largo del desayuno, tal como dijo en cuanto terminó de comer subió y entro al baño a ducharse. Después de unos minutos subí para encontrarlo saliendo de la ducha dispuesto a vestirse con las ropas que traía la noche anterior en el incendio.

Esa ropa está sucia! - Le dije. - El volteo por un segundo pero no me dio respuesta solo se detuvo a oler la sudadera para luego tirarla a la cama con cierta agresividad. Parecía reflexionar sobre qué hacer mientras permanecía de pie inerte frente a la cama cubierto solo con la toalla. Era divertido verlo agobiado, no lo niego, pero en determinado momento mi corazón comenzó a encogerse, ya era suficiente. Me acerque a él y le di unas palmadas en la espalda. - Supongo que ya estás lo bastante consciente de que no tienes a donde ir, no es así?. - El era la personificación del orgullo, yo no me iba a mostrar sumiso.

Su rostro de estreñimiento era un poema, trago algo de saliva supongo que mientras juntaba valor.

-Liam, Podría quedarme un tiempo más aq... - por fin preguntó. - No! - Le interrumpi. - su semblante cambio en un segundo y sus ojos se llenaron de tristeza. - No tienes que pedirlo, yo nunca te he dicho que te vayas. Tu solo quisiste marcharte no se porque razón pero tu no me molestas aquí. - Termine de contestarle unos segundos después con una sonrisa que iluminaba todo mi rostro. Respiro muy fuerte cuando me oyó, estaba rabiando, muy seguramente estaria apunto de decirme alguna sandez pero le abrace antes de que lo hiciera.

¿Por qué pensarias en marcharte?, ¿Qué clase de idea tonta es esa? - Le dije mientras le estrechaba tan fuerte como podía, al principio él no me correspondio pero no tardó en cubrirme con sus brazos. Sentirlo, su espalda en mis manos y su pecho contra el mío, era tan sólido, eso me daba algo de tranquilidad.

- Liam, te puedo preguntar algo? - Me dijo separándome de él.

- ¡Claro!, dime..

¿Hayden y tu... ya sabes.. van a volver? - Hacer esa pregunta en verdad le costo, ni fue capaz de mirarme a los ojos mientras hablaba.

Me acerque bastante a su rostro -¿ Por que quieres saber eso?- Le dije mientras entrecerraba mis ojos. Sus mejillas mostraron cierto rubor en respuesta a mi cercanía.