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Sentí un pequeño dolor en mi vientre y abrí mis ojos para mirar la hora, las cuatro de la mañana.

- Mm- me senté con dificultad en la cama y sentí a Dylan moverse a mi lado

- ¿Qué sucede cariño?- preguntó mientras acariciaba mi vientre- ¿Te sientes bien?

- Dyl- susurré cuando toqué algo húmedo entre mis piernas- creo que rompí bolsa

Dylan tomó las mantas para tirarlas hacia abajo y dejarme a la vista solo el pequeño camisón y abrió sus ojos sorprendido

- Demonios- se levantó corriendo y sentí mis lágrimas comenzar a caer

- Lo siento, lo siento Dyl- susurré mirando cómo se cambiaba como si lo siguiera el mismísimo diablo

Genial, la primera noche en la casa nueva y yo lo arruinaba, ni siquiera un día había podido aguantar

- Cariño, no, tranquila - se acercó a mí y me tomó del rostro- está todo bien, solo respira como nos enseñaron- besó mis labios suavemente- respira

Cerré mis ojos y respiré hondo cuando sentí algo cubriendo mi cuerpo por lo que abrí mis ojos para ver como Dylan estaba poniéndome una bata para cubrir mi cuerpo casi desnudo antes de tomarme en brazos.

Caminó hacia fuera donde me dejó en el auto para entrar a la casa y salir a los segundos con un bolso que tiró detrás antes de subir a mi lado y comenzar a manejar hacia el hospital.

- Todo estará bien cariño- dijo cuándo puse mis manos en mi vientre mientras intentaba respirar- amor

- ¡Solo maneja el maldito auto!- grité mientras comenzaba a llorar- Oh dios, voy a morir

Sentí su mano en mi vientre acariciándolo desesperado sin dejar de manejar cada vez más rápido

- Aquí estoy princesa, estoy aquí contigo- susurró

Si, iba a morir, jamás había sentido tanto dolor en mi vida y lo único que podía pensar era en mi bebé y en Dylan.

No podía dejarlos, tenía que resistir por él y por mi niño, ambos me necesitaban, pero Daniel estaba esperándome, lo presentía, en lo más profundo de mí ser, sabía que él estaba esperándome

Pocos segundos después Dylan estacionó en la puerta del hospital, si, aunque estaba prohibido, y me tomó en brazos para meterme en el hospital.

No presté atención, solo escuchaba voces discutiendo, dando órdenes mientras me sujetaba más y más fuerte de la mano de Dylan que no quitaba sus ojos de mí mientras seguía a la camilla donde me habían recostado.

- Veamos- escuché una voz y miré hacia donde estaba el doctor revisándome- debes pujar- dijo luego de unos minutos

Cerré mis ojos mientras apretaba la mano de Dylan y comencé a pujar como él había dicho, demonios, si me hubieran dicho que dolía tanto, hubiera suplicado por una cesárea

- Algo no va bien- dijo una enfermera y miré aterrada a Dylan

- ¿Cómo que algo no va bien?- gritó furioso y temblé

- Oh dios- grité del dolor y sentí mi cuerpo arder, mi cabeza doler

Poco a poco mi vista fue volviéndose borrosa y las voces comenzaron a sentirse más lejanas

- Charlotte- alguien me apretó la mano

- Daniel- susurré casi sin aliento.

- Estoy aquí- apreté su mano en respuesta- solo un poco más princesa, puja un poco más

Hice toda la fuerza que pude, escuché un ruido y luego un llanto y eso fue todo lo que escuché, luego todo se volvió completamente negro.

~

Cuando logré abrir mis ojos estaba en medio de una sala completamente blanca, jamás había visto un lugar así, jamás había estado allí, ¿Acaso había muerto? Y si era así, ¿Dónde demonios estaba?

- ¿Daniel?- pregunté caminando por unos blancos pasillos- ¿Dani?- escuché pasos detrás de mí y giré para quedar frente a una mujer de ojos azules, cabello rubio, alta y esbelta que me sonreía, ella era hermosa y si no fuera porque la reconocía, hubiera creído que era un ángel

- ¿Mamá?- murmuré

- Mi niña- vi como sonrió aún más

- Oh dios, estaba muerta, había muerto, ya no tenía dudas de eso.

- ¿Daniel?- giré buscándolo- Daniel... ¿Dónde está Daniel?- la miré aterrada y se quedó mirándome- ¿Mamá?

- Te amo- susurró

- ¡Charlotte!- escuché un grito desgarrador por lo cual giré para mirar hacia la voz- Vuelve... ¡Vuelve!- llevé mis manos a mi pecho, dolía, dolía demasiado

- ¿Dylan?- susurré

~

Sentí mi cuerpo sacudirse por lo cual unos brazos me tomaron enseguida apretándome contra la dura camilla y gemí del dolor.

- ¡Volvió!- escuché una voz lejana- la recuperamos

- ¿Dylan? - sollocé

- Aquí estoy, aquí estoy princesa- abrí lentamente mis ojos y lo vi a unos pasos de mí mientras unos doctores intentaban sacarlo de la habitación

- Dyl- levanté mi brazo hacia él- suéltenlo, suéltenlo- quise moverme nuevamente pero varias personas me tenían de mis hombros

- Señora Windsor, debe quedarse quieta- dijo el médico que aún seguía entre mis piernas y llevé mis manos a mi vientre aterrada

- Andrew- intenté sentarme- ¡Andrew!

Escuché un golpe y luego como soltaban mis hombros y unos brazos rodearon mi cuerpo

- Él está bien- susurró Dylan contra mi cabeza- mantente quieta amor, quédate quieta para que el doctor termine de curarte cariño- sentí sus lágrimas mojar mi cuello- creí que te perdía, Oh dios, Charlotte, creí que te perdía.

Me abracé a su cuello con mis brazos temblorosos y sollocé contra su cuerpo

- Señor, debe salir- dijo una voz seria por lo cual nos separamos y vimos al hombre de seguridad mirándolo

- Dyl- tomé su mano y me miró- no me dejes

- Estaré afuera princesa- se acercó para besar mis labios suavemente- no me iré a ninguna parte, aquí estaré esperándote.

Cerca de tu Corazón (DO'B)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora