HEART; Loki Laufeyson

DIECISIETE

Cuando se reencontraron Frigga la tomó del brazo igual que antes, le sonrío y camino junto a ella por el palacio

— Si estás cómoda con esto, me gustaría ofrecerte más visitas, me encargaré personalmente y  podrás venir cuando desees

Tara curvó los labios y asintió

— Tara, sé que el temperamento de Loki no es fácil pero por lo que Heimdall dice has aprendido a lidiar con el 

— Creo que ninguno es fácil, Loki también merece méritos por lidiar conmigo — bromeó

Recargado sobre un balcón Tara visualizó a Thor hablando con una mujer

— Mi padre no lo sabe todo 

— Que no te oiga diciendo eso —habló la reina junto a ella, y ambas se acercaron. Thor no pudo disimular su asombro al ver a Tara junto a su madre

Entre presentaciones Tara pudo sentir la mirada de la acompañante de Thor, ambas mortales intercambiaron miradas, sabían que no pertenecían ahí. Un grupo de soldados pasó corriendo junto a ellos, e iban en dirección al calabozo

— Loki — afirmó Thor 

— Ve yo la cuidaré — respondió la reina

Thor se marchó y Jane se acercó a ambas

— ¿Está todo bien? — preguntó Tara 

— Seguramente si, acompáñanos Jane 

Las tres caminaron de regreso al portal por donde Tara había entrado. Frigga se quitó el delgado collar que llevaba y lo puso sobre el cuello de Tara, era dorado con una pequeña piedra azul.

— Loki me lo obsequió cuando era niño, y sé que le gustará que lo tengas — le tomó las manos — Estoy eternamente agradecida por lo que has hecho por mi hijo Tara

Ella se mordió el labio, quiso decirle que en realidad no había hecho nada digno de agradecimiento,solo  había amado a Loki y no veía por que aquello era un triunfo, aún así dijo

— Ojalá hubiera podido hacer más 

Jane miró a Tara incrédula, sin poder creer como podía ser capaz de amar a alguien como el.

Heimdall le dio una última mirada a Tara antes de que ella y Haakon volvieran a la tierra y ella tratara de aparentar que seguía con su vida hasta la próxima visita.

Loki quedó sumamente inquieto después de la visita de Tara, lucía confundida y enojada pero al menos, después de su charla, Loki creía que su posibilidad de volver a ella era latente. Había visitado el lugar donde había crecido y deseó haber sido el quien le mostrará todo a su alrededor, los lugares ocultos del reino y también los jardines; Maldijo a Odín por encarcelarlo y casi podía oír la voz de su madre diciéndole que debía pagar las consecuencias de sus actos

Se recostó y comenzó a jugar con una decoración de la celda, sonrió al recordar a Tara en su vestido Asgardiano, al menos, sabía que volvería a verla y eso aminoraba el sentimiento de abandono que tenía. El ruido proveniente de una celda cercana lo distrajo de sus pensamientos, se acercó a la barrera y se encontró con una criatura mirándolo fijamente, sonrió, siempre era bueno aceptar las oportunidades de vengarse de Odín que se le presentaban. Sabía que las intenciones del monstruo eran atacar a Asgard, pero también suponía que Tara ya estaba fuera de peligro, sintió el pequeño cosquilleo en las palmas de sus manos, aquel que solo llegaba cuando estaba a punto de cometer una travesura. 

— Te recomiendo que uses las escaleras a la izquierda