Capitulo 4:

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IV

'Esa misma noche pasaron muchas cosas. Tantas que no sé por donde empezar.. Recuerdo que cada vez llegaba más gente a casa y yo queriéndolo o sin querer, no sé, lo buscaba con la mirada. Y cada vez que me giraba y no era él, me desilusionaba..no podía ser nada bueno. Decidí ir a la cocina con Vicky y le conté todo lo que había pasado, no era gran cosa pero yo desde siempre había sido muy enamoradiza y a la mínima me ilusionaba. Me prometí después de cortar con Alejandro- mi ex- que no volvería a caer por otra persona, que quería que pasara un tiempo hasta enamorarme de verdad pero por alguna extraña razón mi cuerpo no dejaba de reaccionar cada vez que Iván estaba cerca, era algo automático.

Quería dejar de pensar en ello, era mi cumpleaños y quería disfrutarlo y pasarlo a lo grande. Bailé, canté, bebí, grité, todo con Vicky, Amelia y Hugo . Sabía que esa sería una noche que siempre recordaría. Me fijé en el reloj y eran casi las tres de la madrugada. Tenía sed así que fui hacia la cocina, me separé de Hugo unos segundos.

Al llegar a la cocina abrí la nevera buscando un poco de agua. Al girarme vi a Iván apoyado en la barra. Me miraba con una sonrisa.

-Hola- susurré.

-Hola- me guiñó un ojo-¿Qué hacías?

-Buscar un poco de agua- moví la botella en mi mano- ¿Y tú?

-Buscarte- quiso acercarse a mi pero se abrió la puerta de la cocina. Era Marcos.

Nos miró a ambos y aparté rápidamente la mirada de Iván.

-¿Qué hacíais?- preguntó.

-Yo he venido a buscar un poco de agua- le sonreí- Voy a tomar un poco el aire- miré de reojo a  Iván y me despedí de ambos con la mano.

Me senté en las escaleras del jardín de la parte de atrás, no había nadie y lo preferí. Necesitaba despejarme un poco. Nunca sabía ponerle fin al alcohol y a veces necesitaba un respiro. Cerré los ojos durante unos segundos mientras intentaba relajarme. No sé cuanto tiempo pasé con los ojos cerrados pero la verdad que no me importaba, necesitaba pensar un poco en todo lo que estaba pasando, tenía miedo y yo nunca lo había tenido.

Volví a la realidad cuando noté que alguien se sentaba a mi lado y me giré asustado. Era Amelia.

-¿Qué haces aquí?- se rió. No iba muy bien que digamos.

-¿Sabes que a Ethan se le marca todo el paquete con esos jeans? Es muy sexy - puso una de sus manos en su entrepierna

-No me jodas, ¿Te pone Ethan?.

-Pero..-dijo ella- ¿Porqué no?

-Hey- ambos nos giramos ante esa voz. Agradecí que apareciese Iván. Se acercó a Amelia y lo cogió para llevarla para dentro. Le sonreí en modo de agradecimiento. Me levanté y me dirigí al lado de la piscina, me quité los zapatos y metí los pies dentro del agua. Bebí un poco más de agua y en mi fuero interno me prometí no beber nunca más alcohol, una promesa que en la próxima fiesta seguramente acabaría rompiendo. Sonreí ante tal pensamiento.

-¿Puedo sentarme?- me giré y le sonreí.

-Claro- Iván se sentó justo a mi lado.

Nos quedamos en silencio mientras yo moví los pies dentro del agua, él tenía una de sus manos apoyadas en el césped, cerca de la mía, como si quisiera tocarla pero que había algo que le impedía acortar la poca distancia que quedaba. Suspiré y le miré.

-¿Porqué me buscabas?- le pregunté y sonrió.

-Por nada en especial- me dijo- Solo quería estar un rato contigo.

¿Dónde Estás Amor?(Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora