Capítulo siete.

198 16 1
                                    

Su móvil empezó a sonar, interrumpiendo mis pensamientos. Lo sacó de su móvil y contestó.

 -¿Quien es? Oh, eh.. no, ya estoy llegando cariño. Me había encontrado a.. mi prima. Pero ya llego, de verdad, espérame. -Dijo. Parecía nerviosa.

Yo la miré extrañada y, cuando colgó, se levantó. Se quitó mi sudadera, subiendo sin querer su camiseta, dejando ver su tripa. Cuando se dió cuenta, se bajó la camiseta deprisa.

 -Yo.. Lo siento, era Cersei. Está esperándome en mi casa para dormir juntas y..

Noté como me daba una punzada el corazón, quería llorar.

 -Tranquila, ya nos veremos en clase.

Negó con la cabeza.

 -¿Podemos quedar mañana? A la misma hora, aqui.

No pude evitar sonreír, ¿en serio quería volver a verme?

 -Claro, aquí estaré.

Sonrió y, sin decir nada, se alejó de mi. Miré al cielo, recordando su dulce mirada, y cerré los ojos. Sinceramente, estaba triste. No soportaba la idea de que durmieran juntas. Hace un minuto estaba aquí, conmigo, y ahora está con ella

Pasaron varias horas, pero yo no me movía. Estaba absorbida por mis pensamientos. Pero un ruido despejó mi mente, era el tono de whatsapp de mi móvil. Suspiré y miré mi móvil.

-Aun no me has dicho por que te cortas. -Decía el mensaje.

Era de un número que yo no tenía guardado, lo miré extrañada. Pero, cuando miré la foto, sonreí. Era Shilley.

-Demasiados problemas. -Escribí.

No quería contarle mis problemas, no quería que pensara que era una chica depresiva. En realidad, lo soy. Me paso el día sola, pensando y llorando. Pero no quería que lo supiera.

-Tengo tiempo para escucharlos, quiero ayudarte. -Escribió.

Lo pensé durante unos minutos, no sabía si era buena idea.

-¿Me contarás tú también tus razones? -Escribí, pensando que igual ayudaría para ganarme su confianza.

-Claro. -Escribió ella.

Quizás sí era buena idea, igual así seríamos más intimas, hablaríamos más, nos conoceríamos más.

-Bueno, yo me paso el día sola. Mis padres trabajan demasiado y no tengo amigos. Solo veo el lado negativo de las cosas. Todos se meten conmigo.  Nadie me quiere. No me gusto, me doy asco. No me gusta mi vida, por eso me corto. -Escribí con los ojos llorosos.

Ella solo puso una carita triste. No supe que contestar. Bloqueé el móvil y lo volví a guardar en mi bolsillo, ¿había sido buena idea contarle todo eso?

Suicida enamorada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora