Pharmacy (bts jjk)

Mammón

Mammón, principe de la avaricia, pecado capital.

Me aprieta entre su cuerpo y la pared a mis espaldas. Aun con los ojos cerrados puedo distinguir las luces cambiando de color. La sensacion que produce el contacto entre sus labios y los mios parece potenciarse a medida que pasan los segundos. Noto cada centimetro de su piel sobre la mia. Mis manos van a su cuello y lo atraen lo mas que pueden. Mis dedos cosquillean ante el roce con el cabello en su nuca y me permito enredarlos por completo entre ellos. Su torso casi me aplasta pero no quiero separarme ni un milimetro.

Pero nos separamos. Nos separan. Nos interrumpen.

-Eh.

Un chico con lentes de sol y gesto amargado lo llama. Su cabello rubio teñido pareciera cambiar de color junto con las luces.

-¿Qué?- Yoongi contesta de mala gana, apenas volteando a observarlo.

Yo veo a los dos desde mi lugar sin decir palabra, aun con mis brazos colgando sobre los hombros de Yoongi. Aunque el oscuro vidrio me impida corroborarlo, siento los ojos del intruso sobre mi.

-Tengo algo para ti- dice ahora.

Yoongi parece reaccionar, incluso pareciera que abre mas los ojos. Separa sus manos de mi cintura pero se acerca a uno de mis oidos.

-Regreso enseguida.

Voltea y el rubio le hace una seña para que lo siga. Yoongi vuelve a mirarme una vez mas, caminando hacia atras.

-Busca a Jungkook- grita alejandose.

De repente sonrio. Lo pierdo de vista y recuerdo sus labios. Sonrio y quiero besarlo de vuelta. Todo se siente bien. Todos parecen estar contentos por algo. Incluso yo estoy contenta por algo que ni siquiera sé que es.

<<¿Qué me ha dicho?>>

Escucho la musica. Me gusta y sonrio. Apoyo mi cuerpo sobre la pared y la fria superficie me produce escalofrios.

<<Ah, Jungkook>>

Sonrio un poquito mas pensando en él. También tengo ganas de besarlo. Yoongi me ha dicho que lo busque pero no estoy muy segura de donde estoy.

Me restriego contra la pared antes de despegarme y comenzar a caminar hacia cualquier lado. Me escurro entre la ola de personas bailando y saltando. Quiero caminar en linea recta pero la gente obstaculiza mi recorrido por la pista asi que debo cambiar de dirección no sé cuantas veces.

Siento la temperatura de mi cuerpo elevarse increiblemente y pienso en salir de en medio del cumulo de personas. Muevo mi cabeza hacia los costados una y otra vez hasta que doy con una puerta. Intento enfocar los ojos y noto que es una especie de balcon.

Como puedo me hago pequeñita para pasar entre brazos, torsos y cabezas. Me acerco a dicha puerta y siento una brisa fria calmar el calor que siento. Tengo que bajar unos escalones para poder salir completamente. Hay algunas personas pero estan mucho mas alejadas entre ellas y el oxigeno se reparte entre todos perfectamente.

La vista no es muy impresionante pero la diferencia de ambientes entre el interior de la discoteca y sus calles aledañas es abismal y hasta casi poetica.

Sonrio pensando en eso y sonrio pensando en lo mucho que sonrei esta noche. Todo parece estar bien. Incluso, a pesar de la musica pesada y las luces que marean, aqui afuera parece haber paz.

Pero algo me sobresalta. Alguien me toma por los hombros y me hace girarme sobre mis talones.

Veo el alivio desbordar de sus ojos.