Capítulo 13

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-María se llevo mi auto- le informe- ¿Me llevas?- pregunté sonriente

-No queda de otra- contestó de mala gana y comenzó a caminar. Cerré mi casillero y caminé detrás de ella hasta que la alcancé

-Alba- me hablo Marta que caminaba hacía nosotras, le di una dura sonrisa sin dejar de caminar como lo había hecho ella-¿Has visto a María?- preguntó tímida

-Estacionamiento- contesté sin ponerle mucha atención

-Así que no tienes amigas-preguntó mientras caminábamos hacia el estacionamiento por su auto

-No las necesito- conteste segura

-Según lo que veo María es la única que tiene 'acceso'  a ti ¿Cierto?

-Si...- contesté y reí-¿Y desde cuando te interesa saber de mí?

-Simple curiosidad, la forma en la que trataste a esa chica me confirma que que eres la persona más engreída que conozco-solté una carcajada

-Mira que coincidencia, tu eres la persona más engreída que conozco...- dije pero me arrepentí- No... Sabela lo es, tu eres la persona más antipática y amargada que conozco- sonreí hipócritamente

-Por qué no me dejaste platicar con tus hermanos?- le pregunté cuando ibamos en el auto

-No me interesa que se relacionen contigo- contestó fríamente- Así que no te les acerques mucho- dijo mientras empezaba a estacionarse.

Entramos a casa y todo parecía tranquilo hasta que de pronto un castaño bajo corriendo las escaleras, traía a la pequeña Elena en su espalda y estos eran perseguidos por Santi

-Miki te he dicho que no corras en las escaleras y menos si traes a Elena- le dijo acercándose a él para tomar a la pequeña en sus brazos.

-¡Mira Nat!- dijo Elena con suma emoción mientras le mostraba un papel con una princesa en uno de los lados

-Gracias Miki- se dirigió al chico previamente regañado

-No es nada- sonrío antes de salir por la puerta

-¡Mira!- repitió la niña- ¿Puedo ir? ¿Me dejas ir? ¡Por favor!- decía con una voz que si estuviera dirigiendose a mí, hubiera sido imposible decirle que no

-A ver ¿Qué es?- la bajo y tomó el papel para leerlo. Me mataba la curiosidad que causaba tanta emoción en la pequeña. Me acerqué y por encima del hombro de Natalia leí el papel rosa que tenía en sus manos. Era una invitación a una fiesta de cumpleaños.

-¡Ay que lindo!- dije con emoción- ¿Qué lindo vestido usarás?- le pregunté sin siquiera esperar la respuesta de Natalia

-Hey Hey Hey- dijo tranquilizándonos a ambas, ya que Elena saltaba de la emoción- Aun no te he dicho que sí - contestó sería, lo que no entendía era ¿Por qué ella autorizaba o denegaba la salida de la pequeña ¿Y sus padres?

-Por favor Nat- dijo la pequeña con sus hermosos ojos color miel

-Oh vamos Natalia déjala- agregué y Santi solo se limitaba a reir- Ayudanos Santi- le dije riendo

-¿Me daras pastel?- preguntó el pequeño a su hermana

-Si- contestó sonriente

-Déjala ir Nat- se unió

Después de nuestros insistentes 'déjala ir' y miradas de cachorros abandonados Natalia accedió a que la pequeña fuera a su primera fiesta sola

-¿Y qué te pondras?- Natalia rodó los ojos

Me myself and I (Albalia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora