El castigo de Bakugo fue más que justo, reparar todos los daños a la institución por su cuenta, no es como si hubiese hecho explotar un edificio entero. El problema fue lo adicional, Aizawa le ordenó que limpie un sector de la UA, era una especie de depósito particular ubicado detrás de un edificio del instituto.
Cuando el rubio fue a ver, entendió porqué les prohibían ir allí, se topó con un desastre lleno de artículos basura por doquier, hierba crecida y la pared trasera del edificio con moho y otras sustancias.
━Me lleva la...
Un trabajo infernal le esperaba.
Un trabajo que por supuesto él no pensaba hacer y que encontraría la forma de librarse de aquello.
Por otro lado, sus compañeros de clase parecían divertirse con el entrenamiento del día, como siempre, todos intentaban potenciar sus kosei, Uraraka no era la excepción, hacía levitar múltiples objetos tratando de romper su marca y soportar la mayor cantidad de tiempo posible.
Cierto joven con pecas se distrajo un momento observando el gran potencial que demostraba su amiga, en cuanto la castaña notó ésto, se puso nerviosa y perdió el control de una de las rocas que mantenía flotando, por accidente la envió fuera de el área permitida, muy muy alto.
La roca era pequeña, pero a esa altura y descendiendo en picada, ¡Era muy peligroso! Podría caer sobre la cabeza de alguien y... válgame Dios, Uraraka corrió a asegurarse que no suceda eso, pero fue inútil, la perdió de vista. Se sentiría muy culpable si alguien se lastimaba por su despiste, así que avisó al maestro sobre el incidente por si las dudas.
Cómo se nota que el destino o la casualidad la odian, porque esa misma roca cayó exactamente en el área de habitaciones del 1°A, y como si no fuera poco, se estrelló contra la ventana del cuarto del estudiante más aterrador de su salón, Bakugo Katsuki.
Como era de esperarse, la tarde acabó pronto, los estudiantes exhaustos regresaron a sus respectivas habitaciones. No tardó mucho en que los gritos de furia inundaran todo el nivel, varios salieron de sus habitaciones a corroborar que pasaba, incluso las chicas bajaron al piso de los hombres para ver, cuando se percataron de que los gritos venían del cuarto de Bakugo, una extraña presión se sintió en el aire.
Súbitamente Katsuki abrió la puerta, sosteniendo en su mano una piedra, todos se sorprendieron y dieron un paso atrás, confundidos.
━¡Algún imbécil tiró una piedra contra mi ventana y ahora...!━ Apretó con tanta fuera la roca que muchos pensaron que la rompería pero no, sólo la hizo explotar.
━Calmado Bakugo, no hay necesidad de ser agresivo.━ Exclamó Iida.
━¡Dices eso porque no es tu puta habitación la que está hecha mierda!━ Respondió de inmediato el rubio ceniza a la defensiva.
Tsuyu miró con preocupación a Ochako, sabía perfectamente que ella fue la culpable debido al incidente anterior, se miraron entre ellas, la rana le sugirió que se mantuviese callada por su propio bien, pero el sentido justiciero de la castaña no le permitía huir de sus responsabilidades.
¿Qué otra explicación podría haber? Coincidencia no fue, ¡Fue su culpa! Uraraka inhaló profundo e interrumpió la discusión entre Tenya y Bakugo.
━¡B-bakugo-kun, fui yo!━ Tras decir eso, se paró frente al mencionado, todos fijaron su atención en ella. ━Fue un accidente, y sé que corre por nuestra cuenta si algo malo le sucede a las instalaciones del instituto, pero yo...━ Se posicionó frente a él, se inclinó cerrando los ojos y apretando los puños. ━No tengo dinero para pagarte, ¡Por favor perdóname!
Uno, dos, tres segundos de silencio.
Él no mostró ninguna expresión facial, sólo escuchó atento todo lo que la cara redonda tenía que decir.
━Entiendo, son cosas que pasan.━ Suspiró y desvió la mirada al momento en el que Uraraka lo vio a los ojos, todos los presentes lucían atónitos, impactados, como si hubiesen presenciado un Apocalipsis en persona.
━Gra...
━O eso es lo que diría un imbécil. ¿De verdad pensaste que te librarías con esa patética disculpa?━ Y ya todo cobró sentido. Ningún villano podría igualar la sonrisa aterradora que tenía Katsuki en esos momentos, Ochako palideció. ━¡Me pagarás de otra forma, cara redonda!
Tras decir eso, la tomó de la muñeca y la jaló hasta su habitación, cerrando de un portazo la puerta, otra vez. Uraraka, asustada, intentó safarse, pero él le ganaba en fuerza. Sus amigas quedaron boquiabiertas cuando Katsuki se la llevó y la última frase de ella antes de entrar fue: "Estaré bien." Desafortunadamente las palabras de Ochako no eran acordes a sus gestos faciales.
Por su parte, los hombres en su mayoría malpensaron por completo la escena, ya que Bakugo no especificó cómo le pagaría Uraraka... los murmuros indecentes comenzaron a oírse en el grupo. Momo pidió que todos regresen a sus habitaciones para no llamar la atención de los maestros, la mayoría hizo caso, otros se quedaron a oír tras la puerta.
ESTÁS LEYENDO
Accidente. ⌦ᴋᴀᴄᴄʜᴀᴋᴏ
RomancePor circunstancias de la vida, Uraraka termina rompiendo la ventana de la habitación de Bakugõ, y para enmendar su error, éste le pide que cumpla un pequeño favor, ella acepta sin saber el infierno en el que se metió.